CAPITULO 10
ADAM
Camino más tranquilo por el pasillo, hasta llegar a mi oficina donde se encuentra luz con Fernanda en el mueble hablando unas cosas, me recuesto en el marco de la puerta con mis manos en los bolsillos y suelto un suspiro de cansancio que llama la atención de luz que me mira entre una sonrisa y una mirada con preocupación
-hola ¿todo está bien? – asiento pero ella mira a Fernanda –Fernandita me esperas un momento voy a hablar algo con tu padre y ya vengo- mi hija siente mientras busca algo para empezar a dibujar es una de las cosas que más le gusta hacer a ella, luz se levanta del mueble y se acerca a donde estoy yo, ambos nos alejamos ligeramente la puesta para que mi hija no escuche pero pueda seguir viéndola- por lo que vi en la oficina Isabella acepto la propuesta de casarte contigo – asiento- ¿cómo lograste convencerla?
-al parecer mi abuelo quería sacarla del caso de el por no tener una familia, hasta le dijo a mis tíos que hicieran lo que sea para no llegar a un acuerdo con ella pero al saber que Isabella y yo tenemos una relación cambio de idea- ella se cruza de brazos
-eso quiere decir que van a casarse por beneficio mutuo- asiento
-al parecer si, ella quedo en avisarme para hablar más del asunto- ella siente – por ahora creo que sería buena idea ir compartiendo información anónima que Isabella y yo estamos justos
-no te parece muy pronto, pienso que es mejor esperar a que tú y Isabella hablen – niego con la cabeza
-si Isabella y yo empezamos a mostrarnos en público como novios de un día para otro y más que nos vamos a casar sería muy raro, es mejor ir creando sospechas y chismes para cuando se haga público no se extrañen- luz parece meditarlo un poco para después asentir
-bueno en eso tienes razón, yo me encargare de empezar los rumores – asiento
Luz se va a su escritorio, mientras que yo me dirijo de regreso a entrar a la oficina, veo a mi hija que sigue sentada en el mueble dibujando sus hermosos vestidos que tanto le gustan, me acerco a ella para sentarme a su lado
-qué lindo vestido hija-ella asiente
-es para la tía Rosy –vuelvo a asentir- ¿el abuelo ya no nos odia?- la miro con los ojos abiertos
-hija de que estas hablando – ella deja de pintar para mirarme
-sé que mi abuelo nos odia porque no quieres estar con jehosely y por esa razón ella ha hecho un escándalo haciendo que el abuelo se moleste con nosotros y como no tengo mama el abuelo me odia- niego rápidamente
-mi niña el abuelo no te odia, el abuelo solo es algo conservador de la vieja escuela es todo – trato de calmarla pero por su cara parece no lo estoy haciendo muy bien
-¿eso quiere decir que me vas a buscar una mami?- la primera respuesta que quiero darle es un no, ya que preferiría no involucrarla en todo esto pero no tengo opción si quiero protegerla
-¿eso te molestaría hija?- ella niega
-mientras tú seas feliz papa está bien pero te puedo pedir algo- me acomodo en el mueble para prestarle mejor atención- puede ser una mujer mejor que jehosely- se me sale una pequeña risa y empiezo a asentir con la cabeza
-te prometo que será mejor que jehosely- ella me sonríe y yo le doy un pequeño beso en la frente –ahora hija recojamos tus cosas, ya han sido muchas emociones por un solo día- ella asiente y la ayudo a recoger sus cosas
Después de terminar de recoger las cosas de mi hija, nos despedimos de luz y le dije que me mandara todos los informes y cosas urgentes al correo, ella asintió y se despidió de Fernanda, ambos nos fuimos a mi casa
Cuando llegamos ella se fue a su habitación, mientras yo me fui a mi oficina para terminar de hacer unas cosas del trabajo, después de trabajar por 3 horas me recuesto en la silla cansado, suelto un suspiro de frustración
Miro mi tercer cajón y me inclino para abrirlo y sacar un cuadro que tengo ahí, en él se encuentran, Isabella y yo con 12 años jugando con la nieve en el orfanato, ambos tenemos una gran sonrisa sin ninguna preocupación o problema
-Isabella has cambiado mucho durante todos estos años- pazo mi mano por la foto en especial cerca de ella- lo que más lamento es que por mi culpa hayas perdido esa hermosa sonrisa, aún recuerdo la primera vez que la vi
Recuerdo
Estaba llegando al orfanato santa maría con mi padre y mi madre para una de sus proyectos para la caridad, mis padres hablaban con las encargadas del cuidado y bienestar de los niños, en el momento en el que llegamos, los niños estaban en clase así que solo se encontraba ellas, por mi aburrimiento decidí ir al patio a jugar con la nieve
Todo estaba cubierto por la nieve de un blanco grueso, corrí por todo el patio hasta llegar a un árbol grande cerca de la pared con un pequeño agujero en el medio, me termino de acercar al árbol y noto que entre el árbol y la pared hay un ligero capa de ramas que a pesar de que lo cubre la nieve hay una ligera abertura que indica un pequeño hueco
Me acerco más a eso que me llama la atención, lo muevo un poco para ver lo que hay adentro y me sorprendo encontrar a una niña hay metida en posición fetal, me inclino para acercarme a ella, el árbol es sufrientemente grande para que ambos entremos
-hola ¿estás bien? – ella levanta ligeramente la mirada y muestra unos grandes ojos azules impresionante que me dejaron hipnotizados, Ella solo me observaba sin decir nada mas así que volví a preguntar-¿estás bien? – Ella asiente pero sigue sin hablar- ¿porque estás aquí metida tu sola?
-por qué no quiero que nadie me adopte – la miro con confusión
-¿por qué?- ella vuelva a bajar la cabeza y yo me acomodo en el hueco – los adultos que están hay son mis padres vinieron a ayudar no adoptar
Editado: 27.03.2024