Lili en línea.
Lili: ¿En serio pasarás el sábado junto a Kevin?
Fanny: Mi suerte no puede ser tan mala. Lo odio de verdad.🙄
Lili: Que mala suerte amiga. Tendrás que pasar ese día con el, ánimo quizá te declare su amor y sean novios de una vez por todas, pero hey; ya sabes que del odio nace el amor.🙃
Fanny: JAJA para nada. Ni en sueños. El y yo no somos compatibles y además me odia, el sentimiento es mutuo . Tendré que decirle a Carlos que ese día no podremos vernos.
Lili: Se pondrá celoso porque estarás con Kevin.🤣
Fanny: JAJAJAJA lo dudo. De igual forma le llamaré por teléfono y le avisaré para que luego no haya malentendidos.
Fanny toma su teléfono y le llama por teléfono a Carlos.
Ring ring...
Fany: Hola, amor. ¿Cómo estás?
Carlos: Hola, amor. Bien ¿y tú?
Fanny: Pues no tan bien, me castigaron en la preparatoria. El sábado tendré clase y todo por culpa de Kevin jaja.
Carlos: Siempre es por culpa de él. De seguro le gustas a ese idiota.
Fanny: No creo amor, calma. Te lo compensaré, ¿qué tal si de este viernes al otro nos vemos tú y yo? Así pasamos tiempo juntos.
Carlos: Está bien... el sábado que estarás castigada quizá yo también esté ocupado jaja, así que creo que esta bien vernos después, amor.
Fanny: ¿Me estabas mintiendo sobre qué saliéramos el sábado? Jaja. Amor me retiro, me iré a bañar. Buenas noches, descansa bebé.
Sábado...
Kevin despierta sin ánimos. Se prepara unos waffles mientras ve un video de doctops sentado y comiendo en la barra de la cocina. No deja de pensar en lo que aguarda más tarde. La maestra que estará con ellos no es muy amigable, por alguna razón siente como una especie de odio hacia Kevin.
Por otro lado, Fanny se prepara para ir a la escuela. Baja y toma un poco de jugo de naranja, prepara su ropa y se prepara para el día en que esta por cambiar su vida aunque no lo sabe.
Horas más tarde...
Fanny recibe la noticia que una prima se encuentra enferma, aparentemente cayó en coma. Y no puede ir a verla por qué tiene clases en la preparatoria, así que tiene pensado ir más tarde.
Pide un Uber con dirección a la escuela. Son las 3 de la tarde y se dirige a la preparatoria. No sin antes enviarle un mensaje a su amiga.
Fanny: "Este es el peor día de mi vida, ¿será que puede empeorar aún más?"
Envía el mensaje a su mejor amiga Lili.
...
Mientras tanto Kevin ya va en camino a la escuela, está un poco preocupado por los cambios bruscos que han llegado a su vida, sin mencionar que últimamente ha tenido crisis existenciales por las madrugadas, cosas habituales a la edad de un joven como él pero tenerla a diario no es tan común.
Ambos chicos llegan a la escuela, Kevin se queda mirando su teléfono mientras mensajea antes de ingresar a la escuela. Pero luego ve llegar a Fanny.
—Vaya... comenzaba a sentir que el día iba tan bien...—expresa Kevin en tono sarcástico.
—Siempre me ha gustado alegrarte el día...—responde Fanny con una sonrisa.
Por primera vez en mucho tiempo ambos lograron conectar, aunque pronto regresarán a su pelea cotidiana.
Cuando entran observan que no hay nadie, solo los conserjes y unos cuantos alumnos que se pueden contar con los dedos de una sola mano.
Los chicos ingresan al salón y la maestra Amelia ya los esperaba, estos se sientan y ven en sus pupitres unas hojas que deben estudiar para el examen que se les aplicará más tarde.
Ambos comienzan a estudiar mientras escuchan el sonido del viento afuera de los salones. Pasa un rato de que ambos comenzaron a estudiar, el silencio se apodera del salón. La maestra no esta así que los chicos se tendrán que hablar por una u otra forma.
—Fanny... la página 9 no explica bien el resultado—dice Kevin en voz baja.
—Ah mira que me tenía con el pendiente. Ahora podré estudiar tranquila-respondió sin quitar la mirada de las hojas.
—Alch... maldita. Deberías de trabajar de payasa, créeme te iría bien—responde Kevin girando de nuevo para seguir estudiando.
Dan las 5 de la tarde y la maestra entra con las hojas del examen. Ambos terminan de responder a las 6 de la tarde y la maestra comienza a revisar los exámenes pero se retira a otro salon, mientras tanto les dice a los chicos que deben quedarse en el aula hasta las 8:30, así que básicamente tendrán que convivir entre ellos.
Ambos chicos no les pareció la idea pero no había más opción.
A las 7 de la tarde ya no hay nadie en la escuela, solo un guardia afuera y la maestra en el salón de computación revisando sus exámenes.