Eres Mi Sueño©

CAPÍTULO 11

—Creo que moriremos—no puedo evitar que mi voz salga temblorosa. No me culpen, jamás en mis 19 años había visto un arma, al menos no en la vida real, y mucho menos una que estuviera a 10 centímetros de mi rostro.

Dave levanta las manos enfrente de él, en señal de rendición.

—Tranquilo, tranquilo, hombre. No hay necesidad de apuntarnos con esa horrible cosa.

Lo único que soy capaz de hacer es refugiarme detrás de mi mejor amigo. Creo que no soy tan valiente después de todo.

—No hagan nada estúpido y entonces nadie saldrá herido. — Por Dios, ¿acaso, este hombre no sabe lo que conlleva su verdadero trabajo? Yo que no soy policía sé que se trata de protegernos y no de, apuntarles a personas inocentes con esa cosa.

—No hemos hecho nada malo, señor. Solo estábamos en una fiesta, como cualquier otra persona a nuestra edad.

—Eso no fue lo que nos comunicaron, niñato. Ahora guarda silencio si no quieres que por accidente se me resbale el dedo, y salga disparada una bala hacia tu hermoso rostro, y termines tirado en el suelo.

O este hombre definitivamente odia a las personas o de plano no conoce el significado de ser policía.

—Está bien, está bien, pero por favor baja esa cosa.

—¡OBEDECE! — El grito del oficial hace que dé un respingo.

—Hay que hacerlo, Dave. Creo que este hombre se toma muy en serio su trabajo, y hoy no es un buen día para morir—trato de hacer que Dave entre en razón, porque lo único que está ocasionando con su bocota es que este tipo, que aparte de estar mal de la cabeza, se vuelva loco de coraje. Al parecer ama el control y que lo obedezcan.

El loco del arma comienza a dar pasos amenazadoramente lentos hacia nosotros, lo que ocasiona que mis piernas se vuelvan aún más de gelatina. No creo poder con esto. Odio las armas y a los locos, y como si la vida me diera de cachetadas, me pone ambas cosas mezcladas. Un loco armado, y no solo eso, sino que además viene con un plus; uniformado, y con un arma. Definitivamente hoy, no es mi día.

—No podemos quedarnos sin hacer nada, E. El hombre está loco y al parecer sería capaz de matarnos— Dave habla susurrando. Su voz es un poco gruesa, por lo que se le dificulta hacerlo.

—No podemos hacer nada, Dave. Rayos, el hombre nos está apuntando con un arma, ¡con una horrible arma! —Trato de no gritar, por lo que hablo entre dientes.

—Shhh — me silencia—. Tengo un plan. Cuando te diga que corras, corres y lo haces lo más rápido que puedas, ¿de acuerdo?

—No pienso irme de aquí sin ti, así que no hagas nada estúpido, Dave, por favor.

El oficial está casi ya encima de nosotros.

—Cuando cuente tres, corres, E.

—No, Dave. Ni lo sueñes.

—Uno...

—¿Dave? Cualquier idea loca que se haya metido a tu cabeza, deséchala, no hay que arriesgarnos.

—Dos...

—¡Dave, noo!

No puedo permitir esto. No soportaría ver que un amigo esté en la cárcel y menos cuando no hemos hecho nada malo. Y, sobre todo, no voy a salir corriendo como toda una cobarde mientras mi mejor amigo sufre. Tomo la camiseta de Dave aun mas fuerte en mis puños.

Ah, ah, no voy a huir.

«Vamos Elizabeth, saca valentía de tu interior, y sácanos de aquí.»

Y así sin más, antes de pensarlo y analizarlo, escuchamos un grito mientras que vemos dos cuerpos colisionando en el césped, y uno de ellos es del loco armado. Pero eso no es lo que más me impresiona, sino lo que en verdad me deja impactada, es ver a la persona que lo hizo.

—¡Por Dios! ¿Por qué hiciste eso? —le reprocho asombrada.

—Bueno, desde lejos vi que estaban en problemas, y no iba a irme y dejar que este idiota les metiera una bala en la frente, ¿verdad?

Y el susodicho hace una mueca de dolor mientras aún está en el suelo tomando su estómago e intentando recuperar el aire.

—Ese sí que fue un buen golpe. — Dave se le queda mirando al oficial caído, y en su rostro se forma una sonrisa—. Eres mi heroína. Mi hermosa, heroína.

Alice rueda sus ojos y resopla.

—Ahora, hay que salir de aquí antes de que éste intento de policía se levante, y entonces sí, habrá tres funerales. Vamos.

Los tres entramos en razón y nos largamos de ese lugar.



#45728 en Novela romántica
#7323 en Chick lit

En el texto hay: pasado, amorymusica, londres

Editado: 27.07.2018

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.