Capítulo 17. Antón

En los ojos de Ani brilló una chispa de calidez. Es tan inesperado. Con eso, se vuelve aún más hermosa. Dicen que los ojos son el espejo del alma. Recuerdo esta vieja frase mientras miro a mi prometida ficticia. Entre todas las personas que conozco, solo ella es tan sincera, pura, irradia luz.

De nuevo me siento un poco incómodo con ella por haberla involucrado en esta historia. Tania es una arpía cruel. Podría atacar a Anna en lugar de a mí, porque, después de todo, Anna es su rival. Y quiero proteger a la chica de cualquier posible problema. En principio, estos pensamientos me sorprenden. ¿Me estoy volviendo un blandengue? ¿Débil, suave, sin carácter? No, qué va. Ani me está afectando negativamente. El Antón habitual no pensaría en los sentimientos de una chica que, en esencia, es una empleada contratada, ella sabía en qué se metía. Pero ya no soy el Antón habitual. Estoy un poco loco. Y también porque sé que esta noche Ani dormirá en la habitación de al lado y estos pensamientos... estos pensamientos hacen que mi sangre hierva. Maldición, no quiero perder un millón, pero eso no significa que no pueda intentar seducirla. El contrato habla de violencia. Y no la forzaría de ninguna manera. ¿Soy algún tipo de bárbaro? No necesito a una chica que no quiere, cuando siempre hay muchas dispuestas a todo por esto. Otra cosa es hacer que ella venga a mí por su propia voluntad. Sí, eso es en lo que me concentraré esta noche.

Pero ahora estamos en el trabajo. Y debería pensar un poco en los negocios, porque en este torbellino de mujeres en mi vida, perderé completamente la cordura.

— Antón, la reunión es en dos minutos. No nos hagas esperar — dice Ksiusha, asomándose a mi oficina y saliendo inmediatamente. ¡Cierto, la reunión! Me doy una palmada en la cabeza. Increíble, realmente la olvidé. Menos mal que mi hermana está al tanto de todo. Es genial.

Tomo el teléfono y me dirijo a la sala donde ya se están reuniendo los colegas. Ani está entre ellos, ya que es una reunión del departamento creativo. Mientras Ksenia comienza, observo a mi prometida. Ella, por el contrario, intenta no mirarme. Se comporta de manera muy profesional. Bien hecho.

— Amigos, tenemos un proyecto grandioso en puerta. La esposa de un político muy conocido para todos nosotros ha comprado una nueva casa de campo, una enorme mansión con doce dormitorios, sauna, salones, comedores, terrazas y todo en ese estilo. El proyecto de construcción está sobre la mesa frente a ustedes. Nuestra agencia y algunas otras competirán por la oportunidad de realizar un diseño moderno y elegante para esta casa — explica Ksenia con entusiasmo y energía. Los diseñadores se animan. Aparecen sonrisas interesadas, los ojos brillan. Por supuesto, un buen proyecto significa un buen sueldo.

— Como entenderán, esta señora debe elegirnos. Para nosotros, esto es un gran salto adelante, es nuestra imagen, nuestro estatus, nuestro dinero y sus bonos — añado para motivarlos completamente.

— Por eso hemos decidido organizar una competencia entre ustedes para inspirarlos al máximo con nuevas y maravillosas ideas — continúa mi hermana.

— ¿Una competencia? — se sorprende Kostia, uno de nuestros mejores diseñadores.

— Exactamente. Quien gane el concurso recibirá una alta bonificación y dos semanas de vacaciones pagadas por nosotros. Y eso no es todo...

— También será ascendido a subdirector del departamento, básicamente se convertirá en la "mano derecha" de nuestra Ksenia Mikhailovna — agrego. Mi hermana lleva mucho tiempo necesitando un asistente, así que decidimos que es hora de que encuentre uno.

— Las condiciones de trabajo, creo, las entienden. Un salario más alto que el de un diseñador, paquete social completo, todo incluido — sonríe la chica. — Todos los deseos de la clienta que ha expresado también están frente a ustedes. Tienen una semana. Lamentablemente, no podemos ofrecerles más tiempo para pensar. La próxima semana, el viernes, debemos encontrarnos con la clienta y presentarle nuestro proyecto. Además, no olviden el trabajo en el que están actualmente. Esto no significa que detengamos los proyectos en curso. En absoluto. Así que todos a trabajar.

La gente se apresura a salir con un murmullo animado. Este concurso revelará las verdaderas caras de nuestros empleados. Ksenia está convencida de que una sana competencia nunca hace daño, pero yo estoy seguro de que la batalla será feroz y no habrá víctimas. Algunas personas son capaces de cualquier cosa para alcanzar su objetivo.

Hasta la noche, en todos los rincones de la oficina solo se hablaba de esta competencia. Pero algo de lo que escuché me impactó negativamente.

— Ni siquiera lo intenten. Ya está claro quién va a ganar — dice Olya, una chica alta y rubia, que según Ksiusha es bastante talentosa, pero con un carácter difícil.

— ¿Quién? — pregunta Kostia, aunque incluso a mí su insinuación me resultó clara.

— Está claro que Ani. ¿Aún preguntas?

— Sí, ella es la protegida de Ksenia... Básicamente, la contrataron sin mucha experiencia y de inmediato le dieron proyectos — coincide Alex.

— Porque se acuesta con el jefe. Son tan ingenuos, no puedo creerlo — Olya sonríe con superioridad y toma un sorbo de su café.

— Parece que tienen demasiado tiempo libre para chismes. Hay que corregir eso — gruño y me dirijo a mi oficina. Hay cosas con las que es muy difícil luchar. Y con algunas personas también.