(Este capítulo está conectado con el 4, pero se cuenta desde la perspectiva de Fanny).
Kevin está parado frente a su nueva casa, una casa desconocida para él, ya que la familia que vive en ella jamás ha convivido con Fanny, pero en este caso ella está dentro de un cuerpo que pertenece a esa familia, lo cual no debe ser difícil, o eso cree ella.
Se acerca lentamente y ve el jardín, tiene dos arboles uno de izquierda y otro a la derecha, finalmente toma la manija de la puerta y antes de girarla escucha que un perro ladra, y olfatea por detrás de la puerta; abre la puerta finalmente y espera que el perro se abalance sobre el, pero para su sorpresa este lo ve y comienza a olfatear el miedo de Kevin y gruñir.
—¿Jack?...—le habla al perro y hace señales con su mano para que vaya hacia el.
—¿Que te pasa Jack?, si es Kevin...—dice mientras se asoma el padre y ve que su hijo ha llegado.
Kevin cierra la puerta y solo sonríe a la familia.
—¿Que le hiciste a Jack? No hay un día en que no se abalance sobre ti cuando llegas...—comenta su padre extrañado por la actitud del perro.
—No lo sé papá, quizá esta confundido...—responde Kevin mientras sube con su mochila hacia su cuarto.
Kevin sube rápidamente a su cuarto y abre la puerta del cuarto que le había indicado Fanny(Kevin), se lleva la sorpresa de que es un desorden total.
—Me llevará días acomodar este desastre, como es posible que una persona pueda vivir así, ahg—dice mientras sostiene una camisa usada, la lleva al bote de ropa sucia que parece que no ha usado en semanas.
—De hecho sí, es un cuchitril aquí Kevin... pero parece que te sientes como alguien nuevo y quieres limpiar tu cuarto, aunque siempre se queda en palabras—comenta su madre mientras está recargada en el marco de la puerta y que ya tenía rato que escuchaba las palabras de Kevin.
Kevin solo ríe nerviosamente, no puede evitar sentirse nervioso al estar con personas que no conoce, son sus padres técnicamente, pero ella jamas convivió con ellos.
Después de unos minutos comienza a acomodar las prendas en el bote de ropa sucia, limpia la computadora y lleva la basura a su lugar.
Después de unos minutos sube su padre y se queda sorprendido al ver a su hijo acomodando la ropa y su cuarto en general.
—Oye Kevin, parece que olvidaste que me ayudarías a pintar la puerta que tenemos atrás...—se pronuncia mientras entra al cuarto.
—Lo siento pero no lo recuerdo...—responde su hijo mientras acomoda unas prendas y las coloca en el closet.
A su padre le sorprende la forma en que Kevin toma las cosas y está de pie, posiciones extrañas para Kevin, sin mencionar su actitud que nunca se le había visto hacer algo similar.
—Parece que lo olvidaste, ¿me podrías ayudar?—pregunta al ver que el chico está ocupado.
Kevin asiente con una sonrisa y baja con su padre directo al patio, ahí el le indica lo que harán. Después de conocer la puerta Kevin toma la brocha y comienza a pintar, su padre lo ve extrañado.
—No sabía que eras zurdo, y así no se pinta—dice mientras le muestra como toma pintura y con la brocha desliza sobre la puerta dandole color a la misma.
Kevin solo sonríe y suspira.
—Lo hemos hecho mas veces, parece que estás estresado y por eso no lo recuerdas, si te sientes mal no es necesario que me ayudes hijo—agrega el padre mientras coloca su mano en el hombre de su hijo.
—Te ayudaré, estoy bien—responde Kevin mientras se reincorpora.
Después de un rato se ta un poco apenado y trancando de volver a su cuarto.
Regresa a la casa e intenta abrir la puerta hacia ella misma.
—Tienes que empujar Kevin...—dice su padre desde lejos un poco sorprendido.
—Lo siento—sonríe e ingresa a la casa rápidamente.
Camino a su cuarto se encuentra a su madre en las escaleras, ella le comenta que un primo de Kevin está en la línea de espera.
Suspira y se acerca para tomar el teléfono y responder a su primo, este le pregunta por algunas cosas de la PC, ella sin saber qué responder dice componentes al azar y cuelga el teléfono.
—Mamá me debo bañar...—dice antes de tomar una toalla e ingresar al baño.
Abre el teléfono de Kevin, por suerte es desbloqueo fácil así que poner la contraseña no se le dificulta. Entra a Spotify y busca su música para relajarse un rato, le da a play y comienza a reproducirse.
Suspira y comienza a desvestirse.
—Genial, ahora tendré que ver desnudo a Kevin, o más bien verme desnudo...—dice en voz baja mientras escucha a Melanie Martínez.
Se despoja poco a poco de las prendas y se para delante del espejo que está en el baño, aprecia todo el cuerpo después de bajarse el bóxer.
—Nada mal—dice mientras ve la entrepierna. —parece que Kevin se defiende bastante bien—dice riendo.
Después entra a la ducha y se relaja por un buen rato, hasta así su música se ve interrumpida por mensajes de amigos, los cuales preguntan si jugará hoy en línea con ellos, se decide por no responder los mensajes y seguir con las burbujas.