Hechizo de venganza

Capítulo 1 ~ La maldición.

Camine por el pasto hacia los árboles en el patio del bachillerato. Ahí estaba ella. Andrea, mi novia. Al menos por los últimos minutos, ya que acordé verla ahí para terminar nuestra relación.

 

Estudiamos en el turno de la tarde-noche. Así que algunas lámparas iluminan ya el patio de la escuela, los rayos del sol son cada vez más débiles y la luz de la luna ahora ocupa el lugar de iluminar.

 

Camine lentamente y muy decidido con mi decisión, Axel. Un chico rubio, de complexión delgada pero con buen físico bien entrenado por el gimnasio, el loco se la vivía ahí. Un color de piel pálido y unos ojos verdes que claramente resaltan bastante. Lo único que no pierde es su cabello quebradizo, supongo que lo conserva para recordar la época en la que fue emo. Y desde luego, él es mi mejor amigo, me esperaba en la salida y desde lejos veía como yo me dirigía a terminar una relación pasajera, al menos para mí.

 

—Hola mi amor. ¿De qué tenemos que hablar?—me interrogó ella con su dulce voz. Intento besarme, pero con mis manos le aparte de mí. Pude ver en su rostro una expresión de sorpresa y tristeza.

 

—Debemos terminar nuestra relación, Andrea. Los problemas que hemos tenido me han hecho ver que esto no funcionará y quiero terminar todo—exclamé con seguridad, pero observando como ella se abrumaba con mi noticia.

 

—Ya lo esperaba, en los últimos días habías estado extraño. Pero antes de que te vayas, quiero decirte que me enteré de tus aventuras con otras chicas. Y aún así me quede, quería saber hasta donde mentías, y fingiste muy bien por varias semanas... felicidades. Eres buen actor...—contesta entre algunas lágrimas y mientras niega con su cabeza.

 

—¿Quien te dijo sobre eso?—interrogué con sorpresa y sediento de saber quien había revelado el secreto que solo Axel y yo sabíamos.

 

—Una amiga estaba en el antro y me envió las fotos, después que investigue me di cuenta que mientras salías conmigo... ibas con otras chicas y sostenías relaciones con ellas. Que decepción y que asco... y lo increíble es que yo me quede aquí. ¿Como te sientes?—inquiere con una mirada penetrante, llena de odio y tristeza. —Romperle el corazón a alguien que lo dio todo por ti... ilusionar mientras te ibas con otras chicas—grita con lágrimas en los ojos.

 

—Solo puedo decir que no me arrepiento de nada, inicie nuestra relación como algo pasajero, al menos así lo veo yo. No se tú...—contesto con seriedad y mientras doy unos pasos hacia atrás, para apartarme de ahí.

 

—Eres un maldito...—grita mientras toma una botella de agua que tiene cerca de ella y me la avienta con toda su fuerza.

 

No digo nada y me voy de ahí, a paso veloz alcanzo a Axel que me espera en la puerta con forma de arco y color café, las rejas aún no son cerradas porque aún hay alumnos dentro de la escuela.

 

—Y bien... ¿cómo salió todo? ¿Lloró?—me interroga él mientras caminamos hacia casa.

 

Guiño el ojo. —Sabes que siempre las hago llorar—respondo en forma de burla y mientras bebo un poco de mi refresco.

 

—De hecho se enteró de las salidas del antro, ya lo sabía. Pero no quería decirme nada... realmente le dolió eh—agregó mientras tomó mi iPhone y le envío mensaje a una chica con la cual he estado charlando por un tiempo.

 

—¿No tienes miedo de lo que me contaste antes? Que la abuela de Andrea es una bruja, yo me andaría con miedo después de algo así...—comenta Axel en un tono serio y quizás con algo de precaución.

 

Volteo a verlo con incredulidad y decepción. —Axel, no me digas que crees en esas tontadas. ¿En verdad creer en eso? La magia no existe, esos son solos rumores y ya. En el tiempo con Andrea me di cuenta que ni ella cree eso de su abuela, tal vez la abuela esté loca... que se yo, no me interesa ya—contesto mientras estamos a punto de llegar al punto donde y yo nos separamos, vivimos en colonias un poco apartadas una de la otra. Yo debo irme por un parque y el debe tomar el camino que atraviesa una una mini plaza.

 

—Solo digo que yo sí tengo cuidado con ese tipo de temas, son cosas complejas. Pero en fin...—alza su mano para despedirse de mí. —Nos vemos al rato en la partida—declara mientras ambos chocamos las manos.

 

—Ahí estaré—sonrío mientras regreso mi vista al semáforo.

 

—Hasta luego todas mías...—grita él, con un tono burlesco mientras cruza la calle. Solo le levanto el dedo y sonrió mientras continúo el camino a casa.

 

Camino hacia casa con tranquilidad, sin una pizca de remordimiento por terminar mi relación con Andrea, la vida es para vivirse y disfrutar. Solo fue algo pasajero, no esta mal y además debo disfrutar mi juventud.

 

Me detengo antes de llegar al parque, me sorprende que para ser los primeros días de enero esté algo solo. Saco de mi mochila un suéter color negro, sin ningún estampado o figura, me lo coloco por el tremendo frío que hace. Después sigo mi caminata a casa normal, siento mi iPhone vibrar, son los mensajes de mis amigas, o como yo les llamo, mis fans.

 

Camino entre los arbustos y árboles verdes, siento el frío en mi rostro. Meto mis manos a mis bolsas cuando cruzo por una parte un poco oscura, la lámpara que alumbra ese camino no funciona. De pronto se cruza frente a mi una señora, de una edad quizás avanzada, no logro apreciar bien por la túnica que lleva puesta, aunque realmente no se ve con una piel arrugada para ser una "abuela".

 

—Hola...—atino a decir. La verdad siento mucho miedo al verla ahí, intento retroceder pero algo me congela todo el cuerpo, siento como una especie de escalofrío y me quedo estático observando como ella se acerca lentamente a mí.



#3759 en Fantasía
#817 en Magia

En el texto hay: cambiodevida, cambiodecuerpo, genderbender

Editado: 18.07.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.