La distancia que nos separa

Capítulo 15 - Nuevos aires

- ¡Estoy tan feliz amor por todo esto! No puedo creer que lo hiciste

- Lo hicimos, porque has sido el mejor novio del mundo, me has cuidado, acompañado y mimado

- Lo sé, ahora solo quiero disfrutar nuestra vida juntos, ¡amor esto me ha hecho ver lo importante que sos para mí! Sos mi refugio, la dueña de mi corazón, cambiaste mi vida

- Ay rubio, que cosas lindas me decís, me vas a hacer llorar

- ¡No quiero que llores! Es la verdad, me has dado mucho más de lo que imaginé que iba a tener, soy muy feliz a tu lado, no puedo imaginar la vida sin vos

- Por suerte, ahora voy a estar un rato más por acá

- Vir no digas esas cosas, que me asusté mucho.

- ya pasó mi amor, ahora miremos hacia adelante.

Esa noche hubo una gran celebración familiar, todos comieron juntos, estaban felices por la joven pareja y se palpaba en el aire.

Pronto llegó el cumpleaños de Gaby, el número 24, otro motivo de celebración.

- Bueno amor, dicen que después de los 21, todo viene cuesta abajo, estás cada vez más viejito

- Viejito te voy a dar, malcriada

- Siii por vos, Tengo una sorpresa para vos...

Gaby se sonrojó

- Mmm ¿¿qué estás pensando?? ¡Pervertido!

- No es así... pensaba en una torta de chocolate, selva negra si es posible

- Pervertido culinario, me gusta

-jaja seguro

- Bueno... no me creas, dijo fingiendo ofenderse

Vir le regaló un fin de semana para ambos en un spa al pie de la montaña, con aguas termales y una hermosa bata

- Parece que vos sos la pervertida, me querés solo para vos y desnudo en el medio de la montaña

- No lo sé, quizás, pero me lo merezco, te extraño, extraño tu cuerpo y nuestros momentos

- Yo también extraño tenerte solo para mi

Cuando Mel supo que quería irse un fin de semana con su novio, puso el grito en el cielo

- Ni se te ocurra, no vas a poder ir

- Mamá, a ver, llevamos mucho tiempo juntos y te has ido de casa todos los fines de semana, has ido a Miami, Buenos Aires y dios sabe dónde más, entonces ¿qué tiene de malo? Nos hemos ido de vacaciones con nuestros amigos más de una vez ¿y ahora te molesta esto? ¿Es por el sexo? No estoy embarazada hasta ahora, le dijo divertida ante el enojo de su madre, tampoco pretendo estarlo, pero si quisiéramos hacerlo, tendríamos más que alguna oportunidad... de hecho años de ellas.

- Es cierto Vir, pero la verdad que es atípica la vida que llevan, tiene más bien que ver con el hecho de que deberías descansar aún

- Bueno puede ser que sea atípica, pero no le hacemos mal a nadie, he pasado por mucho este año, la verdad que lo que diga la gente me tiene sin cuidado y me gustaría mucho poder ir tranquila, sin que te molestes. Porque, aunque lo hagas, igual me voy a ir de cualquier manera, seguro te vas a la casa de Fede y no te vas a enterar, ¿entonces por qué justo ahora haces las cosas difíciles? Tampoco estoy pidiéndote irme a vivir con él

- Ok ok podés ir, pero por favor, no quisiera verte arrepentida de vivir un amor tan intenso.

- No mamá, no somos intensos, somos jóvenes, libres, felices, enamorados, quiero disfrutar. La vida es demasiado corta, creo que esa es la lección que debimos aprender con todo lo que hemos vivido en el último tiempo.

Ambos partieron el día viernes dispuestos a pasar un fin de semana romántico, ya antes se habían ido de vacaciones juntos, pero estaba la expectativa en el aire de su reencuentro después de todo lo vivido.

Ni bien llegaron se maravillaron al verse entre las montañas, en medio de hermosas piscinas de agua termal, agua natural y un paisaje maravilloso. El río rodeaba el hotel y spa, de fondo se veían las montañas nevadas en todo su esplendor. El clima era algo frío pero el lugar inmejorable. Cada detalle estaba pensado para el disfrute y descanso.

Llegaron abrazados y abrigados; Gabriel estaba muy feliz de ver a su chica tan entusiasmada, se cambiaron y fueron a la piscina principal donde jugaron y se rieron como dos niños. Al verla sacarse la bata y ver su cuerpo en bikini, Gabriel suspiró, era preciosa, era suya...

Luego de comer juntos fueron a hacerse masajes en el spa y terminaron el día con un baño de fango. Muy divertidos volvieron algo sucios a la habitación y se ducharon juntos.

Gabriel la enjabonó con la misma suavidad que se toca a una flor, Vir estaba preocupada de que él la considerase tan frágil. En la cama mientras se vestían, él le secó el pelo, ella no aguantó más y lo besó con toda la pasión contenida. Gabriel respondió y reaccionó inmediatamente a su beso. Pronto se perdieron en el cuerpo del otro, la besó en cada rincón, ella se dejó hacer, su lengua de fuego acarició todo el torso, los pechos y al llegar a la pelvis mordió su carne, se abrió paso en su centro, pliegue por pliegue hasta adueñarse de su parte más íntima y cuando ninguno de los dos pudo más, la penetró centímetro a centímetro, empujando su trasero hacia su ingle disfrutando la sensación de estar dentro de ella. Mientras mordía con anhelo sus pechos, su cuello; al final, se dejó ir dentro de ella y la vió llegar al éxtasis en sus brazos.

Sus cuerpos se reencontraron y ambos encontraron alivio en el otro.

Mientras cenaban en el hermoso restaurant del hotel Gabriel le propuso que los dos ahorraran dinero para viajar a Europa, recorrer varios lugares que les gustaran a ambos

- ¿Dónde te gustaría ir princesa?

- Me gustaría conocer Grecia, sus islas me refiero, amo toda esa historia. En Italia Capri y Roma también me gustaría ir a Londres y Bruxas

- Mmm a mí me gustaría ir a Madrid, París, conocer Lourdes y me gustaría mucho conocer Holanda. Roma sin lugar a dudas también mi amor, me encantaría

- Travieso, te gusta Holanda porque es un lugar bastante libertino

- Exacto, como mi novia

- Virginia fingió ofenderse, Y ambos se rieron




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