En cuanto entro Alexander pudo apreciar la hermosa figura que estaba sentada enfrente del oficial, sin disimulo la recorrió de los pies hasta la cabeza quedando un buen rato viendo aquellas torneadas pierna. Elaine tenía unos tacones de aguja color negro sus piernas color chocolate una sobre la otra dejando expuesta una parte de sus muslos al traer un vestido rojo ceñido a su cuerpo y estar sentados en esa posición hacia que se le subiera un poco provocando que aquel hombre quedara embelesado admirando sus piernas. Cuando Alexander por fin dejó de examinar cada milímetro de la piel de aquellas piernas la observó a la cara que lo miraba con un ceja enarcada manteniendo sus brazos cruzados sobre su pecho mientras su espalda descansaba ligeramente en el respaldo de la silla
—Si ya el señor ha terminado de verme con descaro las piernas —le hablo al policía —, ¿Podemos ahora si empezar? Enserio tengo mucha prisa
—Claro —dijo el policía mientras e aclaraba la garganta y hacia que estaba desde hace rato viendo aquellos papeles
Para Elaine no había pasado desapercibido que igual que el hombre que tenía al lado se había quedado embelesado en sus piernas. Ella solo rodó los ojos mientras hacía una mueca que solo Alexander que la había estado observando pudo apreciar y sin evitarlo una sonrisa se formó en sus labios
—El día de ayer hubo un robo en el banco Express, entre las 12:00 y 14:00 hrs —los observo —, las cámaras del banco los capto a los dos en diferentes horas dos veces
El semblante de Alexander era tan neutral como lo era el de Elaine
—Ok, creo que no somos los únicos que pudimos pasar por ahí —dijo Elaine con fastidio —, en el planeta somos aproximadamente más de 10 mil millones de personas. Y aquí en Chicago somos más de cien millones, entonces ¿Cómo es que solo nosotros?
Elaine lo señaló para luego señalarse
—Somos los únicos sospechoso
—Por que usted fue captada por la cámara, cuando se mantenía parada observando el banco por lo menos una media hora
Elaine soltó un suspiro que parecía de fastidio pero en realidad era de frustración al darse cuenta que había cometido un error
—Para luego pasar por el mis lugares justo a la 13:45 pm, con un semblante nervioso y en la cámara —le mostro el video —, la vemos pararse otra vez enfrente del banco. Voltea a ver a todos lados para luego responder una llamada y cambiar a enojo. ¿Usted puede explicar, por qué se paro en el banco dos veces? ¿Y por qué después de esa llamada cambio su semblante?
Elaine soltó una pequeña risa mientras negaba
—La primer vez cuando me quede viendo el banco fue por que estaba decidiendo si entrar o no al banco para retirar dinero —el policía alzo una ceja —, pero decidí no hacerlo por que se me hacia tarde…
—¿Para que? —pregunto con una sonrisa el policía —, por que las cámaras la ubican en el parque
Elaine sabía que solo la estaban confundiendo para que ella cometiera un error
—¿Si me ubican en el parque? Por qué no me dice con quién me reuní —el semblante del policía cambio —, por que yo fui a reunirme con una persona justo por el parque pero no llego y si estaba nerviosa es por que cuando esperaba alguien perturbó mi espera. Por eso estaba nerviosa y si cambie mi humor fue por que la persona que estaba esperando me dijo que no iba a ir cuando pudo haberme dicho antes que lo esperara como tonta
Alexander se reprimió en soltar una risa, en cambio sus labios se curvaron en una sonrisa que cubrió con la palabra de su mano. Era buena mintiendo y eso le causaba intriga, era obvio que ella no tenía que ver con el robo tampoco había estado esperando a nadie y con lo del nerviosismo si pudo ver algo pero nunca creyó que fuer para tanto
—¿Puede comprobar que esperaba a alguien? —escucho al policía
—Puedo marcar, a quien estaba esperando para que venga y declare ¿O prefiere hablarle usted?
—No, usted puede hablarle
Alexander pudo ver como aquella mujer sacaba de su bolso su teléfono, pero lo que él llamó la atención fue las letras incrustadas en aquel bolso. Ella detuvo su búsqueda cuando observo que aquel hombre se quedaba fijo en las iniciales de su bolso, él rápidamente al darse cuenta desvió la mirada
Después de escuchar la llamada en altavoz y asegurara que la persona testifica a favor de la joven, el oficial la dejó ir. Los dos la observaron irse pero mientras Alexander estaba observando las iniciales del bolso el policía estaba con la mirada clavada en el trasero de aquella mujer. Al darse cuenta Alexander se aclaró la garganta haciendo que quitara los ojos de aquella mujer
—Bien señor —observo los papeles —, Jones. Aquí dice que tiene varias inversiones en negocios y también que tiene una cuenta en ¿Suiza?
El policía alzo una ceja y el asintió
—Así es, tener un buen cerebro ayuda a ser alguien importante —sonrió —, ¿Va hacerme las mismas preguntas? Para que yo le responda
—¿Qué hacia ese día en el parque de la luna?
—Fui a pasear —dijo seguro de si —, y luego me fui a tomar una copa en el bar “La hora feliz"
—¿Por qué fue ahí? No me lo tome a mal pero un hombre de su… categoría no debería ir a esos lugares podrían robarle, ¿No teme que le roben?
Esas palabras le hicieron hervir la sangre y una risa burlesca salió de sus labios
—¿Robarme? —apoyo sus codos en la mesa —, ¿Alguna vez se a preguntado? Si ellos roban por que quieren. ¿No?, eso creí hay gente oficial…
Alzo el gafete que cargaba el oficial
—Smith —lo soltó —. Hay gente que se ve obligada a robar, solo por que la vida no ha sido afortunada para ellos, solo por querer llevarse un plato de comida a la boca. Pero esa gente es tratada como delincuentes peligrosos cuando el verdadero delincuente se viste de Armani o Prada, conduce un Ferrari o un Mustang e incluso manejan ambos y los tratan como un rey. Así que no, no tengo miedo de que me roben