Los sueños descansan, quizás la vida me está demostrando que aquella mentira es imposible de remediar y que debo aceptarla como tal.
Aunque el destino me haya traído una gran amiga y que ella sea su prima, sé que no puedo compartir mi desilusión con nadie. No quiero cometer ningún error más en mi vida.
Cada cuál seguirá por su camino como lo ha sido desde hace tantos años. Ahora con la verdad por mi parte, pero él seguirá con la mentira que le dije.
Sólo el destino sabe si alguna vez él conocerá la verdad o no. Eso se lo dejo librado a la vida. Yo cometí un error y lo asumo, pero no voy a destruir su felicidad. Al contrario, le deseo todo lo mejor con su familia porque realmente se lo merece.
Siempre debemos escuchar, analizar y pensar muy bien antes de actuar porque una acción nuestra puede marcar nuestro destino para siempre.