MI ENAMORADA DE VERDAD
Las tareas escolares se hicieron más pesadas, los trabajos llegaban a montones, exposiciones, monografías, trabajos grupales…. Los maestros llenaron de deberes a los alumnos para “recuperar el tiempo perdido” …. (¿Qué culpa tenían los niños de que no les pagaran bien? – aun no lo entiendo)
La carga escolar no disgustaba a Catalina pues sentía que una vez más ponían a prueba su capacidad intelectual, es más, se podría decir que era la única feliz en la escuela con la gran cantidad de tarea…..
Oye Cata… y ¿con Flavio qué onda ya son enamorados o no? – le preguntaba Mónica
No… nada que hablas, solo somos amigos...
Pero siguen igual no….
Me imagino que si…
Ay no seas hipócrita, te gusta, y está bien…. No me digas que ni siquiera te ha besado, todos comentaron que el ultimo día de clases antes de la huelga estaban chapando en el malecón – le dijo muy coqueta la amiga.
¿Chapando? Noooooooooooo, estas mal. Mira para dejarlo en claro seguimos estando igual, él es el mismo tarado que se cree el supermacho y cuya enamorada le sacó la vuelta en menos de una semana y yo…. Soy su tapadera nada más. - le dijo la niña en tono sarcástico...
Cata… ¿Cuándo vas a terminar eso?
Quieres que te diga la verdad Mónica, me gusta el juego porque ahora ya nadie me molesta, es más creo que todos me tienen miedo gracias al chico jefe de la mafia – muy sonriente ella.
Bueno…. En fin, es tu rollo, pero después no te quejes cuando al jefe de la mafia le guste otra porque tu no le haces caso…
Catalina solo sonreía mientras hacia sus deberes, pero lo que le dijo Mónica sin duda la dejo pensando….
No debería hacerme ilusiones con algo que jamás pasara – pensaba la niña.
Así transcurrían los días… en el bus ella siempre iba leyendo o conversando con Flavio, pero siempre de la tarea…. mientras que en la cabeza del niño solo rondaba la idea de cómo decirle a aquella niña que la amaba más que a todo y aunque había muchos temores él estaba decidido a decírselo…
Flavio ¿hiciste los dibujos que te pedí? - El chico solo la miraba…
¿Holaaaa? ¿qué tienes ah? ¿qué te pasa?¿Porque me miras así?....
el niño quería decírselo…
Espera… espera… no hiciste la tarea ¿verdad?... ¿porque eres así? Escúchame Flavio Rivera yo no te voy dar la mía para que la copies ok… debes ser mas responsable, o sea ya estás en cuarto año… que esperas para hacer tus cosas….. – y la niña se mandó con el rollo de la responsabilidad…
El solo la oía, levantaba la mirada al techo del bus y se agachaba sonriendo… ¡Eres una taradaaaa! ¡Estudiosa…..pero tarada!
Aaaaah yo ¿tarada?... ¿Quién está a punto de repetir el año? – le contestaba mientras se miraban….
Ya no me jodas… si hice la tarea…. solo que me gusta verte leer.
Si claro….¿como no?
Los días pasaban y ese era el dialogo de todos los días…. Él quería decirlo, pero algo ocurría y no podía…. Así son estos niños que se creen los bacanes en grupo, pero solitos nada de nada..
Una mañana la niña estaba leyendo y junto a ella el pequeño Latin Lover, con cara de niño bueno que no hace nada….. de pronto ella volteo a verlo y se daba con esos hermosos ojos que adoraba y le hacía temblar todo el cuerpo…. ¿Qué me miras? – le dijo la niña.
Cata…. ¿podemos hablar?
¿Es en serio?... o sea, hablamos siempre, en la llegada, en la salida, en el recreo y… ¿Me estas pidiendo permiso para hablarme? O sea Tuuu…. El niño que nunca obedece pidiendo permiso para hablar… por favor cuantas veces hasta me has empujado de mi asiento para sentarte conmigo…. El niño solo la observaba…entre coqueto y molesto Cállate … cállate y escúchame….
Ah y todavía se ofende el señor…está bien te escucho, dime… pero ella tomo su cuaderno e hizo como si leyera. Obviamente esto enfureció al chico..
¿Puedes soltar tu maldito cuadernito un ratito por favor? – tomo el cuaderno y lo aventó al asiento delantero…
Oye que tienes? La niña se levantó y tomó su cuaderno… te pasas, ya.. ya te escucho dime…le dijo mirándolo a los ojos y entrelazando los brazos como quien pone mucha atención….pero molesta.