Mariana: su madre se molestaría si la llegara a escuchar hablando de esa manera. Además, toda su familia también lo haría y debe de evitar hacerlo.
Helena: entonces necesitaré evitarlo. Esto lo haré porque mi familia me quiere y me acepta como soy, pero también le doy gracias al destino por tenerla.
Mariana: creció al lado de las personas que realmente la quieren. Será mejor que empiece a arreglarse, ya que el tiempo sigue su curso y mientras menos se imagina su prometido llegará a su casa.
Helena: es capaz de llegar antes de tiempo. No quiero que me esté esperando si todavía no termino de hacerlo, ahora solo me cambiare y quiero que me hagas un peinado.
Mariana: está bien, señorita. Esperaré a que lo haga para hacerlo y sus padres deben de estar hablando en este momento de su futuro matrimonio.
Ella escoge el vestido que se iba a poner y cuando lo tiene entre sus manos se dirige al baño. Helena se empieza a cambiar y a los pocos minutos termina de hacerlo para después salir, Mariana se acerca a ella cuando se sienta y cuando lo hace la empieza a peinar, pero en la sala estaban sus padres conversando.
Regina: en verdad crees que él se va a casar con nuestra hija. No creo que eso sea posible por su cambio de comportamiento, porque estoy segura que después de unos días dirá que no se quiere casar con Helena.
Maximiliano: sabes que ella está enamorada. Presiento que si nos negamos a su boda él haría todo lo posible para que fuera su esposa y la única manera de que salga de nuestra casa es vestida de novia.
Regina: siempre tuve miedo de que se equivocara. Ella ha sufrido mucho por su apariencia física y me duele verla sufrir, pero lo único que puedo hacer por ella es darle afecto.
Maximiliano: la he protegido demasiado bien. Pero no puede evitar escuchar los comentarios que hacen sobre su apariencia y toda la sociedad sabe lo que les pasa aquellos que se atrevieron hacerlo.
Regina: se que debemos dejar que viva su vida. Aunque se llegue a equivocar y nosotros siempre estaremos aquí para ella al ser sus padres.
Maximiliano: nuestra hija es completamente diferente. Además, he escuchado rumores que dicen que no es nuestra y sabemos que eso no es verdad.
Regina: seguramente lo dicen porque no se parece a nosotros. Solamente que ellos están equivocados y sobre todo recuerdo que tu la viste nacer.
Maximiliano: ellos podrán seguir inventando rumores. Pero de algo que estoy seguro es que la niña es nuestra y las personas que nacen en la familia Mcgregor nacemos con una marca de nacimiento y ella la tiene igual que Leonardo.
Regina: esa marca significa mucho en tu familia. Recuerdo que al principio tus padres no la aceptaban por ser diferente y de poco a poco lo fueron haciendo y recuerdo también que le dijiste a ellos que si lo seguian haciendo se olvidaran que tuvieron un hijo, ya que no ibas a permitir que nadie la despreciara o la rechazaran por su apariencia.
Maximiliano: lo que más me interesaba era que nuestra familia fuera feliz y no me interesaba nada más que no fueran ustedes.
Regina: jamás la rechazaste y si las cosas hubieran sido diferentes yo me hubiera ido con mi hija. Además, fuéramos felices en el lugar que estuviéramos.
Maximiliano: dejarme decirte que nunca hubiera permitido que te fueras. Porque tenía todo el derecho de ver crecer a nuestra hija, pero no deberías de decirme eso.
Regina: menos mal que eso nunca pasó y que somos una familia normal. Aunque tengo que convivir con un esposo que es celoso y que me cuida con demasiada dedicación.