Y esa mentira aún no tiene solución . El error cometido no ha sido revertido. No sé si alguna vez tendré la oportunidad de reparar el error cometido y pedirle disculpas.
Me quedo con los recuerdos de los días vividos de aquella bella historia de amor, con las aventuras realizadas y con la verdadera relación de amor. Me quedo con el aprendizaje de que no siempre los amigos son lo que parecen, que debemos escuchar a las dos campanas y darnos un margen de dudas para averiguar la verdad.
Ojalá este libro sirva de ejemplo para muchas personas y no cometan mi error de no escuchar a la persona que tenía a mi lado. Ojalá no pasen esta situación de vivir sin el amor de su vida, quizás por el resto de sus días.
Vivan, disfruten de la vida pero por sobre todo, escuchen a todas las personas. No se queden con una única versión, sólo así podrán llegar a la verdad.