La esposa del magnate

Capítulo 4

Leonardo: nuestra hija tiene razón. Necesitamos terminar con esta conversación, ya que debemos de comer como siempre en familia.

Gema: antes de hacerlo necesito decirles nuevamente que siento que debo de agradecerles por ser tan buenos y sobre todo comprensivos conmigo.

Ellos empiezan a comer cuando termina de hablar y al ver las sirvientas esto empiezan a servirles de comer y se retiran cuando terminan de hacerlo. Solamente que sus padres se sentían tranquilos al no ver a su hija triste, ellos tiempo después terminan y cuando lo hacen se levantan de sus asientos para continuar con su día.

En la casa de la familia Hendersen

Sebastián: jamás pensé que esto realmente pasaría y que tampoco aceptaras de una manera tan fácil la cancelación de tu compromiso.

Damien: sabes perfectamente la razón por la cual acepté este compromiso. Ahora que la mujer que amo es libre me casare con ella sin que nadie me lo impida.

Sebastián: terminarás haciendo lo que quieras igual que siempre, hijo. Pero no quiero que después de unos días te arrepientas por no haberte casado con tu ex prometida.

Damien: no pienso arrepentirme nunca. Porque sé perfectamente lo que estoy haciendo y únicamente estoy esperando que sea la fiesta del aniversario de la empresa de su familia para poder hablar con Gema.

Sebastián: será mejor que no vayas y tu ex suegro me dijo que su hija estará de nuevo comprometida. Eso significa que serás completamente libre de comprometerte con su sobrina.

Damien: algunas personas no entienden que ella no puede comprometerse con nadie. Parece que se les olvida que eso no va a pasar nunca.

Sebastián: te recuerdo que ella ya no es tu prometida. Deberías de pensar únicamente en la otra a la que siempre quisiste, pero con tu actitud estás demostrando todo lo contrario.

Damien: siempre me ha molestado que otros hombres se crean con el derecho de quitarme lo que me pertenece. Gema seguirá siendo mía.

Sebastián: jamás te voy a entender. Seguramente por su prima sentías capricho y por ella todavía no lo sé, ya que tú tampoco lo sabes y su padre no va a permitir que hables con su hija.

Damien: solo estoy esperando a que se llegue ese día para verla. Porque necesito hablar con Gema y esa ocasión sería perfecta para hacerlo.

Sebastián: por esa razón debiste pensarlo antes y estoy seguro de que te molestaras si llega con otro hombre a la fiesta. Precisamente en este momento estoy imaginando tu reacción.

Damien: por supuesto que me molestaría. Porque se supone que ella es mía y mi reacción sería demasiado lógica, aunque eso estaría mal.

Sebastián: tú mismo te estás contradiciendo. Presiento que no tomaste la decisión correcta y sé que no te gustaría perderla por no saber lo que realmente sientes por ella.

Él mira a su hijo y sabía que tenía razón, ya que él no sabía lo que realmente quería y por su indecisión iba a perder a la mujer que realmente amaba. Ellos siguieron su conversación y de esa manera pasaron los días hasta que al fin llegó el día de la fiesta del aniversario de la empresa de la familia de su ex prometida.




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