CAPÍTULO 13

Nova Roma se alzaba majestuosa frente a los ojos de Francisco Romanov mientras caminaba por sus calles adoquinadas. A su alrededor, los edificios de estilo clásico se alzaban imponentes, decorados con elementos tecnológicos que añadían un toque de modernidad a la arquitectura tradicional. Con transportes que surcaban el cielo y recorrían las calles con una elegancia futurista. Aerocarros que flotaban en el aire, propulsados por avanzada tecnología, compartían el espacio con carruajes tirados por caballos robóticos, creando un contraste armonioso entre lo antiguo y lo nuevo.

Decidido a descubrir la verdad detrás de los recientes eventos, Francisco se encontraba en una misión personal para investigar los asesinatos que habían sacudido tanto a Nova Roma como a Nova Tenochtitlán. Sabía que había una conexión más profunda entre ambos imperios y que su búsqueda de respuestas lo llevaría a desentrañar secretos inimaginables.

Todo parecía apuntar a una conexión más profunda de lo que inicialmente había sospechado. La urgencia de descubrir la verdad lo impulsó a dirigirse a la residencia de su hermano mayor, Frank Romanov.

Decidido a descubrir la verdad detrás de los recientes eventos, Francisco se encontraba en una misión personal para investigar los asesinatos que habían sacudido tanto a Nova Roma como a Nova Tenochtitlán. Sabía que había una conexión más profunda entre ambos imperios y que su búsqueda de respuestas lo llevaría a desentrañar secretos inimaginables.

Mientras recorría las calles, recordó a su hermano mayor, Frank Romanov, un hombre de mirada astuta y labia afilada. Frank era conocido por su habilidad para recopilar información sobre cualquier cosa relevante ocurrida en cualquiera de los dos imperios y sus dinámicas políticas. Francisco sabía que, si quería obtener información crucial, su hermano sería la clave.

Frank vivía en una lujosa residencia en las afueras de la ciudad, un lugar que reflejaba la posición influyente de su familia en Nova Roma. Francisco lo encontró en su estudio, rodeado de tomos antiguos y dispositivos modernos que lo conectaban con el mundo exterior. La mirada de Frank se alzó al ver a su hermano menor entrar.

"Francisco, ¿qué viento te trae por aquí?", dijo Frank con una sonrisa, sus ojos brillando con una chispa de curiosidad.

"Frank, necesito tu ayuda", respondió Francisco, su tono serio.

Frank levantó una ceja, interesado. "Oh, ¿y en qué puedo ayudarte, hermano mío?"

Francisco se acomodó en una silla, su mirada fija en su hermano. "Quiero saber más sobre la dinámica entre Nova Roma y Nova Tenochtitlán. Necesito información sobre la historia de ambos imperios, sus conexiones y sus conflictos."

Frank se recostó en su silla, su expresión pensativa. "Esa es una solicitud bastante amplia, Francisco. Nova Roma y Nova Tenochtitlán han tenido interacciones a lo largo de los años, algunas más amigables que otras. ¿Por qué necesitas esta información?"

Francisco respiró profundamente, sabiendo que estaba a punto de revelar un secreto delicado. "Estoy investigando los recientes asesinatos en ambos imperios. Creo que hay una conexión entre ellos, algo más grande de lo que podemos imaginar."

Los ojos de Frank se estrecharon mientras estudiaba a su hermano menor. "¿Asesinatos? Eso suena peligroso, Francisco. ¿Qué te hace pensar que puedes adentrarte en algo así?"

Francisco mantuvo su mirada firme. "Porque estoy dispuesto a llegar hasta el final para descubrir la verdad. Y necesito tu ayuda para hacerlo."

Hubo un momento de silencio tenso antes de que Frank suspirara y se levantara de su silla. "Muy bien, hermano. Te ayudaré. Pero recuerda que esto no será gratuito. Tengo mis propias conexiones y recursos que me han costado mucho tiempo y esfuerzo."

Francisco asintió, agradecido por la ayuda de su hermano. Sabía que Frank siempre tenía un precio, y estaba dispuesto a pagarlo para llegar a la verdad. "Lo entiendo, Frank. Estoy dispuesto a hacer lo que sea necesario."

Frank se acercó a su escritorio y tomó un dispositivo. "Aquí tienes. Esta es una llave de acceso a mi red de información. Podrás encontrar datos sobre los imperios, sus líderes, sus tensiones y sus interacciones. Pero recuerda, Francisco, esto no es un juego. Las acciones tienen consecuencias, y si te adentras demasiado en este camino, podrías enfrentarte a peligros que ni siquiera puedes imaginar."

Francisco tomó el dispositivo con determinación. "Lo entiendo, Frank. Gracias por esto."

Frank le dio una mirada penetrante. "Una última cosa, Francisco. No soy el único que está dispuesto a recopilar información. Ten cuidado con los demás y con lo que descubres. Algunos secretos son mejor dejarlos enterrados."

Un atisbo de malicia cruzó por los ojos de Frank. "Entiendo. Y, por supuesto, habrá consecuencias si me traicionas."

Francisco entendía que estaba caminando por un terreno peligroso al pedir la ayuda de su hermano, pero también sabía que no tenía muchas opciones. A medida que compartían miradas, ambos hermanos comprendieron que, a pesar de sus diferencias y sus secretos, estaban unidos por un objetivo común: descubrir la verdad y proteger sus imperios.

Después de su conversación con Frank, Francisco se sumergió en la vasta red de información de Nova Roma. Durante días, analizó archivos, registros históricos y noticias recientes en busca de cualquier pista que pudiera relacionar los eventos en Nova Roma con lo que estaba sucediendo en Nova Tenochtitlán. Fue entonces cuando tropezó con algo que llamó su atención: un centro de investigación del alma al sur del imperio en los campos cálidos que era así como conocían normalmente a esa zona del continente.