La vida es curiosa

Capítulo 10 Necesitamos ayuda

Estábamos confusos y a la vez nos sentíamos muy curiosos por poder averiguar sobre este mundo, aunque primero teníamos que salvar a Nataly y a Midgar Fantasy. Todo a nuestro alrededor estaba nublado ante nuestros ojos, solo queríamos comprender la situación por la que estábamos pasando.

~*~

Mientras que iba y venía de un lado para otro pensando en un plan para salvar a nuestra amiga. Observe que Yara seguía llorando en el suelo; tenía el maquillaje desordenado en su rostro, las ojeras caídas, no tenía bien pintado los labios, estaba hecha un desastre. Así que decidí acercarme a ella y me senté a su lado.

—Hola, Yara. ¿Qué te pasa? Has estado, de esta forma como mil horas. Por favor, cuéntame qué te pasa, ¿sí? Estoy preocupado por ti —le toco el brazo y la miro a los ojos atento. Veo que ella alza la mirada y me mira con sus ojos llorosos. Luego intenta respirar profundo y empieza a hablar.

—¡Aaah! Bueno, te diré. ¿Te acuerdas de ese Big Troll que vino hacia nosotros?
—siento como traga saliva intentando hablar.

—Sí… —hablo esperando su respuesta.

—Bueno, pues a ese Big Troll le debo algo. Y si no le doy lo que él quiere, destruirá Midgar Fantasy —noto como tartamudea mientras habla. Su rostro está pálido, en serio está muy mal.

—Pero, ¿por qué? ¿No es algo injusto?
—frunzo el ceño, un poco molesto.

—Sí, lo es. Pero eso no es lo único que me preocupa. También siento que no seré una gran reina para mi pueblo; y con todos estos problemas que están pasando en Midgar Fantasy, tengo miedo de que nada vuelva a ser como antes —noto como le caen lágrimas por sus mejillas, está destrozada. Luego decide meter su rostro bajo sus brazos y hundirse en esa tristeza que la consume. Me quedo mirándola preocupado.

—No te preocupes... —no termino de hablar, porque Steve me interrumpe.

—Tranquila, por eso estamos aquí, para ayudarte. Por algo nos llamamos «Los chicos imparables» —volteo a mirar a Steve, frunciendo el ceño. Nunca sabes con lo que te van a salir tus amigos.

—Esperen, ¿cómo que somos «los chicos imparables»? —Erick empieza hablar intentando calmar su risa—. En serio, Steve, tienes unas ideas tan locas...
—siento como se sigue riendo de lo que dijo y Steve solo asiente serio. De ahí me levanto y hablo.

—Chicos, por favor, paren. No es hora de bromear. Tenemos que ayudar a Yara para poder salvar este mundo —hablo preocupado, intentando calmar un poco el ambiente. Solo necesitamos un plan y estar más unidos que nunca.

—Si, lo sé, pero ¿qué hay con nuestra aventura de exploración? —habla Steve con los brazos cruzados, mirándome como siempre serio.

—Habrá tiempo después para nuestra aventura. Primero, hay que salvar a Nataly y a este lugar —hablo tomando el mando de la situación. Alguien tiene que intervenir, y por eso asiento tomando esto en serio.

—Gracias, Bruce —intervino Yara aliviada, contemplo como me sonríe y asiento un poco más calmado.

—Ok, ok. Entiendo lo que quieres decir, sin embargo, ¿qué hacemos para salvarlo? —peguntó Erick

—Tranquilos, tengo un plan. Sin embargo, primero, hay que salvar a Nataly —concluí.

Fuimos a un cuarto donde Yara tenía un montón de herramientas. Había una mesa en el centro de la habitación y una ventana grande, sin embargo, no nos podían observar adentro y nosotros sí podíamos ver lo de afuera. Nos sentamos en la mesa, les empecé a platicar sobre el plan que tenía en mente para poder salvar a Nataly de esos Big Trolls.



#1210 en Fantasía
#206 en Magia

En el texto hay: romance, fantasía drama romance

Editado: 09.12.2025

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.