Capítulo 54 Se terminó

Después de la discusión, Charlie dejó partir a Vir. La dejó ir envuelta en lágrimas. Vir llegó a la orilla del mar y vió a los chicos divertirse, se sentó y lloró hasta que se sintió vacía. Cuando se recompuso, mientras maldecía sus hormonas, su suerte y sus decisiones, le envió un mensaje a Roma

- "Linda me siento mal, ¿ es posible que vengas ahora?

Recibió como respuesta:

- "¡¡No mama!! Quiero quedarme ¿¿ puedo?? Te prometo subir a la habitación en una hora"

- "Ok hija te espero despierta" le respondió, sin ánimo de discutir con la joven, sabiendo que era una batalla perdida.

Roma llegó puntual y encontró a su mamá todavía despierta, le contó muy feliz todo lo que había hecho.

Al día siguiente salieron a comer y prepararon todo para el regreso a la Argentina. Pasaron sus últimos momentos cerca de la playa del hotel. Se sentaron en la arena, Vir no quiso mencionarle a su hija que había discutido con Charlie. Las dos se tomaron fotos a la orilla del mar, abrazadas. Vir amaba a esa niña más que a sí misma. El viaje le había sentado de maravillas, a pesar de la tristeza de la separación.

Abordaron su vuelo de regreso contentas y llenas de regalos para sus seres queridos. Roma se pasó el viaje, una vez autorizado el uso de dispositivos, hablando con sus amigas e intercambiando fotos. Vir poco quería hablar, escuchó música mientras leía. En algún momento tuvo la mala idea de postear algo en las redes, una foto del atardecer frente al mar, junto a una frase de una canción que adoraba:

"Si pudiéramos haber partido en dos
Esta soledad y el peso del dolor
Y si fuimos tú y yo

Todo por igual, debería estar
Compartido el ardor de este frío
¿Cómo tanto amor pudo hacernos tanto mal?"

Alguno de sus contactos cercanos, tomó una captura del posteo, que luego fue republicada por todos los medios de espectáculos, cosa que le enseñó a Virginia a ser más cuidadosa con sus redes, sus contactos y sus posteos ya que le agregaba una exposición que no deseaba ni buscaba.

Cuando finalmente llegaron a la Argentina, Vir estaba exhausta. Durmió un día entero. Mel recordaba lo mucho que había sufrió cuando partió Gabriel y se preocupó, pero a la mañana siguiente la vio aparecer para ir a trabajar, se la veía tranquila. No sabía cómo mencionarle que la discusión de ella con Charlie estaba publicada en todos los portales de chismes del mundo y en los diarios locales también.

- Mi cielo tenemos que charlar

- Ay mamá no quiero hablar de Charlie en serio, no hay mucho que decir discutimos y él se fue o me fui es lo mismo

- Ya lo sé

- ¿Cómo lo sabes?

- Como lo saben todos

- ay carajo ¿ y cómo es eso?, odio cuando te haces la misteriosa

- Alguien los filmó y bueno, lo filtró a la prensa, sé que Charlie trató de que no lo publicaran, pero no pudo conseguirlo, igual que un posteo que hiciste en el avión

- ¡¡Genial! Ahora soy la despechada o desbordada da igual

- No hija, al contrario, en las redes es tendencia" cenicienta viuda", cuando te enojas sos divertida, se te da muy bien

- , mi vida es un chiste, así es que ¿por qué no?? me alegra divertirte

- ¿Estás bien?

- Claramente no, pero calculo que también pasará

Dos semanas después Vir estaba entrando al 4 mes de embarazo y se descompuso durante una consulta en la veterinaria. El cuerpo le pasaba factura de tanto estrés acumulado. No dijo mucho, pero llamo a su médico y lo fue a ver en ese mismo momento.

Le hicieron análisis de sangre y una ecografía, luego el Dr. la atendió.

- Vir, si no descansas te voy a ingresar unos días en el hospital

Vir comenzó a llorar

- Cariño hay que cuidar la pancita, sé que han sido días muy duros, pero todo va a pasar, necesitas descansar y dejar que te cuiden

- ¿Quién Dr.? ¿Mi mama? ¿Mi hija? No puedo hacer eso, puedo quedarme en casa unos días, pero no prometo más que eso

- El bebé te necesita

- Lo sé, pero trabajar, estar ocupada, me mantiene tranquila

- Primero vamos a colocarte una inyección para detener las contracciones, has tenido pérdida de sangre así es que en unos días vamos a vernos de nuevo, no podés conducir y tenés que bajar el nivel de exigencia ¿ok?

- Ok

- Cuando llegó a su casa se fue directo a la cama. Roma había ido a la casa de Germán y se quedaría ahí hasta el día siguiente puesto que lo había extrañado mucho. Mel llegó a verla, se preocupó al encontrarla en cama.

- ¿Qué ocurrió hija?

- Tuve una pérdida mamá

- ¿Por qué no me llamaste?

- No quise molestar, no pensé que fuera grave, hasta que bueno... ahora tengo que hacer reposo dos o 3 días y luego control

- Ay cariño ¿querés que duerma acá?

- No mamá la verdad, prefiero estar sola, quiero descansar. Ya pusiste una vez tu vida en espera cuando estaba embarazada de Roma, no quiero que lo vuelvas a hacer. Tenés que entender que no soy una niña, soy un adulto, estoy bien. ¿es difícil? Si, pero no estoy deprimida, estoy bien mamá. No hay comparación con lo que viví durante el embarazo de Roma.

- Entiendo, me llamas cualquier cosa

- Si, lo prometo, te quiero

Vir se acostó luego de una ducha, se puso un cómodo pijama y encendió el tele del cuarto. No deseaba comer, no solo no tenía apetito, sino que no tenía ganas de bajar a buscar comida. Solo deseaba dormir, había sido un día largo, a pesar de que era temprano, quería descansar. Le hizo una llamada a Roma, le dijo cuanto la quería y trató de dormirse pero un mensaje la despertó-

- Vir sé que me odias, pero no me voy a ir de Argentina, no te voy a abandonar ni a nuestro bebé

- Genial, respondió

- Sé también que no querés verme, pero me dijo Mel que el bebé tuvo problemas hoy

Maldita mujer que no podía mantener la boca cerrada, pensó Vir molesta, mientras respondió: