Esther

Capítulo 1

 Noticia del día:

Victoria fue juzgada la pasada tarde y sentenciada a desaparición. Eva es culpable de engaños y mentiras al mismísimo Adán.

Sigo mirando la pantalla holográfica que todos tenemos al lado de la cama sin poder salir de mi asombro. Eva era muy querida por el Adán y no entiendo en qué pudo haberle mentido o engañado. Todo el reino sabe lo enamorada que estaba de él, o al menos es lo que parecía. 

El Adán sería como el rey de los tiempos antiguos, que busca formar un gran imperio y llegar a superar así al primer Adán, al primer hombre que pisó la Tierra; y por lo tanto, rey de este mundo. Ahora mismo hay proclamados 3 Adanes, el Europeo que es mi rey, el americano y el asiático. Cada uno de los Adanes está acompañado de su respectiva Eva.

El mundo cambió bruscamente en tan solo 20 años, debido al levantamiento de estos tres y desembocando en la guerra más corta pero más dura de todos los tiempos. Lo llamamos el mes azul porque a pesar de estar en guerra, el cielo nunca había estado tan azul y resplandeciente. Me gusta pensar que es una forma en la que se ve que hay alguien más poderoso que nosotros, alguien que muestra su grandeza por encima de los problemas humanos.

En todo este tiempo la tecnología mejoró mucho, no es raro ver hologramas por las calles o gafas especiales con las que puedes ver películas mientras das un paseo por la calle. Lo que pasa es que no todos podemos optar a ellas, se reservan por si vuelve a haber otra guerra; solamente podemos disponer de la pantalla al lado de nuestra cama para mantenerte al tanto de los sucesos del reino o tareas básicas y de algún dispositivo portátil. Decidieron no saturar las casas con demasiados aparatos, por lo que al final vivimos de manera muy similar al principio del siglo XXI, aunque con alguna pequeña variación.

- Dasa, ¿te has enterado de la noticia? - Me pregunta mi tío. Él es como mi padre, me lleva cuidando desde la muerte de mis padres y siempre estuvo ahí cuando más lo necesité. Es el mejor hombre que jamás conocí, me enseñó todo lo que hay más allá de toda esta vida cotidiana. En resumen, ayudó a forjar mi carácter y darme la esperanza necesaria para vivir sin angustiarme por los problemas. Mi tío entra en mi habitación tan asombrado o incluso más que yo. Debió de haberse enterado de la noticia de Adán.

- Sí tío Mark, sigo sin creérmelo. ¿Qué es lo que pudo haber pasado? Esto es demasiado precipitado y me extraña que nos hayamos enterado tan rápido de algo tan personal de Adán. No se suele saber demasiado de su vida.

- Lo único que se dice es que Adán se encontraba ebrio, pero no se sabe nada más. Aun es muy pronto para sacar algo en claro de la situación y dudo que vayan a decir algún detalle más de lo ocurrido.

- Bueno, esperemos que Adán no se lo tome muy mal y que no le llegue a afectar. Podría llegar a repercutirnos a todos los ciudadanos y eso no traería nada bueno. 

- Dasa, me encanta que seas tan positiva, pero si una cosa sabemos es que Adán no sabe estar sin pareja, necesita a alguien que lo tranquilice y modere. Si no encuentra a alguien rápido, no sabemos de qué puede ser capaz. - Bajo la mirada pensativa. Tiene razón, no es un secreto que Adán es demasiado impulsivo.

- Bueno, voy a correr para despejarme, si me entero de algo más vendré enseguida para contarte. - Me da un beso en la mejilla y sale de mi habitación permitiéndome así cambiarme a una ropa más cómoda.

Me dirijo al parque del centro de la ciudad disfrutando del sol y es que el verano está a la vuelta de la esquina. Tengo la costumbre de salir siempre por la mañana para relajarme y así poder afrontar el día con fuerzas y ánimos. Lo llevo haciendo desde que mis padres murieron en la guerra y creo que fue lo que me ayudó a poder pensar en ellos sin derrumbarme. Tengo un objetivo en mi día a día que es ser fuerte y llevar siempre una sonrisa, a pesar de todo lo que he tenido que pasar a tan corta edad. Presenciar la muerte de tus propios padres no es fácil de sobrellevar.

Después de una hora más o menos, decido volver a casa y nada más pisar la carretera, observo un gran número de coches de policía pasar por las calles y policías del Estado saliendo y entrando de todas las casas. ¿Qué está ocurriendo? Veo que se llevan a la fuerza a chicas jóvenes y las meten en los vehículos aun en contra de su voluntad. Rápidamente vuelvo a mi casa intentando pasar desapercibida. Al llegar me doy cuenta de que los policías aún no entraron en mi casa, pero no tardarán demasiado en venir. Están a unas cuantas manzanas de distancia, tiempo suficiente para alertar a mi tío Mark.

- Mark, hay policías por todas partes, ¿qué es lo que quieren?

- No tengo ni idea. Vete a tu habitación, intentaré que piensen que no estás, no voy a dejar que te lleven a saber a donde.

- ¿Y tú?

- Creo que solo van a por las mujeres. Si te atrapan di que te llamas Essie, es por tu seguridad. - Asiento, ese era el nombre de mi madre. El terror inunda mi rostro. Lo peor es no saber qué pueden llegar a hacerme si me encuentran. Unos fuertes golpes en la puerta hacen que reaccione y que suba corriendo a mi habitación sin mirar atrás. Para mi sorpresa, consigo escuchar lo que hablan los policías con mi tío en el piso de abajo.

- ¿Dónde está tu sobrina?

- ¿De qué hablas? Aquí solo estoy yo.

- No nos tomes por tontos, sabemos que aquí vive una joven, ¿dónde está? Si no nos lo dice, revisaremos toda su casa a la fuerza si es necesario.

Escucho cosas cayendo y rompiéndose, pasos subiendo las escaleras y cómo abren la puerta de mi habitación. Se acercan a mí a la vez que doy pasos hacia atrás para alejarme todo lo que pueda, incluso sabiendo que es inútil. La pared no me permite seguir retrocediendo y uno de ellos me agarra del brazo llevándome consigo. Intento resistirme, pero su fuerza me supera con creces. Miro por última vez a mi tío transmitiéndole cuánto lo quiero y lo agradecida que estoy por cuidarme todo este tiempo. Él me contesta con otra mirada llena de lágrimas.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.