Boda.
Dasha.
—Si ya estoy lista para convertirme en la señora Valmiera, ¿no se me corrió el maquillaje verdad? —.
—No señora luce esplendida como salió de casa—. Sonrió.
Jorge conduce, al llegar bajo con su ayuda, hacemos el recorrido hasta llegar al jardín dónde Clari camina de un lado a otro, en cuanto nos ve corre hacia nosotros. — ¡Qué bueno que llegas Josiah ya iba salir a buscarte! —. Sonrió y niego. —Ese tonto esta que se trepa las paredes—.
—Quien como tu Clari eres única—.
—Lo sé, debes estar feliz de tener una cuñada como yo—.
—Y estoy agradecida, anuncia que ya llegue—.
—¿Segura? no quieres fugarte, seria divertido ver a Josiah nuevamente colgando de una pendiente—.
—No Clari, creo que tu hermano aprendió su lección, no te voy a negar que adoro su lado infantil lo hace ver tierno y único a la vez, solo quería que tomara una decisión y que estuviera seguro de lo que iba hacer, y sobre todo quería ver si podía contar con él y me ha demostrado que podré contar con él —.
—Eres su complemento Dasha de eso no hay duda, tu eres la centrada y él el despistado—.
—Creo que si—.
—Bueno como veo que estas segura de dar ese paso adelante… y te ves hermosa Dasha es decir cuñada—.
—Gracias tu también estas hermosa—. Clari me da una sonrisa y se marcho. —Estoy nerviosa—. Miro a Jorge que permanece a mi lado.
—Aquí estoy señora, estoy seguro que el señor está nervioso igual que usted, pero en cuanto se vean ese nerviosismo desaparecerá—.
—Sí yo también lo creo—. Eliana salió haciéndonos una señal de que ya podíamos avanzar.
Camino por la alfombra de pétalos blancos y rosados, al final veo a Josiah de espalda, se gira lentamente hacia mi y sonríe al verme, le devuelvo la sonrisa y mi corazón y mi panza se emocionan al verlo se ve tan guapo y sexy.
《Calma tus hormonas Dasha luego lo tendrás para ti solita, es decir para los tres》
Josiah.
Después de aclarar todo con Dasha todo fue más llevadero, y claro que me quiero casar con esa mujer es el amor de mi vida, la única que ocupa todo mi corazón.
Ya no pienso prestarle atención al que dicen me da igual, como dijo mi señora siempre hablaran no importa donde estemos que posición tengamos van hablar y que importa que digan lo que quieran si la única opinión que quiero escuchar es la de mi familia y mi mujer ya demás que hablen lo que deseen.
Solo quiero dar el siguiente paso convertirme en el esposo de Dasha, ser padre espero ser un buen padre para mis hijos los que vienen y los que vendrán, espero y Dasha quiera darme más hijos.
Y al fin se llegó el día más esperado por los dos donde al fin Dasha será mi mujer legalmente. Estoy tan nervioso, jamás pensé sentirme así por algo, claro que es por la boda falta solo horas y estoy que quiero explotar de alegría y algo que no se como describir.
Las horas pasaban y con ello mis nervios aumentaban. —Estas listo para echarte la soga al cuello, aún estas a tiempo de parar esto—. Sonrió.
—Si quisiera retractarme le hubiera dicho a Dasha que no me quería casar—.
—Bueno era mi último intento ya que serás un hombre casado, pero sabes creo que debiste dejarme hacerte la despedida de soltero—.
—Si y te dije que no quería nada, así como Dasha no hizo nada—.
—Tal vez por que no tiene amigas—.
—Si tiene a Lucy, Sandra, Eliana.. aún así no creo que ella hubiera querido salir—.
—Bueno no te prohibió nada, no te dijo que no estuvieras una despedida de soltero o si—.
—No Dasha no es controladora por quien la tomas—.
—Solo pensé, la despedida era ayer ya no hay por que llorar ahora debes prepararte para ya no ver otras mujeres y tienes que cambiar pañales—.
—Lo se, se que no es uno pero deseo experimentar cuanto antes—.
—Estas listo hijo—. Me arreglo el moño y me observó en el espejo.
—Si papá ya estoy listo—. Papá me mira y sus ojos se cristalizan.
—Me siento feliz por este gran paso que darás, no todo será color rosa pero si hay amor podrán superar todo y te lo digo yo que he pasado mucho con tu madre—.
—Lo se papá—. Le sonrió, salimos los tres camino al altar, me paro frente a todos a esperar al amor de mi vida y la mujer con la que quiero compartir mis días.
Observó el lugar, no se parece en nada a la anterior boda de Dasha, vi el video, todo es diferente la decoración, las flores son de diferentes especies, ya que en su primera boda solo eran rosas blancas y ella parecía una princesa, me preguntó como se vera….
La espero y nada que llega ya me estoy impacientando miro a mi madre ella me sonríe con ternura.
Los minutos transcurren y Dasha aun no llega, ya lleva de atraso media hora y mi corazón se acelera al tener miles de pensamientos.
—Sera que Dasha ya no se quiere casar conmigo—. Digo mirando a Elías y a mi padre.
—¿Como crees hijo? —. Dice mi padre poniéndome una mano en el hombro. —Las novias siempre llegan tarde eso es verídico —. Suspiro.
Tal vez se arrepintió de formar una vida conmigo, eso me pasa por ser tan infantil. Me giro para salir a buscarla, tal vez le pasó algo y si entro en labor, bueno aún no es tiempo faltan dos meses y medio aún.
Mamá me intercepta antes de dar un paso mas. —¿Qué pasa mamá? —.
—¿A dónde vas?
—Voy a buscar a Dasha tal vez le paso algo y si….