Capítulo 10 Paranoia

29/04/18

Desperté con una enorme emoción en el pecho, lo que había ocurrido ayer podría ser la mejor experiencia de mi vida, mantuve los ojos cerrados, mis brazos aún seguían detrás de mi cabeza, inhale fuertemente, y de pronto... un enorme sentimiento de ansiedad gobernó mi cuerpo, salté de mi cama, qué demonios estaba ocurriendo. << ¿Y el calor?, ¡¿Dónde estaba ella?!>> —¡KAT! — Comencé a gritar, cada vez más fuerte; Me encontraba en una habitación completamente desconocida, aunque para ser sinceros, al observar con detenimiento había cada una de las cosas que me encantan, mis libros, mis posters, algunos CD's y mis videojuegos favoritos.

Mi mente dejó de concentrarse en lo que estaba viendo y una segunda oleada de pánico entró a mi cuerpo sin aviso, <<¿Qué demonios estaba ocurriendo?, ¿Dónde estaba?, y lo más importante ¿Dónde diablos esta Kat?>>, traté de tranquilizarme pero era imposible, una fuerte presión en mi pecho hizo que tuviera que sentarme, tomé mi celular el cual estaba en una extraña mesita de noche y verifiqué la hora, eran exactamente las 8:00 a.m. ; Había unos cuantos mensajes, desbloquee mi teléfono y abrí aquellos mensajes.

“¡Buenos Días!” Era un mensaje de una chica llamada Maven, tenía su apodo como Mavs seguido de algunos mensajes como —¿Como amaneció mi corazón? — y demás mensajes un tanto dulces.

La chica había dejado esos mensajes aproximadamente hace 1 hora y desde ese momento no había habido actividad de ella, decidí dejarle un mensaje de buenos días un tanto seco, ya que no tenía ni la menor idea de quien podría ser ella, dejé el celular de donde lo había tomado y abrí mis ojos como platos, ese ni siquiera era mi celular, era demasiado diferente al celular de gama media que manejaba y aun así pude desbloquearlo sin problemas, asustado retrocedí dos pasos y pensé lo más lógico que pudo pasar por mi cabeza y eso era sin lugar a dudas que simplemente estaba soñando. Pensé lo más que pude en despertar, pero no había nada, me acerqué a lo que parecía un baño en aquella habitación me enjuague bien la cara y sin embargo no hubo reacción alguna que indicará que yo iba a despertar, caminé unos momentos por la estancia y un fuerte pitido burló mis pensamientos, por un momento comenzaba a olvidar que es lo que había soñado, lo estaba olvidando, <<¿Quién era aquella chica con la que había soñado?>> pero no... no podía ser solo un sueño era algo tan real, se sentía como si yo hubiera estado ahí física y emocionalmente, volví a recorrer la habitación con la mirada como lo había hecho cuando apenas despertaba, en una esquina logré ver mi mochila favorita, me acerqué abrí aquellos cierres y observé algunos cuadernos, la mayoría era donde guardaba mis bocetos, pero había uno en concreto que llamaba más la atención que aquellos cuadernos de dibujo, era como un diario-bitácora sin entradas recientes por el estado en que se encontraba, me motivé a sacarlo y con los vagos recuerdos que aún quedaban en mi mente comencé a garabatear nombres, sentimientos y absolutamente todo lo que podía recordar.

29/abril/2018 (Según la hora de mi teléfono)

-Kat único nombre que recuerdo-

-Según lo que había experimentado estaba acostado con la que supuestamente debería ser Kat-

-Sentimiento: Sensación de calor y amor-

Aquello fue la primera entrada de mi libreta, decidí que debía salir a respirar aire fresco tal vez eso calmaría mi sentimiento de ansiedad, tomé mi celular, mis audífonos, mi cartera y un suéter ya que afuera estaba más que nublado y soplaba un viento demasiado helado.

Para empezar salí de aquella habitación, las paredes de lo que se suponía era una casa, estaban completamente tapizadas de un azul grisáceo con un diseño de rombos completamente grises, caminé por aquellos pasillos, realmente tenía un clima acogedor, abrí la puerta principal y una ráfaga de viento golpeó en mi cuerpo, me coloqué los auriculares, y comencé a caminar con las manos en los bolsillos, llevaba unos pants y unos tenis deportivos empecé la marcha trotando mientras recorría la avenida, ni siquiera volví mi vista hacia atrás, simplemente caminé, caminé y después comencé a correr sin motivo alguno hacia cualquier dirección así dure más de dos horas, cuando de repente al mirar hacía un letrero con enormes letras neón que marcaban "El vago" los recuerdos volvieron a invadir mi mente, era como si de pronto mi cabeza sucumbiera ante una mágica descarga, estaba en mi pueblo y esa era la mueblería de mi padre, los poderosos azares del destino me habían llevado hasta allí pero lo más sorprendente no fue eso, sino que, mi celular comenzó a vibrar impacientemente en señal de que rápidamente debía sacarlo de mi bolsillo demasiado congelado, un recordatorio apareció en mi pantalla con la leyenda "Tienes una cita hoy a las 3:00 p.m." marcaba la dirección la cual no quedaba más a que a una solas cuadras de distancia, tenía una cita, eran casi las 11:00 a.m. estaba completamente sudado, agotado y lo peor es que no recordaba si quiera donde estaba el apartamento en donde había despertado, abrí mi celular el cual era un modelo de lo que parecía era la última generación del momento, busqué entre mis contactos a mis amigos, marqué a cada uno de ellos y simplemente nadie acudió a mi llamado, deje mensajes en absolutamente todos los chats de ellos, incluso en un grupo en el que supuestamente estábamos todos juntos, en eso un mensaje apareció en mi pantalla como una pequeña burbujita de chat.