La Lluvia no Atraviesa el Concreto

XIII. EL ABISMO QUE NO VEMOS.

El abismo siempre lo ubican en el exterior, la oscuridad la esconden en los rincones más lejanos. en las prisiones, en los barrios olvidados, en las almas que se pierden en la desesperación. Pero el abismo no está ahí. El abismo no está fuera de nosotros. El abismo es ese vacío que llevamos dentro, esa grieta que nunca dejamos de intentar llenar con las mentiras que nos dicen, con las promesas que nunca se cumplen. El verdadero abismo no está en las calles que caminamos, ni en las celdas que los demás ocupan. El verdadero abismo está en nuestra cabeza, en la forma en que nos dejamos arrastrar por las olas de lo que nos han enseñado, por la corriente que nos arrastra hacia la aceptación, hacia el conformismo. Nos dicen que no miremos hacia abajo, que no miremos lo que realmente estamos pisando, pero la verdad es que el suelo está hecho de mentiras y las mentiras son lo único que sostiene nuestro paso. Nos dicen que debemos mirar hacia adelante, que el futuro está lleno de oportunidades. Pero, ¿qué futuro es ese? ¿El futuro de una sociedad que cree que el progreso está en hacer más, en tener más, en someter más? El futuro que nos venden es el futuro de la opresión, del olvido, de la ignorancia. Y mientras miramos hacia adelante, el abismo se hace más grande, porque lo único que tenemos detrás es un pasado que no hemos aprendido a olvidar. No hay horizonte, no hay meta, no hay salida. Sólo hay una caída infinita hacia un vacío que nunca quisimos reconocer. Y mientras seguimos mirando hacia adelante, seguimos ignorando el abismo que siempre estuvo a nuestros pies



#362 en Joven Adulto

En el texto hay: cerdopoesia

Editado: 16.09.2025

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.