La vida es curiosa

Capitulo 6 El día del viaje

Hoy es el día, ya es viernes. Estoy en mi casa esperando a mis compañeros y a Nataly, ya que les dije que nos veíamos aquí para irnos todos juntos al bosque.

En estos momentos estoy arreglando mi bolso de exploración inspirado en Indiana Jones. Tengo que llevar lo necesario para que nuestra salida sea una buena experiencia y esas cosas que lle- vo son: carpa, cobija, almohada, algunas golosinas y juegos para jugar allá, como pelota o soga de saltar.

~*~

Mientras que mi madre me da un poco de helado de fresa con galletas, que obvio que disfruto comiendo. Mi hermana y mi padre están en el suelo de la sala, jugando twister hasta que escuchamos el timbre de la puerta y voy corriendo a toda velocidad para abrirla. Veo que son Steve y Alan, los dejo entrar y los invito un rato a comer helado mientras esperamos a los otros dos.

Después de unos segundos de terminar nuestro helado, Nataly y Erick llegaron como a las diez y media de la mañana a mi casa. Pero uno no estaba del todo bien, se veía un poco malgeniado con la mirada hacia abajo y los brazos cruzados, ese era Erick. Creo que es algo que paso de nuevo en su familia o es porque vie- ne Nataly con nosotros. Solo quiero que por lo que sea que esté pasando, todo se pueda solucionar rápido y este otra vez bien.

Y bueno, de ahí si veo a los demás felices, porque hay mismo nos montamos en el auto para irnos rápido al bosque. Nataly se sienta en el asiento del copiloto y los otros tres se acomodan atrás, en el medio está Alan, ya que le encanta hablar y socializar, Steve al lado derecho con su mirada seria viendo la ventana y Erick al otro lado, con la cabeza hacia abajo viendo su celular.

Luego me despido de mis padres con la mano, dentro del auto y decido arrancar de camino hacia el «bosque misterioso».

—Oigan, sería buena idea que... ¡Pongamos música! —propuso Nataly, animada en la silla del copiloto.

—Bien, pon cualquiera —le hablo con una sonrisa, mientras sostengo el volante.

—¡Sííí! —habla solo Alan con una gran sonrisa en su boca, se ve que está emocionado porque también alza las manos. Steve y Erick se mantienen neutros ante el comentario de Nat.

—Voy a poner 'Levels, de Avicii'. Esa canción es tan divertida para animar este tipo de salidas —Nat nos dice viendo a cada uno, mientras que pone el disco que trajo del cantante para ponerlo en la radio y empieza a buscar la canción.

De repente mis oídos escuchan un sonido suave que luego va más rápido, ya que es electrónica. Todos en el auto empezaron a saltar y a bailar, somos un grupo que nunca se ha separado y ha seguido unido, pero Nataly faltaba para completar esto que formamos.

Después de tantos intentos de cantar y que nos sacaran gallos por hacerlo, aunque lo importante es que nos divertimos. Por fin llegamos al lugar, nos bajamos del auto con todas las cosas que trajimos y decidimos armar grupos. Erick y Steve armaron las carpas, Nataly y yo hicimos la fogata y Alan... mmm... siguió siendo Alan.

—Oigan, ya tenemos lista la fogata —Nat les dice a los demás levantándose y sacudiendo sus manos llenas de tierra por estar armándola conmigo. Y si, yo también me estoy sacudiendo, quedamos muy sucios.

—Y nosotros las carpas —anunció Steve alzando la mirada hacía a nosotros luego de arreglarlas.

—¿Y qué hacemos? —preguntó Alan, confundido como siempre. Veo que está tirado en el suelo con las piernas estiradas tocando hojas y jugando con ellas.

—Pues investigar, no es obvio. Llegamos aquí para saber más de este lugar, Alan —sentenció Erick sarcástico, levantando la mirada hacia nuestro amigo rodando los ojos.

—Ah, okay —habla mostrando los dientes y haciendo ojitos, mi amigo definitivamente es rarito. Pero igual se le quiere.

—Bueno, chicos. Mientras ustedes siguen arreglando, iré a buscar un poco de comida —avisó Nataly, alejándose un poco de nosotros.

—Pero si ya tenemos aquí. No tienes que... —Erick es interrumpido por Nat.

—Sí, pero también hay que aprender a sobrevivir en la naturaleza. Vinieron aquí a aprender, bueno, eso es lo que yo haré —se levanta decidida y nos sonríe con boca cerrada.

—Tranquila, tú ve —establecí.

~*~

Nataly caminó hacia otro lado del bosque para encontrar comida o algo que le pareciera que les podría ayudar para mejorar esta experiencia y aprender algo de este lugar, de porque dicen que es tan misterioso y mágico. Aunque mientras caminaba a lado de los árboles; se distrajo con un búho que esta sobre una rama y un conejo sobre el césped, pero el segundo llamo más su atención, entonces sonrió y se agachó para consentirlo. Se nota que a Nataly le encantan los animales, pero más los conejos. Ya que tiene uno en casa, porque se lo regalo su padre.

Mientras lo estaba cargando en sus brazos y le daba alguna comida que encontraba por ahí. De pronto vio una luz brillar; que era azul, y la siguió. Esa luz la llevó hacia un árbol, que era el más gigante de todos y tenía un hueco en el palo, como si fuera una entrada.

—¿Hola? —exclamó un tanto temerosa Nataly.

—...

—Nataly, quién te va a responder. Nadie está, estás tú sola con una luz —se dijo a sí misma en voz alta—. ¡Ay, mejor me voy! —se rinde, suspira y se devuelve por donde vino.

Pero cuando ella estaba que, casi yéndose, la luz la rodeó y se la llevó dentro del árbol. Nataly gritó tan fuerte que hasta se escuchó en casi todo el mundo. Los chicos oyeron y se quedaron asustados.

—Oigan, ¿escucharon eso? —preguntó dando un salto, hasta quedar parado. Ese ruido me sorprendió.

—Sí... —afirmaron todos a coro, mirándose entre sí.

—Creo que fue Nataly y creo que está en problemas —es algo que supongo, pero ojalá no sea así...



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En el texto hay: romance, fantasía drama romance

Editado: 09.12.2025

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