Cuando sus labios impactan en los míos me quedo estática. Todo a mi alrededor se evapora, todos los presentes desaparecen porque solo puedo concentrarme en el sabor de sus labios pegados a los míos que no se han movido un solo centímetro.
Dominick me besó, pero lo hizo ebrio, lo hizo para luego no recordar al día siguiente como se sintió. Ahora es diferente porque este hombre me está besando sobrio, frente a su prometida y todos sus familiares. Puedo sentir los latidos acelerados de mi corazón mientras él envuelve su brazo en mi cintura y me pega a su pecho haciéndome soltar un aire levemente con los ojos cerrados. Cuando su mano sube por mi espalda mando todo al diablo y correspondo como tantas ganas tengo de hacer.
Mis labios se mueven con desesperación sobre los suyos mientras mantengo mis manos en su cuello. Él aprieta mi cuerpo más cerca, pero justo ahora solo quiero que no deje de mover esos labios tan tentadores que deberían ser el pecado más peligroso del mundo.
Nunca había anhelado tanto un beso como he anhelado los labios de Dominick Vlad sobre los míos. Este hombre de temperamento desagradable, pero que cambia muchas veces conmigo. Este hombre por el cual he sentido una atracción muy extraña desde que lo vi vociferar idioteces, desde que lo conocí. Maldición, sabía que algún día esto que pasa entre nosotros iba a explotar, pero no en este momento, no ahora.
El grito de alguien me hace separarme de él quien respira agitado con los labios hinchados y mi labial en él. Sus pupilas dilatadas hacen que lama mis labios con una sonrisa coqueta, una que termina cuando todos miramos a la señora que parece que acaba de ver al diablo y no a dos personas besándose.
Amanda parece muy complacida con todo el espectáculo, porque tiene una enorme sonrisa que debería darme miedo, mientras que a su lado su tío parece que no sabe qué hacer. Yo tampoco sé que hacer justo ahora, me siento desorientada luego de ese estupendo beso y tengo demasiadas preguntas que hacerle a Dominick. Cuando trato de alejarme él sujeta mi cintura y niega a que me aparte de su cuerpo. Sus dedos limpian la comisura de mis labios porque me muestra luego como mi labial está en sus dedos. Se acerca a uno de mis oídos y sopla haciendo que me estremezca.
—Robé un poco de tu labial—susurra con esa jodida voz que debería ser un delito porque moja bragas.
—¡Dominick Vlad!—grita la señora que ahora es sujetada por Joseph—explícame qué diablos está ocurriendo aquí—lo señala—este no fue al acuerdo al cual llegamos—Dominick mira fijamente a la vieja chismosa.
—El acuerdo acaba abuela—responde con tranquilidad—te dije que no iba a casarme—ella sonríe mientras se cruza de brazos mirando a su nieto como si fuese una simple cucaracha a la cual aplastará.
—¿Estás seguro de eso?—pregunta—porque recuerda quien tiene el poder aquí, no me hagas actuar cariño—el agarre de Dominick en mi cintura se hace más fuerte, lo que me hace mirarlo. Tiene los labios apretados mientras mira a la señora.
—No me casaré—dice firmemente.
—Espero que Amanda piense lo mismo cuando esté devuelta a Alemania—abro mis labios sorprendida mientras la mencionada mira de su hermano a su abuela.
—¿Qué quieres decir con eso madre?—pregunta Joseph mirando a la señora. Patricia parece nerviosa mientras mira a la señora.
—A que Dominick y yo acordamos que se casaría con alguien que yo quiera a cambio de que pueda darle la custodia de Amanda. Él sabe que si vamos a juicio tiene todas las de perder porque el poder y el dinero que tengo en comparación al de ustedes no es nada.
>> Así que piensa muy bien lo que harás porque yo a esta mujer—me señala—no la quiero cerca de mí. Patricia será la única mujer que porte el apellido Vlad o ninguna lo hará y tu hermana estará lejos de ti porque haré que no te la den. Sabes muy bien que tengo pruebas de un fracaso muy fuerte en tu vida—la cara de Dominick esta contrariada. La señora mira a Jhon y sonríe—él también sabe de lo que hablo. Olvidaré este numerito y volveré a la fiesta, pero a esa calienta camas la quiero fuera de nuestras vidas. No la quiero trabajando en este lugar y mucho menos cerca de mi nieto. No me gustan las mocosas con aires de grandeza—me suelto de Dominick.
—No soy ninguna calienta camas señora, ahora, la cama de quien caliente a usted no le importa porque es mi jodido cuerpo. Es tan jodida que amenaza a su nieto, de verdad está mal de la cabeza y si estoy trabajando aquí es porque he demostrado que tengo talento y se lo que hago. Me he ganado cada cosa. Así que debería besar el piso por el que paso—ella sonríe mirándome.
—Estas con un hombre comprometido—me señala—eres una zo...
—¡Abuela!—grita Dominick—cuidado con lo que dices—la señala—no aceptare que...
—Tú aceptaras todo, Dominick, sabes que hablo enserio, no me hagas actuar—lo mira fijamente—te tengo en mis manos—Joseph parece desconcertado de todo. No es el único.
Amanda mira a su hermano con los ojos cristalinos mientras se acerca a él. Lo abraza en silencio y me aparto porque este parece un momento familiar. Jhon toma mi mano y eso me hace recordar que es mi pareja en esta fiesta, me sonrojo avergonzada porque acaba de besuquearme con el gorila de Dominick frente a sus ojos. Jhon solo me sonríe con dulzura.
—Tranquila—susurra.
—Estoy todo, menos tranquila—le aseguro. Mi murmullo causa que la señora que parece madre del diablo me mire mal nuevamente.
—¡Patricia!—chilla ella. Patricia se coloca a su lado dándome una larga mirada de reto, olvidaba que esta mujer le gusta retarme por todo, hasta por mis ex novios—esta es la mujer con la cual te casaras—veo que las mejillas de Patricia están rojas, no puedo evitar querer reír. Tanto parloteo sobre un matrimonio que es solo un acuerdo de abuela y nieto.
Dos personas entran riendo al despacho, pero al ver a las personas en él se sonrojan, piden disculpas y salen por donde vinieron a paso apresurado. Hasta yo quiero salir corriendo de este lugar que no está siendo de mi agrado.
Editado: 21.11.2024