¿ La cuarta esposa? ¡jamas!

4 El futuro heredero sera hijo de una latina

Farid Ahmed Basha

Semanas atrás

 

—Me estás diciendo que te acostaste con una mujer y esta escapo la mañana siguiente cuál ladrón—mi padre me mira enojado, contarle esto fue difícil pero necesario, sobre todo que sino la seguridad que me acompañaba en las sombras se lo informarían.

En cuanto la mujer salió de mi habitación desperté por el ruido que hizo y me dio pánico darme cuenta de mi poco dominio, no pude pensar con claridad si era alguna espía o algo asi que solo quisiera atentar contra el mandato de mi padre.

—Si fui un idiota que está un poco estresado, no tome las mejores decisiones pero cuando la vi bailando me paso algo que con mis esposas no me pasaba, si ellas no jugaban con ya sabes—le indique mi entrepierna y mi padre sonrió de lado.

—Eres un...

—Pero dejo algo muy interesante—le muestro la tarjeta del abogado, mi padre me hace señas de sentarme, apenas esto sucedió ayer y no sabemos que significara aquel encuentro si algo aleatorio y casual o planeado, además esta que no usamos preservativo en mi cultura no es muy común, ya que esto de la infidelidad es prohibido, mi primera mujer fue Jelila y solamente he estado con mis tres esposas bueno y con la sexi latina.

—Investigaremos y llegaremos al fondo de todo esto, solamente espero que en verdad esto sea casualidad o no podré impedirte que te castiguen por adúltero—asentí y me retire no queria ver a ninguna de mis esposas aunque al ver a mi Jelila mi miembro se irguió y rápidamente la tome ni bien ingresamos a nuestra habitación, ella es perfecta y a pesar de no poder darme un hijo es la mujer que más amo, mis otras esposas son importantes y trato de brindarles tiempo, cariño y detalles no obstante mi perdición es y será mi Jelila la dueña de mi alma.

Nairoby Castillo, es hermosa seguirla a través del movil gracias a las personas que al vigilan y verla en acción sin ella saber que la observan es refrescante, trabaja, ayuda en casa y juega con algunos niños que viven cerca de su casa, pensé en dejarla en paz cuando descubrimos que fue una casualidad encontrarnos, estaba por dar por terminada mi travesía de vigilar a la sexi latina de curvas pronunciadas cuando esta se empezó a sentir mal y algo me dijo que no la dejara, los informantes me explicaron que tenia todos los síntomas de un embarazo pero esta no parecía notarlo, por lo que viaje de regreso a la isla para verificar que un hijo mio no quede rodando por el mundo, estoy seguro de que si lo está es mio, pues esta se la pasa trabajando o en su casa.

En cuanto llegue me informaron que había decidido ir al médico, rápidamente nos hicimos de sus pruebas sabiendo todo mucho antes que ella.

Para mí fue una bendición de Ala poder ser padre y a pesar de que vendría al mundo en medio d emucho caos, estaba feliz por su llegada.

Cuando la enfrente no fui nada sutil y esta se alejó como si yo fuera un desquiciado y talves asi se vio en el momento, por lo cual regrese a Kuwait y hable con padre.

—¿Dónde estabas?—cuestiono molesto.

—Padre, la chica latina, está embarazada y el hijo es mío, aquella noche dejo frutos—solté sin premura.

—¿Estás seguro?—asentí y este me miro por largo rato, luego sonrió de medio lado como acostumbra cuando tiene una de sus brillantes ideas.

—Viajaremos hasta esa isla y traeremos a tu cuarta esposa porque debes desposarla para que mi futuro heredero nazca como es debido, ¡Dios el heredero será hijo de una latina!—asiento y empezamos a preparar el viaje.

Mis tres esposas están furiosas por mis contantes salidas sin ellas, Jelila ya insinuó que no queria otra esposa por lo que supongo que es mejor que lo sospechen, asi cuando vean a la latina no se sorprenderán tanto.

Para evitar conflictos les prometo pasar una semana con cada una en cuanto llegue, ya que sé que al saber de la cuarta esposa tiraran un grito al cielo.

 

En cuanto llegamos somos guiados por los miembros de nuestra seguridad hasta la casa de ella, sabemos que vive con su abuela, su madre y hermana.

 

—Buenas tardes, señor, ¿en qué podemos ayudarle?—exclama la que supongo es la madre, según recuerdo del archivo.

 

—Buenas señora, iré al grano, soy el jeque de Kuwait, mi nombres es Nadir Ahmed Basha vine por su hija, Nairoby ella debe casarse con mi hijo, asi manda la ley…—decía mi padre más es interrumpido por Nairoby.

—Espere un momento, ¿que dice?, yo no debo hacer nada, yo soy libre—musita con enojo, ella está confundida y la comprendo, pues ni siquiera sabia mi nacionalidad.

 

—Yo tampoco comprendo nada—al darme cuenta de la confusión de las mujeres decido acercarme en cuanto estoy en el campo de visión de la latina envía dagas a todo mi ser.

 

—Déjenme explicarles—musita mi padre y nos invitan a tomar asiento, veo a todas parte y su casa es pequeña  pero está bien arreglada y limpia.

 

—Su hija tuvo intimidad con mi heredero y esta quedo embarazada, ahora está gestando a nuestro heredero, mi hijo me contó que cuando estuvo con ella no uso protección, asi que la enviamos a investigar y seguirla en todas estas semanas nos percatamos que era un chica buena y decente asi que no tenemos dudas que esa criatura sea de mi hijo...

—Por supuesto que no, yo he criado hijas decentes—se exalta la madre, para mi padre ver a una mujer defender asi su crianza es excitante.

 

—En mi cultura la familia es lo más importante y no existe eso de las infidelidades o los hijos bastardos, pero...

—Eso no, pero si existe tener varias esposas, hipócritas—expreso la latina y sonrió, ya que ella no puede entender nuestra cultura, sé que para estos lares las mujeres son celosas y posesivas, asi que no sé cómo llegaremos a un acuerdo.

 

—Tradiciones mi niña, pero cada mujer tiene más de lo que necesita y nunca son maltratadas físicamente, si quieren trabajar o estudiar eso depende del acuerdo que hagan en el matrimonio y esto debe respetarse y sobre todo ellas pueden divorciarse si no están de acuerdo con que su hombre tenga otras esposas no se les obliga como se hace ver en las pantallas—todo lo que dice mi padre es cierto, no todos los hombres deciden tener más esposas sobre todo que deben tener cierto estatus para hacerlo, yo tampoco queria tener más que mi Jelila pero a veces nuestros planes cambian y debemos adaptarnos.




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