1.
Tae Hyuk camina decidido hacia el área de embarque, cuando, de pronto, tiene la extraña sensación de estar a punto de dar un paso trascendental. Extrañado, se detiene un momento y trata de encajar ese leve desasosiego con su personalidad segura y decidida.
No tiene sentido. Todo está perfectamente organizado y para ello se pasó las tres últimas semanas planeando cada detalle del viaje. Es cierto que Won Su trabaja con mucho empeño en su recién abierta agencia de viajes, y que fue bastante solícito al atender cada capricho suyo (era lo mínimo que podía hacer ya que gracias a él puedo abrir ese nuevo negocio), pero fue el mismo Tae Hyuk quien trazó la ruta y escogió cada punto de la misma.
Tiene memorizado cada detalle del itinerario desde que suba a ese avión en Seúl hasta que regrese de la Patagonia Argentina. Recorrerá Sudamérica entera bien resguardado por toda la preparación que ha hecho y los planes de contingencia por si algo se sale de control o se presenta alguna emergencia.
Esta será la experiencia más maravillosa de su vida, así que los dos años de trabajo ininterrumpido llevando divorcios escandalosos bien valdrán la pena. Ser abogado de millonarios y estrellas hallyu[1] le ha dañado el hígado y agriado el carácter, pero, para compensarlo, está su cuenta bancaria con varios billones de wons.
Sin embargo, a pesar de su natural seguridad, de toda su minuciosa preparación y hasta de su experiencia como viajero, una pequeñísima alarma toca con insistencia dentro de él. “Son los nervios” piensa. Siempre que empieza una de sus “aventuras temerarias”, como las llama su madre, siente un cosquilleo en el cuerpo.
Pero no, al fondo de su conciencia la alarma sigue pitando, aunque cada vez más tenue. Sin embargo, Tae Hyuk se sacude las dudas.
Es la adrenalina. La emoción de la aventura.
Inspira hondo, visualiza las imponentes montañas andinas, la selva salvaje, todos esos animales exóticos que ha visto en internet... y da el paso.
Media hora más tarde, el local de la agencia de viajes de Won Su ha sido desmantelado y de la puerta cuelga un letrero que reza “SE ALQUILA”.
[1] El Hallyu, también conocido como la Ola Coreana o Fiebre Coreana, es un término para referirse a la popularidad del entretenimiento coreano en toda Asia y otras partes del mundo.
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Espero que disfruten esta historia. Un abrazo.