CARTA DE ELLA
KENDALL:
Debiste morir ese día.
Todo lo malo que te ha pasado es porque eres tonta y es hereditario. Tu madre ha sido tonta y seguirá siéndolo, te ha puesto en los ojos de todos y a veces la odias.
Pero no puedes culparla por lo que pasó hace un año. ¿Sabes algo? Nadie va a saber nunca lo que pasó y eso es tu culpa. Tal vez si lo hubieras dicho se hubiera hecho algo pero ahora es muy tarde.
Aunque, ¿A quién le ibas a decir? ¿A tu mamá? ¿Para qué? ¿Para qué lo contara a desconocidos? Claro, eso sería algo que le daría atención pero te humillaría mucho más de lo que ya lo ha hecho.
No sé qué se supone que te diga aquí, incluso si tuvieras aunque sea un amigo no hay nada bueno que decir de ti. Estas condenada a vivir una vida mala y aburrida y fea. La primera vez que pensaste que algo positivo iba a suceder terminó poniéndote en una de las peores situaciones de tu vida.
Así que sí, Kendall. Debiste morir ese día. Ojala hubiera sucedido, tal vez la gente finalmente se enterarían de todo y te comprenderían o tal vez se burlarían.
Quién sabe. Si estas muerta, ya no vas a saber si eres una burla o si la gente te odia. Te has muerto, nada importa.
Espero que mueras Kendall, espero que lo hagas pronto.