Matthew estaba con Luke, su mejor amigo quién era un famoso escritor de romance histórico en todo el mundo, en la cafetería más prestigiosa de Bendigo. Solo los de la clase alta como ellos o como su novia podían estar allí. El diseño del local en realidad era como cualquiera cafetería, solo que era un estilo más vintage con esa decoración tan única para su gusto. Pero el menú era increíblemente caro, cosa que Matt no comprendía demasiado. Era un menú normal. Aunque él solo solía venir aquí por su novia, quién admiraba demasiado este lugar. Solo con pensar en ella, su corazón latía fuerte.
Estaba muerto nervioso por lo de esta noche. Hoy iba a pedirle que se casara con ella a pesar de que solo la conocía por unos meses. Pero estaba totalmente seguro de que su Rosé era la indicada.
Cerró los ojos con una sonrisa dibujada en su rostro, pensando en el amor de su vida. Su futura mujer lo tenía todo. Belleza, personalidad, inteligente y un gran corazón. Además sus padres la querían como nuera. Todo un plus.
—Bueno...¿Por qué estamos aquí? —preguntó su mejor amigo haciéndolo regresar al mundo real.
Luke era el más joven del grupo. Tenía solo veintiuno años. Con esa temprana edad, logró tener éxito sin pertenecer a una familia rica. Su talento como escritor junto con su belleza aristocrática logró robar el corazón de millones de jóvenes por todo el planeta tierra.
Matt lo miró inocente antes de empezar a hablar mientras el otro suspiraba con desgana. Sabía que estaba incómodo estando en este lugar pero no podía hacer nada para impedirlo.
—Necesito tu ayuda. Tendré una cita con el amor de mi vida hoy y pensé si...¿Debería pedirle matrimonio? Estoy seguro que a pesar de que solo hemos salido por poco tiempo, estamos destinados a estar juntos para siempre.
Luke bufó al oír a Matthew hablando de su nueva novia. A éste se le caracterizaba por ser demasiado perfeccionista y trabajador a diferencia de James, un vago de primeras. Pero lo único malo de él era que se enamoraba demasiado fácil. Creía en el amor, en el matrimonio y en las almas gemelas. Cada vez que conocía una interesante mujer, pensaba que ella era indicada. Al final la historia terminaba con el corazón roto de Matt.
No importaba cuánto Luke se lo advertía, Matt siempre seguía sin hacerle caso. Un día, morirá por amor no correspondido. Y él como buen amigo, escribirá una novela basando en la trágica vida amorosa de su mejor amigo.
—Por fis —añadió haciendo un triste mohín con sus labios al notar el incómodo silencio de Luke—. Nadie puede ayudarte, solo tú. James está ocupado con no sé el qué, Alec estará descansando en su casa y Iker está inmerso en su empresa. Por favor. Solo debes tocar piano esta noche. No te pido más que eso.
Luke no le quedó más remedio que rendirse aunque no estaba seguro sobre la decisión de su mejor amigo.
Como Matt quería todo le saliera a la perfección, alquiló toda la cafetería para él esta noche. Después de todo, el dinero no era ningún problema para él.
Con la ayuda de los empleados de este local, Matt empezó a ordenarles paso a paso de cómo quería la fiesta siguiendo los gustos de su novia. Seguramente en cuanto viera esto, se pondrá contenta con él y eso le hará el hombre más feliz del mundo.
Después de horas de preparación, ya llegó la hora. Todo estaba listo. La comida favorita y el género musical preferido de su novia ya estaba todo preparado. Solo faltaba la llegada de Rosé.
Cada minuto que pasaba, más nervioso estaba Matt. ¿Dónde estará su novia? ¿En una reunión? No, según Rosé tenía el tiempo libre para quedar con él sin darse prisas por miedo de llegar tarde a su trabajo. Eso era lo malo de salir con una modela sumamente conocida por todo el mundo.
Entonces, ¿por qué tardaba? Ya debería estar aquí, celebrando a lo grande su compromiso. La comida se estaba enfriando, una lenta melodía que resonaba por los audífonos que lo estaba deprimiendo cada vez más y los empleados no paraban de mirarlo de reojo. Seguramente para ellos, les parecía como un novio abandonado por su futura mujer. ¡Qué imagen tan triste!
Meneó la cabeza varias veces, decidido a no hacerle caso a sus pensamientos negativos.
Rosé llegará pronto. Todo saldrá bien. No debía alterarse, sino ser paciente. Ser impaciente, solo le causará problemas. Eso era lo que siempre le decía sus padres sobre todo su prima lejana cada vez que Matt tenía un ataque de alteración.
De repente, la puerta del sitio se abrió causando que Matt levantara la vista emocionada pero dicha emoción se esfumó como polvo de su rostro en cuanto vio a Luke vestido elegantemente con un carísimo traje de fiesta caminando hacia él con su típica sonrisa. Seguramente estaría burlándose de él. Iba a ser abandonado en frente suya mientras Luke no pararía de decirle "Te lo dije". Si la próxima vez, si iba a enamorarse nunca se lo dirá a su mejor amigo.