"Primeras Horas." -Primera parte.
Adem.
Nuestro pueblo calla ante el último aliento de quién fue su rey, ante una repentina pérdida muchos y algo que se veía venir para otros.
La lluvia da contra el cristal mezclándose con la fría brisa que se cuela por todo mi cuerpo.
—Adem, entra o enfermaras. —dice Carlie cubriéndome con una manta.
Hago lo que me pide, me siento en un sillón con la vista fija en la ventana.
—No lo entiendo, no entiendo cómo se fue tan rápidamente. —Carlie se sienta junto a mí para pasar sus piernas sobre la mía.
—La muerte es algo que jamás entenderemos, ella tiene sus tiempos y su propia definición de justicia, solo ella sabe cuándo y cómo debe llegar. —suspira para luego besarme, diría que es raro en ella pero ya entendí que ella cuando ve que uno está mal intenta desorientar tus sentidos para que te olvides por un momento de todo.
Pasa sus manos por mi rostro y las deja allí para profundizar el beso.
—Yo sigo contigo. —murmura. — Creo que deberíamos ir con tus hermanos, ellos están igual que tú además Dorian dijo que tenían que hablar ambos.
—Es sobre el trono. —murmuró cansado. —Debemos dar la noticia personalmente aún cuando ellos ya lo saben por confirmación oficial.
—¿Tú hermano ya asumirá el trono? —me pregunta.
—Estamos de luto por tres meses, nadie tomará ese lugar, Dorian debe cumplir con las tareas de rey porque es el príncipe mayor de la corona y ya luego de los tres meses si. —le digo aún sabiendo que eso no es para nada seguro.
«¿Cómo le digo que Dorian no quiere la corona?, ¿Cómo le digo que mi hermano solo está esperando que pasen esos tres meses para irse de Dinamarca y cambiar de aire por un tiempo?»
En este momento mi mayor miedo no es ese trono, es que ella se vaya como pienso que lo intentará en cuanto sepa que debe tomar una corona en la que no cree, no quiere creer y está en su derecho de hacerlo, pero ella en caso de que ella la tome deberá defenderla a capa y espada, sin importar que no fue educada ni instruida con los mismos valores que nosotros.
—¿Conoceré a la esposa de tu hermano? —pregunta intentando sacarme temas de conversación.
—No creo, él le pidió el divorcio y ella para intentar retrasar todo se fue del país, así que no creo que regrese porque no me imagino a Loren regresando sin títulos cuando ella se fue con ellos.
—¿Por qué le toma importancia a eso? Es decir, en el siglo XXI que alguien te pida el divorcio no es una deshonra ni mucho menos.
—Si bueno, ella ya se veía reina y si la conocieras entenderías el porque ella no regresará, ella no baja la cabeza ante nadie pero no como tú sino porque ella cree que al casarse con mi hermano podía pasar por encima de cualquiera, olvidando como ella inicio.
Alguien toca la puerta.
—Adelante. —digo para luego ver a mi hermano pasar, sus ojeras ya son evidentes.
Carlie al ver entrar a Dorian se pone de pie.
—Bien iré a preparar algo de comer, los dejo para que hablen. —no es para nada desapercibido ante mis ojos la pequeña reverencia que ella le hace a mi hermano.
Cuando ella se marcha Dorian me mira a mí.
—Entiendo que aún no le dices. —bufa. —Antes solo era un hecho posible ahora es una realidad Adem, yo dentro de tres meses voy a abdicar al trono y tú al igual que ella deberán tomar el trono y no veo que la estés instruyendo.
—¿Cómo puedo hacerlo sin decirle? No quiero que ella huya de mí, además ella no cree en nuestro sistema monarca.
—Pues debe aprender a comprenderlo porque en caso de estar encontrar a este se convertirá en una más de los rebeldes que están intentando tirarlo abajo y no veo que tengamos un buen futuro si nuestra reina es una rebelde anti monarquía.
—Si tú tomas el trono no habrá problemas. —intentó convencerlo nuevamente.
—Ya dije que no Adem, no lo haré, ya estoy cansado llevo años viviendo por todo esto y ya no lo quiero más, no estoy rechazando al reino solamente a la corona, necesito alejarme un poco de esto para encontrar eso que realmente me motive, así como tú lo hiciste ¿Es difícil de entender eso? Estos tres meses tendrás la libertad de hacer lo que quieras sin que nadie te juzgue pero cuando se cumpla ese periodo te quiero aquí para cuando yo dejé la corona, tu la tomes, sabes bien que no podemos dejar esto en manos de rebeldes y ellos están esperando a que la corona toque el sueño para hacer caer incluso a la corte. —suspira frustrado. —Ese es el tiempo que tienes para que ella ame esto, para que ella sea capaz de pelear por esto porque si de algo estoy seguro que es que en cuanto salgamos a decir oficialmente que el rey ha muerto los rebeldes llegarán a la puerta de este palacio a pedir que terminemos con la monarquía.