Capitulo 1

Eso no es justo—dijo Nicolle con el ceño fruncido, a Nikolai se le estaba haciendo costumbre negarle o sobre protegerla demasiado.

—Si es justo...bueno para mí lo es—

—¡Claro que no! únicamente a ti se te ocurre esa estupidez, no irás tú solo tras el desgraciado de Marcus, yo te acompañare lo quieras o no.

—No estás en condiciones para acompañarme—no le dejó terminar de hablar ya que se fue de la habitación, había pasado una semana desde que Nicolle se convirtió, aprendió a controlarse de una manera asombrosa, ella no tenía ni idea del porqué, podía ser por el hecho que era una híbrida entre vampiro y bruja.

—Creo que tendré que hacerlo por mi cuenta—

—No lo creo— dijo una voz a sus espaldas

—Lukiam...—

—No quiero que mi hermano me arranqué la cabeza así que te agradecería que te quedarás en un sólo lugar—

—Pero...—

—Hoy no por favor, mejor ayuda me a localizar a Einar antes de que cometa una tontería—

—Está bien—Rueda los ojos totalmente cansada

***

Einar y Lizzie estaban acostados en el sofá, ella estaba casi dormida cuando tocaron la puerta, no tuvo otro remedio más que levantarse y abrir, en verdad odiaba a las personas que se atrevieron a no dejarla dormir.

—¿Lizzie? —Era su amiga...era Nicolle, apenas la vio algunas lágrimas salieron de sus ojos Einar le había dicho sobre sus hermanos, vampiros y brujas.

—¿Me ignorabas para protegerme? —

—Si Lizzie era la única forma que no te hicieran daño, pero debemos de hablar—miró directamente a Einar—Todos— este asintió y se dirigieron al pequeño comedor de la casa y les contó sobre Jade y los cazadores y su aparente transformación en vampiro original.

Jade salía de su habitación tratando de no provocar ruido no quería que su padre supiera lo que iba hacer, ella amaba a su padre pero desde la muerte misteriosa de su madre el dejo de ser el mismo incluso a veces lo llamaba por su nombre ya que al parecer a él no le gustaba que le llamara papá, Jade se dio cuenta que el día que perdió a su madre también perdió a su padre, ella no quería seguir formando parte de esto.

Al salir totalmente de su casa se dirigiría a un lugar donde su padre no pudiera encontrarla, así quizás podría tener una vida tranquila, ¿no podía ser una chica normal de su edad? Siempre tuvo que entrenar para cazar vampiros, su madre perdió la vida por seguir esos estúpidos ideales de cazadores, nunca pudo preguntarle las típicas cosas de chica...ni siquiera sabía qué hacer cuando le gustara alguien, nunca se le preguntó sus padres ya que nunca le prestaban la suficiente atención parecen más preocupados por cazar a un vampiro que en su propia hija.

Tomó su auto y salió de la ciudad, primero tenía que cambiar el auto, su padre podría encontrar su auto de manera rápida, los últimos meses había estado ahorrando cada centavo de su trabajo para esto esta mañana renunció a él, no quería tener ninguna conexión con la ciudad y con su padre.

***

Lukiam y Nikolai miraban como la hija del cazador prácticamente escapaba de su propio padre.

Lukiam había estado raro todo el tiempo en que la estaban siguiendo, la chica acababa de salir de la ciudad estaba a punto de cambiar su auto por otro totalmente diferente, ella en verdad no quería que nadie la encontrará, mientras que él no podía dejar de verla a pesar de que sólo hubieran pasado unas pocas semanas le había tomado un cariño especial, no quería que le pasará nada, no podía ni pensar que le pasara algo, acaso eso era lo que se sentía encontrar a su alma gemela no podía ser posible, la naturaleza los condenó a estar solos para toda la eternidad, ¿será posible que se apiadó de ellos?

¿Cuánto tiempo podría seguir conduciendo sin dormir? lo había estado haciendo casi siete horas sin parar y se sentía muy cansada, quería descansar un poco además el hecho que se sentía vigilada desde que salió de la ciudad no le daba confianza de parar y dormir un poco.

Nunca en su vida se había sentido así...era una sensación extraña, ni siquiera podía describirla, sus ojos se estaban cerrando, decidió parar no quería tener un accidente se acomodó un poco en su asiento, no deseaba dormirse, no hasta que estuviera en un lugar seguro, "solo cinco minutos" pensó.

***

—Es hora.

—Hermano...no quiero hacerlo—Nikolai suspiró.

—Si sientes algo por ella de verdad entenderás que es lo mejor tiene que decirnos lo que realmente pasó.