Capítulo D O S; Impacto, sorpresa o emoción

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Megan.

No se donde estoy, lo que si se es que tengo una jaqueca horrible.

-No Volveré a beber mas en mi vida.-Claro la típica frase de un joven el cual beberá tarde o temprano. Pero bueno así es la vida, un círculo vicioso del cual nunca podremos escapar.

Intente moverme pero un brazo musculoso me lo impidió, asustada de lo que podía haber hecho anoche en medio de mi borrachera gire mi rostro para encontrarme con un Ethan dormido y relajado.

Ok no entres en pánico, solo es Ethan acostado en la misma cama que tu con lo que puedo notar es que esta sin camisa. Ok nada del otro mundo, muchas veces me a tocado dormir en la habitación de Ethan y varias de esas veces el durmió conmigo pero nada intimo solo dormir.

Mientras me daba esa charla motivacional dentro de mi no sabia que hacer, no sabia si gritar del susto o se la emoción de estar en una misma cama con el hombre que amo. Pero se que esto lo terminara bien y antes de darme cuenta ya estoy saltando fuera de sus brazos.

El al sentir movimiento de despierta muy vagamente.

-¿¿Megan??- dice Ethan con los ojos como platos al darse cuenta que era yo.

Oh bueno, mierda.

-Mierda Ethan ¿¿que hicimos??-Hombre estaba borracha anoche, nunca me he embriagado así en mi vida. Fue como si de pronto me hubiera bebido diez botellas de vocka y solo recuerdo haber bebido muy pocos vasos de cerveza.

Ethan esta tan confundido o hasta diría que más confundido que yo. Pero no es de extrañarse parece que bebió igual o más que yo anoche en la fiesta.

Me observa y puedo ver las ganas que tiene de acercarse a mi y consolarme el siempre a sido así conmigo.

-Pequeña no lo se, lo ultimo que recuerdo era que estaba por dormirme y alguien me brinco encima.-Puedo notar el gran sonrojo surgiendo en mi rostro, estoy segura de que tengo tres tonos diferentes de rojo mezclados.

¡Oh por Dios!

Me le lance a Ethan así no más. Debo parecer una zorra barata. El miro lo cara y leyó mis pensamientos porqué se levanto solo usando unos bóxers y me abrazo.

-No pienses cosas malas de ti misma pequeña. Nadie te está juzgando.-El no me esta juzgando, pero la mente del ser humano puede ser cruel en momentos inoportunos.

Y en esos momentos también te hacen decir o hacer estupideces.

Inclino mi cabeza hacia arriba para poder verlo a los ojos he intentó estar lo mas seria posible cuando lo único que quiero es volver a la cama con él y no despertar hasta el otro día.

Me aclaró la garganta y le digo en un susurro.

-Ethan creo que esto deberíamos de olvidarlo y no hablar ni sacarlo a flote nunca.-Pude ver en su rostro que no estaba de acuerdo con mi decisión, así que tuve que usar la artillería pesada puse cara de perrito y un puchero.-Por favor.

Si, lo se muy infantil pero acciones desesperadas requieren medidas desesperadas. 

Y esto en serio que requiere de muchas medidas desesperadas. 

Ethan lo pensó, pude verlo en la forma que cerraba su mandíbula y entrecerraba sjs ojos. Se estaba molestando y no se cual era la razones.

¿Por qué cuando por fin después de tanto tiempo tuve en la cama al hombre de mi vida tenia que pasar así? No quería dejarlo nunca, pero al ver mi cara de desesperación tuvo que aceptarlo resignado y yo no sabia si sentirme aliviada o decepcionada por ver que no lucho conmigo. Tenia tantas ganas de decirle que lo amaba.

Pero calle.

Y no se de quien estoy as decepcionada si de él o de mi.

Me separe de el para buscar mi ropa la cual estaba esparcida por todo el piso de la habitación. Después corri al baño a vestirme y cepillarme, en el baño de Ethan mientras hacia mis cosas tuve tiempo para analizar la situación en la que me encontraba, sobria y con resaca me di cuenta del error que había cometido, decirle eso a Ethan fue como un puñal para su corazón o sea lo trate como su fuera un royo de una noche lo cual no era. 

Tenia que pensar mucho y no beber nunca más para así más nunca volver a hacer una locura como esta aunque esa locura allá sido lo mejor que me a pasado en la vida.

Pero tenían que ser fuerte y madura. Ya había dicho las palabras y no puedo retrocederlas. Como dije a veces las medidas desesperadas no son siempre buenas opciones.

Después de unos cuantos minutos en el baño abrí la puerta y salí a la habitación, solo para ver que ya Ethan no estaba por ningún lado. Su cama estaba hecha y la ropa que estaba en el piso esta ahora en el cesto de la ropa sucia. Ethan siempre a sido un limpiador compulsivo, me acerco al notar una nota en la esquina derecha de la cama la tomo y leo su contenido.

Meg se que dijiste que olvidaramos esto y te soy sincero no recuerdo mucho, pero se lo que sea que paso, paso y no podemos revertirlo. Quieres olvidarlo, bien. Pero ten en cuenta de que anoche paso algo entre nosotros y eso avivó las cenizas que nosotros mismos hicimos. Solo te digo algo y lamento no decírtelo de frente pero después de este día las cosas serán muy diferentes.