Todos estábamos asustados de lo que podría pasar en Midgar Fantasy. Las cartas, el BigTroll, y Patrick, da miedo solo con decirlo. De repente todos decidieron irse a dormir, menos yo. Es que estaba preocupado por Alicia, de que enfrente esta situación con su hermano, pero sé que puede, confío en ella. Aunque admito que, si estoy un poco preocupado de lo que pueda pasar, porque en verdad no sé qué nos espera.
~*~
Antes de dormirme, escuche la voz de Nataly que estaba a lado de mi cama. Nuestras camas están hechas de madera y las cobijas son pétalos grandes de flores, todos estamos en la misma habitación. Y pues luego de escucharla hablar, volteé mi rostro y vi que estaba boca arriba con los ojos cerrados, moviendo los labios. Me doy cuenta de que es sonámbula, se ve tan linda dormida.
Decidí pararme, me acerqué a ella para darle un beso en su frente y ponerle su cobija que la tenía abajo en los pies. Cuando la iba a cobijar, se despertó, me dio un beso rápido en mis labios y se volvió a dormir.
~*~
Al otro día cada uno estaba alistando su maleta de viaje, me- nos Alan. ¿Por qué? No sé, él es Alan, es así. Estamos en la sala principal, donde están las paredes de agua.
—Oye, Alan. ¿Qué haces? —me acerco hasta el, veo que esta quieto como una estatua en una pose rara, como si fuera de yoga.
—Sh... —habla mostrando su dedo, en señal de que haga silencio.
—Solo quería deci... —digo un poco confundido. No sigo la frase, porque el me interrumpe.
—Sh, no ves que estoy ocupado conectándome con el mas allá— dice muy concentrado con los ojos cerrados.
—Si, lo sé, pero Alan nos vamos de viaje ¿Te acuerdas? Y tienes que empacar lo que te vas a llevar — me detengo un momento a analizar lo que está haciendo, luego vuelvo a hablar —Ah, y una cosa, si te estas "intentando conectar con la naturaleza", porque estas adentro en vez de estar afuera— abre los ojos de inmediato, dándose cuenta de que tengo razón. Se le ve un poco apenado.
—Ehm... Pues... Ay, no importa, solo me estoy relajando— habla sin rodeos y sigue con lo que estaba haciendo.
—Bien, como digas— meneo la cabeza, mientras me rio un poco. No sé qué voy a hacer con mi amigo.
~*~
—Hola, chicas. ¿Qué empacan? —me acerco hasta Yara y Nataly. Están al lado izquierdo, donde queda el ajedrez de la sala. Están empacando cosas en sus bolsos color marrón.
—Pues empacando lo que necesitamos para un viaje de estos, ¿no Yara? —dice Nataly segura de sí misma, mirando de reojo a Yara.
—Si, obvio— se miran entre sí, muy sospechas. ¿Que estarán tramando?
—Okay... Iré mejor a ver a los chicos— frunzo el ceño y me alejo, mientras ellas se ríen. En serio, ¿Qué traman?
~*~
—¿Qué tal Bruce? Aquí estamos con Erick, ya terminamos de empacar
— dice tranquilo, con una poción en su mano y en la otra una espada plateada.
—¿Así? Entonces, ¿Qué hacen? — digo en medio de los dos, Erick está a lado derecho y Steve a lado izquierdo.
—Pues aquí, probando trucos de magia que nos enseñó Alicia
¿Te acuerdas? —dice Erick emocionado y concentrado, moviendo su espada dorada para aquí y para allá.
—Claro, que me acuerdo— digo seguro de mí mismo y sonrió.
—¿Quieres practicar con nosotros un rato? — dice Steve dándome una poción y una espada color verde.
—Bueno, hagámoslo— se la recibo y me preparo regalándoles una sonrisa decidida para empezar a practicar.
Después de unos minutos de estar practicando con Erick y Steve. Lanzar unos cuantos hechizos con nuestras bolas de cristal, practicar batalla con nuestras espadas y también probar las pociones. Erick en un momento, por lo fuerte que es, me lanzo al suelo. No me dolió tanto la caída, revisé mis manos un poco raspadas y luego de levantar mi cabeza, vi a Alicia en un rincón preocupada. Entonces decidí pararme, decirles a los chicos que sigan ellos solos, asintieron sin quejarse y de ahí me alejé hacia donde estaba Alicia sentada a lado de la pared.
—Hola, ¿Qué te pasa? —me siento a su lado. Tiene el rostro decaído.
—Es que no se si pueda hablar con mi hermano, después de tantos fantiaños sin vernos— dice mirándome con sus ojos grises, preocupada. Luego agacha la cabeza sobre sus piernas y vuelve a hablar —Y no se si el quisiera hablar conmigo— hunde más su cabeza entre sus piernas, veo que intenta no llorar.
—Tranquila, sé que tú puedes. Solo ten fe, todos merecemos una oportunidad, o ¿no? —sonrió de medio lado, y le sobo la espalda. Dándole ánimo.
—Si, creo que si— respira profundo. Alza su cabeza y me mira
—Bruce, puedes dejarme sola un rato.
—Bien, pero prométeme que vas a estar bien— le muestro mi dedo en señal de promesa. Ella me mira confundida. Se que no sabe que significa esto, somos de mundos distintos.
—Si, te lo prometo. Estaré bien— sin estar segura, igual entrelaza su dedo con el mío, luego me sonríe.
~*~
Estamos todos listos para irnos, solo faltaba buscar a Alicia. No sabíamos a donde se había metido. Habíamos buscado por toda la guarida, pero ni rastro de ella. Entonces decidimos salir afuera a encontrarla, formamos dos grupos. En el grupo A estaban Yara, Nataly y Alan, Grupo B, estábamos Erick, Steve y yo.
—¿Dónde se habrá metido? —digo preocupado, tocándome la frente. Estamos arriba a un lado de los árboles.
—No sé, tú que le dijiste para que se fuera— soy yo o me acaba de culpar por la escapada de Alicia. Erick se comporta extraño, más indiferente de lo normal.
—¿¡Qué?! ¡Yo no le dije nada! —estaba tan asustado por lo que le pueda pasar a Alicia, que ni me di cuenta de que le estaba gritando.
—Ay, por favor, han estado tan juntos estos días. Obvio, que le dijiste algo que la intimido— dice un poco molesto. Yo ya estaba que me desesperaba, como puede decir eso Erick, mi propio amigo.
—¡Sabes, no te soporto más! —cansado de que me acusara, intento acercarme para darle un empujón, pero Steve se pone en medio de los dos.