Mateo:
Nos quedamos parados con los ojos exorbitantemente abiertos esperamos a que la figura se moviera cualquier cosa para actuar y dar el paso definitivo pero la figura simplemente se dio la vuelta y se marcho.
Después de la misteriosa desaparición de la figura encapuchada nos quedamos atónitos en la cámara subterránea en un silencio sepulcral. El eco de sus pasos resonaba en la oscuridad, amplificando la sensación de soledad y abandono. Los símbolos, antes tan intrigantes, ahora parecían burlarse de ellos con su silencio.
Pasaron los días que se convirtieron en semanas mientras nos sumergiamos en la enorme biblioteca del castillo. Pergaminos amarillentos, mapas antiguos y tomos polvorientos llenaban las estanterías, pero ninguna pista parecía conducirlos a una respuesta definitiva. La figura encapuchada se había desvanecido como una sombra, dejando tras de sí un enigma impenetrable.
El cansancio comenzó a hacer mella en ellos. Las largas horas de estudio y la falta de sueño habían minado sus energías ademas de no tener mucho tiempa para sus demas actividades. A veces, se preguntaban si estaban persiguiendo una sombra, una ilusión creada por su propia mente. La esperanza que habían sentido al principio se había transformado en una creciente desesperación.
Una noche, mientras hojeaba un antiguo libro de hechizos, Luna se detuvo en una ilustración. Era un símbolo que le resultaba familiar, uno de los que había visto en la cámara subterránea. Pero este símbolo estaba rodeado de otros, formando un patrón complejo que no había notado antes. Con un escalofrío, ella inmediatamente se dio cuenta de que los símbolos no eran estáticos, sino que se movían y cambiaban.
"¡Mateo!" exclamó ella, su voz llena de emoción. "¡Creo que he encontrado algo!"
Yo me acerque y estudie la ilustración. "No lo entiendo," dije, frunciendo el ceño. "¿Qué significa esto?"
Luna señaló un detalle en la ilustración: un pequeño círculo en el centro del patrón. "Creo que este círculo es la clave," dijo ella. "Quizás si podemos reproducir este patrón, podremos abrir algún tipo de portal o activar un mecanismo oculto."
Con renovadas esperanzas, ambos comenzamos a trabajar. Pasaron noches enteras dibujando y redibujando el patrón, tratando de comprender su significado. Finalmente, creimos haber descifrado el código. Con un corazón lleno de incertidumbre, Luna trazó el círculo en el suelo de la cámara subterránea.
En ese momento, la tierra comenzó a temblar. Las paredes se agrietaron y el techo se derrumbó, sepultándolos en la oscuridad.
Cuando el polvo se asentó, y entonces ambos nos encontramos en un lugar completamente diferente. Ya no estabamos en la cámara subterránea, sino en un bosque luminoso, lleno de árboles que brillaban con una luz suave. A lo lejos, podíamos escuchar el sonido de un río cristalino y el canto de aves desconocidas.
¿Habían logrado abrir un portal a otro mundo? ¿O simplemente habían experimentado una alucinación causada por el agotamiento?3333
Cuando el polvo se asentó y los dos ambrimos los ojos, nos encontramos en un lugar que desafiaba toda descripción. Un bosque resplandeciente, con árboles que parecían emitir luz propia, se extendía ante ellos. El suelo, cubierto de una suave alfombra de musgo fluorescente, amortiguaba sus pasos. El aire era puro y fresco, perfumado con aromas florales desconocidos.
Caminamos durante horas, maravillados por la belleza de este nuevo mundo. Descubrimosríos de agua cristalina que serpenteaban entre las raíces de los árboles, cascadas que caían en piscinas de agua turquesa y flores gigantescas de colores vibrantes. Sin embargo, a pesar de la exuberante vegetación y la serena atmósfera, no había señales de vida animal.
"Es como si estuviéramos en un sueño," murmuró Luna, su voz llena de asombro.
Yo asenti. "Nunca he visto nada igual. Es como si este lugar hubiera sido creado especialmente para nosotros."
A medida que avanzabamos, nos dimos cuenta de que este mundo era mucho más grande de lo que habíamos imaginado al principio. Montañas escarpadas se elevaban hacia el cielo, y en la distancia, podían vislumbrar un océano de un color azul intenso.
Sin embargo, a pesar de su belleza, este nuevo mundo también era inquietante. Había algo extraño en la atmósfera, una sensación de quietud que resultaba casi opresiva. Y a pesar de sus esfuerzos, no lograron encontrar ninguna señal de vida inteligente.
"Creo que estamos solos," dije con tristeza. "Este lugar es hermoso, pero también es muy solitario."
Luna me tomo de la mano. "No te preocupes," dijo. "Cuando estemos aqui el uno al otro."
Varios dias despues exaustiva busqueda descubrimos un antiguo portal estelar oculto en una biblioteca subterránea de un mundo paralelo. Este portal, activado por una compleja secuencia de símbolos y libros, les permitía viajar entre su propio mundo y este nuevo universo de manera diaria. Cada noche, despues de nuestras responsabilidades habituales, cruzabamos el portal para sumergirnos en el estudio de la civilización perdida y desentrañar los misterios de la biblioteca. Las noches las pasabamos en nuestro mundo, compartiendo sus descubrimientos y planeando nuestras próximas exploraciones.
Cuando volvimos a la cámara subterránea, nos encontramos exactamente donde los habían dejado los derrumbes. Exhaustos pero llenos de asombro, se abrazaron. Habían experimentado algo que cambiaría sus vidas para siempre, pero aún les quedaban muchas preguntas sin respuesta.
¿Qué era ese lugar? ¿Cómo habían llegado allí? ¿Y por qué estaban solos?
Después de varios días explorando el nuevo mundo, los dos nos topamos con una estructura extraña que se elevaba sobre el follaje. Al acercarnos, nos dimos cuenta de que era un edificio de piedra, cubierto de musgo y hiedra. Las ventanas, altas y estrechas, estaban cubiertas de polvo y telarañas.