Diecinueve: Effy

Capítulo diecinueve.

—¿Por qué a mi? - grito tapando mi cara con la almohada mi cara.

Ya me gastado dos cajas de pañuelos, odio estar enferma, lo odio con mi vida.

—Permiso - sonrió al ver a mi padre entrando con una tasa de té - llame al colegio y avise que no asistirás por lo que queda de la semana.

Asiento con la cabeza ante las palabras de mi padre, no iré en toda la semana, odio a mis anticuerpos, por que son tal débiles.

—Gracias, eres el mejor.

Mi padre, Mark, me da un beso en la frente y se va.

Siento mi cuerpo débil, no tengo ganas de levantarme de la cama, ni siquiera tengo ganas de tomar el té que me trajo mi padre.

El sonido de mi móvil sonando me hace tapar mi cara con la almohada nuevamente, me duele la mente.

Con ira tomo mi móvil.

—¿Qué quieres, rata? - le gruñón a mi mejor amigo.

—Ay, que humor ¿Donde estas? No te he visto.

Chilló.

—No fui, me enferme.

—No.

—Si.

—No.

—Qué si, mierda.

Jaxon ríe con fuerza y yo chilló, me duele mucho la mente.

—Iré a verte, encontraré la forma de salir de este lugar para ir, no tardo.

—Jaxon no es...

Cierro los ojos al escuchar el sonido, ese puto sonido cuando te cortan, odio ese sonido.

Miro mi habitación pensando en que hacer para divertirme, mi computador se encuentra sobre mi escritorio muy lejos de mi alcance, mi móvil, no quiero, me aburre.

—El ocio es es la mejor idea.

Hablo en voz alta y me acomodo en mi cama, miro el té que se encuentra aún lado, no siquiera para tener un momento de ocio sirvo.

Me siento en la cama y alcanzo el té, el cuál comienzo a beber con lentitud.  Ayer llegué a mi casa a las ocho de la tarde, estaba obscuro y mi padre estaba preocupado por mi, Harper y mi madre habían salido a buscarme en el auto, también estaban preocupadas, pero yo le había dicho a mi hermana que llegaría tarde.

Ayer tenía que pensar, tenía que aclarar mi mente con respecto a todo lo que me esta sucediendo, deje de ser la chica invisible de la noche a la mañana, bueno, no deje de serlo, aun lo soy, pero no para el grupo de Effy, deje de ver a la gente como las veía, me di cuenta que juzgo siempre a las personas. Me gustaba Aiden, lo encontraba hermoso, pero resultó ser un poco hombre, juega con las mujeres, las utilizan, ocupa su belleza para lastimar.

Miro la hora en mi móvil, son las 11:30 de la mañana.

Dejo mi móvil bajo la almohada y la taza de té en el suelo, necesito descansar.

~°~

Abro mis ojos con lentitud, el sonido de mi móvil me desconcierta, miro a mi alrededor y grito mi cara, busco mi teléfono bajo la almohada y contesto.

—¿Bueno? - contestó dando un bostezo.

—¿Podrías ser cortes y abrir, Holland?

Abro los ojos, mierda lo olvide, olvide que Jaxon iba a tratar de venir a verme.

—Voy de inmediato.

Dejo mi móvil en la cama y de un salto me pongo de pie, frotó mis brazos con mis manos dándome calor, hace mucho frío, abro las cortinas de mi cama y me doy cuenta que aún llueve y el día esta gris, creo que se viene una tormenta. Salgo de mi habitación y corro escaleras abajo, abro la puerta de enreda y le sonrió a Jaxon y Effy.

—Hola

Effy hace una mueca de asco y ríe.

—Esta horrible, Rose - me abraza y tiemblo, esta helada - traje a una amiga, espero no te moleste, ella fue nuestro transporte.

En mi campo de visión aparece un chica un poco más alta que Effy, morena, castaña, de ojos verdes, pero casi son marrones, quizás estén así por la tormenta.

—No importa, pasen.

Me hago a un lado y entran.

—Te deberías abrigar - me dice Jaxon sentandose en el sillón.

Miro mi atuendo, llevo un short corto y una polera larga, estoy descalza.

—No tardo.

Subo corriendo la escalera, me despojo de mi ropa, miro mi armario y tomó un buzo gris junto a un poleron negro, me coloco mis sandalias y voy al baño, pero antes de entrar le grito a Jaxon.

—¡Jaxon, prende la calefacción!

—¡Esta bien!

Entro al baño, me lavo los dientes y cara.

Bajo las escaleras haciéndome una cólera alta, los chicos se encuentran sentados en los sillones mirando la televisión.

—Volví.

Effy y Kota me sonríen, Jaxon sigue mirando televisión.

—¿Como te resfriaste? - me pregunta mi mejor amigo, su tono no me gusto, fue como de regaño.

—Larga historia.

—Pues tenemos tiempo - dice Effy sonriendo.

Asiento con la cabeza.

—¿Tienes té o café? - me pregunta Kota.

—Si, en la cocina, te llevo.

Kota y Effy se ponen de pie.

—¿No vienes? - le pregunto a Jason.

—No, tu hazme el mio, sabes como me gustan.

Camino hacia la cosita y saco todas las cosas de los muebles, caliento el agua y me dedico a examinar a Kota, es linda, tiene lindo fisico y es alta, parece una modelo.

—Nunca te había visto - le digo.

—Si, bueno, no soy mucho de estar en los mismos lugares donde esta Aiden, así que siempre estoy en el patio.

Asiento con la cabeza, Aiden nunca va al patio, por eso yo nunca iba, solo para verlo me quedaba en los pasillos.

—¿También te desagrada? - Kota asiente con la cabeza.

—Alaska es una de mis mejores amiga...

—¿También es tu mejor amiga? - le pregunto a Effy y esta niega con la cabeza.

—Mi mejor amiga es Kloe y email, creo. Emma es la mejor amiga de ambos grupo.

—¿Ambos grupos? Me perdí.

Vierto el agua caliente en las tazas.

—Veras, todos somos buenos amigos, y somos un gran grupo, pero nos dividimos en dos subgrupos - Effy me mira - Kloe, Aiden, JP, tu hermana Harper y yo, somo uno.

—Alaska, Rowan, Alexis, Thalia y yo somos otros grupos - hago una mueca ante las palabras de Kota - no creo que nos conozcas a todas.