Mientras estábamos en el descanso hablando sobre el universo, vi pasar a Nataly, que estaba caminando hacia la cafetería, y deduje que no sabía dónde sentarse.
─Nataly, si quieres, ven con nosotros.
─¿Qué estás haciendo? ─preguntó Erick.
─Llamando a Nataly para que se siente con nosotros.
─¿Tú piensas que se va a sentar con nosotros? Obvio que no, no hablamos mucho con ella.
─Eso puede cambiar.
─Si tú lo dices... ─concluyó Erick no muy seguro de lo que yo acababa de decir.
─¡Hola! ¿Qué tal, chicos? ─preguntó Nataly un poco confundida─. Gracias por invitarme a sentar con ustedes, casi no tengo amigos.
─Ya los tienes. Te presento a Erick, Steve, Alan y yo... Bueno tú ya sabes mi nombre, hemos hablado en trabajos que nos ponen los profes.
─Sí, tú eres Bruce. Encantada de conocer a tus amigos.
Ya que todos se habían presentado, nos pusimos a platicar un poco y a conocernos mejor. En ese instante se me ocurrió una idea: «¿Por qué no la invito a nuestra reunión de exploración?». Les voy a explicar de qué se trata. Es una salida que hacemos mis amigos y yo al mundo exterior, para investigar cosas que nos pueda traer el mundo y ponernos a platicar sobre ese tema. Después, hacemos alguna actividad o lo que se nos ocurra. Bueno, entonces, lo que les estaba diciendo era que quería invitar a Nataly a nuestra salida de este viernes.
─Oye, si quieres puedes acompañarnos este viernes a nuestra salida.
─Me gustaría, pero si todos están de acuerdo ─determinó Nataly mirando de reojo a los demás.
─¡Claro que sí! ¿Qué dicen, chicos? ─pregunté volteando la mirada hacia mis compañeros.
─Nosotros estamos bien. Sí, que venga con nosotros ─afirmaron Steve y Alan al mismo tiempo.
─¿Y tú qué dices, Erick?
─Ay, no sé.
─Ay, por favor, di que sí.
─Ok, sí, que venga con nosotros ─acordó no muy convencido.
─Entonces, si vas a venir con nosotros, después de que termine el colegio te doy la dirección.
─Ok, Gracias por invitarme.