Nos llevaron fuera de la mansión y nos subieron a la misma camioneta en que había salido antes con él, no tengo ni la menor idea de cuál es su nombre, solo sé que han mencionado su apellido, un extraño apellido por cierto, en fin es los asientos de la camioneta están nuestros bolsos de la universidad, cómo antes los guardias uno y dos se sientan frente a nosotras.
Durante el camino la pasamos en un muy tenso silencio, Melissa y yo no nos soltamos la mano en ningún momento y no puedo negar que mi mano tiembla de lo nerviosa que me siento, y de repente la camioneta se detiene, el guardia dos baja y se queda de pie al lado de la puerta, cuando miro me dio cuenta de que estamos frente a mi edificio. Melissa y yo bajamos de la camioneta, cuando estamos abajo el guardia dos entra de nuevo y se van.
Ambas caminamos apresuradas dentro del edificio, cómo si consideramos la posibilidad de que ellos regresen y nos lleven de nuevo con ellos, incluso no nos importa subir los cuatro pisos por las escaleras hasta mi departamento.
─Esto es muy grave, muy grave, incluso saben donde vives Elissa ─ dice Melissa alterada y yo estoy igual, en ningún momento les dije mi dirección ─ necesito helado ─ dijo caminando hasta mi heladera.
Por mi parte caminó hasta donde tengo colgadas varias fotos familiares y tomo la que mi madre nos hizo tomar a Alissa y ami con nuestros suéteres de navidad, cada suéter tiene el nombre de la otra, es una linda foto, la tiró al piso rompiendo el marco y empiezo a pisar la cara de mi hermana en la foto una y otra vez llena de ira y rencor.
¿Cómo fue capaz de hacerme esto?
¿Tan poco le importo?
No tuvo ningún reparo en dejarme en las manos de ese tipo, importarle poco lo que él iba a hacer, cómo siempre a ella solo le importa ella misma y nadie más.
─Oye, Oye ─ me sujeta Melissa de los hombros, alejándome de los vidrios rotos ─ ya, ya, ya, tranquila, debemos pensar lo que haremos, come helado, te hará sentir mejor ─ me dice sentándome en mi sofá y me pasa mi bote de tres litros de napolitano.
─Se que no nos llevábamos bien, pero no pensé que me odiara hasta este punto─ le dijo sin poder contener mis lágrimas. Melissa me abraza dejando que me desahogue en su pecho mientras me ahogo en helado también y ella come conmigo hasta que la oscuridad nos cubre ─ Melissa, ¿no deberías estar trabajando? ─ le preguntó.
─¡Mierda! ─ se queja ─ ya es muy tarde de todos modos ─ dice y sigue comiendo helado conmigo, ya vamos más de la mitad del cubo ─ ¿pedimos comida a domicilio? ─ pregunta y yo asiento.
Melissa se encarga de pedir la comida por el teléfono de mi departamento, mientras que yo llevo el cubo a la heladera de nuevo, lo vamos a terminar después de la cena y también busco una escoba para limpiar el desastre que hice.
─Lo siento, tengo que preguntar, ¿No tienes alguna idea de dónde está? ─ me pregunta cuando estamos comiendo de nuestra comida china.
─No sé y ahora estoy muy afectada para pensar de forma coherente y saber dónde está ─ contestó.
─Pero aunque la encuentre no creo que eso resuelva nada, él lo dijo, ya no le interesa tu hermana, te quiere a ti ─ me dice.
─ A él le interesó porque sigo siendo virgen, nada más ─ le digo a mi amiga.
─¿Cómo es que sigues siendo virgen?, ¿no me dijiste que tuviste un novio en tu último año de instituto? ─ me pregunta confundida.
─Si, si lo tuve, pero él terminó acostándose con Alissa, no conmigo, según él pensó que de verdad que era yo, pero la verdad no le creí, si ambas somos diferentes ahora, en la escuela lo éramos mucho más, si de verdad él me hubiera querido o conocido de verdad no se hubiera acostado con ella y mucho menos darme la excusa después de que nos confundió porque somos gemelas ─ digo con rencor
A lo largo de nuestra vida y nuestra adolescencia fue lo mismo, sus amigos siempre me confundían con ella, los chicos me confundían con ella, porque a ella nunca le importo decir que tenía una gemela, una chica que era idéntica a ella, pero un carácter de perros, así que cuando golpeaba a uno de sus tantos *amigos* me tocaban el trasero o una teta cuando supuestamente me saludaban y yo les partía la cara yo era la mano por no ser muy sociable.
También, cómo pasó hoy con él, ellos pensaban que era igual de libertina y fácil que mi hermana, según ellos, ella era la divertida, la simpática y yo la aburrida, que lo más seguro es que moriría sola, así también muchos chicos intentaron salir conmigo o me hablaban porque pensaban que era mi hermana.
Al final el chico que fue mi novio, si me gustaba, me gustaba mucho, Alissa cuál perra me decía que él era demasiado para mí, que yo nunca cumpliría sus expectativas porque está muy sosa, yo no le hacía caso, pensé que lo decía solo para molestarme, pero en realidad si lo decía con ciertos fundamentos. Un día estaba con él haciendo tarea en su casa y ya no me acuerdo cómo, pero nos terminamos besándonos y las cosas se estaban calentando demasiado rápido, yo aún no me sentía preparada para dar ese paso.
Entonces él me dijo que no entendía por qué me negaba en ese momento, ya que ni siquiera iba a hacer nuestra primera vez, que ya lo habíamos hecho antes, varias veces, mi cara fue de completo horror en ese momento, yo estaba completamente segura de que no lo habías hecho, no tenía la menor idea de lo que estaba hablando.
Él me dijo que si, que si habíamos estado juntos, antes, la primera vez fue en una fiesta de cumpleaños de un amigo, recordando ese tiempo, recordé que habíamos peleado justo por eso y según él yo llegué y me lo lleve a un lado de la fiesta donde lo hicimos. Yo no fui a esa fiesta, me quedé en casa llorando justo por él y nuestra pelea, incluso pensé en ir a la fiesta para que habláramos y lo resolviéramos.
No fui porque le hice caso a Alissa de que no lo hiciera, de que él debía de entenderme y esperarme hasta que estuviera lista, que él si de verdad me quería me esperaría el tiempo que fuera . Todo fue un plan de ella para acostarse con él. No le dirigí la palabra por casi tres meses, la ignoraba por completo, ella no existía para mí en lo absoluto, ella claro se hizo la víctima de todo, mi madre estaba muy molesta conmigo por mi actitud hacia mi hermana.
#1976 en Novela romántica
#533 en Novela contemporánea
virgen y millonario, virginidad amor pasion deseo, gemelas amor peleas familia
Editado: 02.10.2022