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            -¿Qué haces aquí?- La voz de la chica salió entre cortada

            -Solo viene a verte un viejo amigo ¿Qué pasa?- El chico se acercó y ella se dejó caer en sus brazos. Era un joven alto, delgado y pálido, cabello negro y rizado. Sus prominentes ojos oscuros parecían absorber tu alma, tenía unas alas gigantes negras con las que rodeaba a la chica.

            -Mi madre, ya- decía entre sollozos –Ya no podrá amar a nadie más, ya no los tiene a ellos- decía apuntando hacia las cabezas –Y yo ya no quiero nada mas, ya no quiero nada de este mundo- El sonrió

            -¿Recuerdas mi propuesta Princesa?- Ella negó con la cabeza- Hace unos 10 años, cuando apenas eras una pequeña chica me di cuenta que no pertenecías a este mundo y me enamoré de ti. Eres mis ojos Rosy. Mi princesa de la oscuridad. Te sacaré de aquí, esa es mi propuesta, alejarte de todo esto, abandonarlo darte algo mejor- Ella lo miró a los ojos sorprendida

            -¿Aun después de esto que eh hecho?- El sonrió

            -Me has facilitado mi trabajo. Si aun a pesar de esto- Dudosa preguntó

            -¿A cambio de qué?- Él la miró a los ojos

            -De amor- Acarició su rubia y mojada cabellera –Te irás conmigo de este mundo serás mi esposa y mi Reina. La esposa del ángel de la muerte. La princesa de la oscuridad ¿Te parece?- Ella lo apretó fuerte