La esposa imperfecta del magnate

capítulo 16

Helena: no puedes venir a decirme todo esto. No quiero que vuelvas aparecer de nuevo en mi vida, así que no necesito escucharte.

Damián: lo harás aunque no quieras. Porque lo que es mio siempre lo será y no pienso permitir que nadie interfiera entre tu y yo.

Helena: tiene razón mi hermano al decir que estás mal y acaso olvidaste lo que hiciste. Sabes que no tengo ninguna necesidad de seguir escuchándote.

Damián: se que cometí un error y por esa razón estoy aquí. Necesito decirte que me voy a casar contigo y quiero que estes a mi lado a partir de esta noche.

Ella lo mira sin entender y cada palabra que decía no tenía ningún sentido. Helena como no quería seguir escuchándolo empieza a caminar y Damián la detiene, pero su hermano sabía que tenía que hacer algo y le da un golpe en su cara.

Leonardo: te dije que dejaras en paz a mi hermana. Esto no puede continuar y no vamos a cambiar nuestros planes por tu culpa.

Damián: lo único que quiero es que esté a mi lado, cuñado. Deberías entenderlo y como no quiero seguir hablando me la llevaré conmigo.

Leonardo: piensas que voy a permitir que eso pase. Pero intentalo tan siquiera y veras lo que pasara, así que olvídate de tus planes.

Damián: dejame decirte que mis planes se realizarán. Porque no pienso irme sin mi mujer y no me importará si te molestas más conmigo, pero no olvidaré el golpe que me diste.

Leonardo: es demasiado tarde para que intentes hacer algo con mi hermana. Ella está feliz y no permitiré que se arruine por el solo hecho de que te arrepentiste.

Damián: me arrepentí desde el primer momento que me di cuenta de que la iba a perder. Solamente que de esa manera pude reaccionar.

Helena: será mejor que regresemos a casa, hermano. Además, no quiero seguir más en este lugar y tú Damián que esta sea la última vez que te acercas a mi.

Damián: antes la que hacías eso eras tu. Ahora las cosas cambiaron y no pensé que me dirias lo mismo que yo siempre te decía.

Helena: es demasiado tarde. Porque nunca me casaría contigo y te recuerdo que existen muchas mujeres que aceptarian casarse contigo.

Damián: te estoy dando la oportunidad de que te vengas conmigo por voluntad propia. Pero se que eso no va a pasar, así que lo tendré que hacer a mi manera.

Helena: eres un hombre que nunca ha provocado ningún escándalo y no creo que lo hagas por mi. Pero te daré una oportunidad de escucharte y después de esto no quiero volver a verte.

Damián: entonces hablaremos. Además, tu hermano puede escuchar todo lo que tengo que decirte y sobre todo será ahora mismo.

Helena: tengo el presentimiento que esto nunca se terminará. Aunque no pierdo absolutamente nada con escucharte y deberías de empezar hacerlo.

Ella no se sentía nada tranquila, ya que las expresiones de Damián no eran normales. Ellos solo habían venido con tres guardaespaldas y si quería llevarsela lo haría sin importarle nada.




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