La traducción del amor

Capitulo 9 parte 2

Capítulo 9 – Notas al pie del destino

El sonido del teclado se volvió mi nueva forma de respirar.
Las palabras caían una detrás de otra, ordenadas, precisas, como si por fin hubieran encontrado su lugar en el mundo… o dentro de mí.
Era la versión final de la traducción. El último archivo. La última página.
Y, aunque parecía una simple entrega de trabajo, sabía que era algo más. Un cierre. Un suspiro. Una especie de reconciliación entre lo que fui y lo que ahora soy.

Apoyé los codos sobre la mesa y me quedé mirando el documento abierto. La pantalla reflejaba mi rostro cansado, pero también una luz distinta, una serenidad que no recordaba haber sentido desde hacía mucho.

Terminé de revisar el texto. Cada frase era una historia, cada párrafo un recuerdo.
Las palabras de Lorenzo habían dejado de dolerme; ahora solo me parecían humanas, vulnerables.
Y eso, de alguna forma, las hacía más bellas.

Hice clic en Guardar.
El sonido del archivo cerrándose fue casi un latido.
Después, respiré hondo, y por primera vez en meses, no sentí que algo se me escapaba entre los dedos.

Un mensaje apareció en mi bandeja de entrada.
Era de él.
Asunto: Versione finale.

Tomé un sorbo del café que se había enfriado hace rato antes de abrirlo.
Dentro, solo había una línea:

“Gracias por darme voz en otro idioma.
Por demostrarme que algunas historias suenan igual, aunque cambien las palabras.”

Sonreí. No con nostalgia, sino con gratitud.
Le respondí simplemente: “Historias como la nuestra.”
Y eso bastó.

Pasaron los días. La editorial anunció la publicación de la traducción con una pequeña ceremonia. No asistí.
No porque no quisiera, sino porque ya no lo necesitaba.
Ya no necesitaba verlo para sentir que algo en mí seguía latiendo.
El amor —entendí— no siempre es una presencia; a veces es una huella. Una marca suave que no se borra, pero tampoco duele.

Una mañana, mientras tomaba mi café y revisaba los ejemplares impresos que habían llegado a la oficina, noté algo extraño.
En la última página del libro, justo después del epílogo, había una línea añadida. No estaba en el manuscrito original.
Era pequeña, en cursiva, casi invisible. Pero estaba ahí.

“A quien me enseñó que traducir el alma es un acto de amor.”

Me quedé en silencio.
El corazón me dio un vuelco, suave, como una brisa que entra por la ventana cuando creías que todo estaba cerrado.
Pasé los dedos sobre las letras, como si pudiera sentir la intención detrás de cada palabra.

No lloré. No me temblaron las manos.
Solo sonreí.
Porque esa dedicatoria no me pertenecía del todo. Era un eco, un suspiro compartido.
Una forma de decir: “Fuimos, y estuvo bien.”

Guardé el libro en mi bolso y salí a caminar.
El cielo de otoño estaba despejado, y Roma (porque sí, todavía seguía allí unos días más) tenía ese olor a pan recién hecho y lluvia que se mezcla con las calles viejas.
Me detuve frente a una librería pequeña, de esas que parecen respirarse.
En el escaparate, vi su libro junto al mío, el nombre de ambos compartiendo portada.
Y algo dentro de mí se acomodó.

Saqué mi libreta, la misma donde había escrito tantas veces sin atreverme a enviarle nada, y anoté:

“A veces el destino escribe notas al pie que solo uno puede leer.
No para recordar lo que fue, sino para entender que, incluso entre líneas, seguimos siendo parte de una misma historia.”

Cerré la libreta, la guardé en el bolso y seguí caminando.
El sol empezaba a caer, tiñendo los edificios de naranja y oro.
Pensé en Lorenzo, en todo lo que fuimos, en lo que aprendimos el uno del otro sin darnos cuenta.
Y comprendí que no había final más justo que ese:
la paz después de la tormenta,
la sonrisa después del adiós,
la certeza de que amar también es dejar ir.

Esa noche, antes de dormir, abrí el libro una vez más y volví a leer la dedicatoria.
Ya no la sentí como una herida, sino como un regalo.
Porque, al final, traducir su historia fue mi manera de traducirme a mí misma.

Apagué la luz.
El silencio llenó la habitación, y por primera vez en mucho tiempo, no dolió.

Solo se sintió completo.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.