Narra Dean
Me pregunto si puedo estar más furioso.
No entiendo como puede existir basura como Nelson. Hace que lo odien con tan solo mirarlo.
- Dean... ¡Dean! detente me estás lastimando- dice Clary
Hasta ahora me doy cuenta de que la estuve prácticamente arrastrando por media escuela, hasta volver a nuestro patio favorito.
La suelto y ella se soba un poco la muñeca. Me disculparía pero estoy tan enojado que las palabras no me saldrían sinceras.
- Dean cálmate, ¿Qué ocurre?- pregunta
- ¿Que qué ocurre?- agarro mi cabello y lo jalo un poco, intentando calmarme- Ocurre que te quito la maldita vista de encima 5 minutos y esa puta plaga ya está sobre ti.
Ella se sorprende por mis palabras, luego frunce el ceño y se cruza de brazos.
- ¿Acaso yo tengo la culpa? Si Dean, yo los llamé porque me encanta su compañía- dice sarcástica- También quedamos de vernos más tarde a tomar un helado.
La miro mal. En eso llegan los chicos y se nos quedan observando.
- Yo no dije eso- ella me sigue mirando
- Eso me das a entender Dean. Me das a entender que tu piensas eso y no se si estar asustada, triste o enojada por ello- ella se envuelve con sus brazos
Me sorprendo pero me recupero rápidamente. Aquí el tema no es ese.
- ¡Que no joder!- grito, y lo hago tan fuerte que todos los presentes pegan un salto
- ¡Hey idiota no le grites!- dice una enojada Lina
- Hermano tranquilo, lo estas empeorando- dice Bruno levantando las manos
Respiro profundo, intento calmarme. Sí, estoy exagerando lo sé, pero no puedo controlarme. De nuevo pierdo los estribos cuando se trata de Clary.
Odio esto. Odio no tener el control de mi vida. Odio que alguien me controle, eso ya lo había dejado enterrado en el pasado.
- ¡Vete al diablo Dean! Cuando dejes de comportarte como un idiota avísame- se da la vuelta y miro como se aleja
¡No maldición, no! Doy grandes sanjadas y en poco ya estoy a su lado, suelto lo que suena como un gruñido, cosas que se me esta haciendo habitual, y la tomo por el brazo sin lastimarla, girándola y plantandole un beso.
Escucho un jadeo de parte de los chicos pero ni siquiera les presto atención, solo me concentro en el beso para poder trasmitirle a ella mi preocupación. Y así, no tener que decir algo tan vergonzoso como que estoy celoso y que temo perderla.
Narra Clary
Nunca deja de sorprenderme. Enserio.
Me debato entre corresponderle o alejarlo y golpearlo por querer solucionar la discusión con un beso.
La respuesta esta ante mi cuando nos separamos. Al final no hice ninguna de las opciones, solo me quede quieta.
El rostro de Dean demuestra ira y celos, pero sus ojos... Sus ojos demuestran miedo.
Me paso las manos por la cara un tanto desesperada.
- ¡¿Qué quieres de mi?!- grito-. Con un demonio Dean... ¿Qué quieres?- mi voz se va apagando mientras tomo una parte de la chaqueta de Dean
- Todo. Lo quiero todo- se acerca más a mi, juntando nuestras frentes-. Quiero que pienses en mí cada segundo del día, que me quieras tanto como yo a ti... Lo quiero todo, Claryssa.
Se me corta la respiración. Deslizo mis manos lentamente hasta llegar a abrazarlo, colocando mi cabeza en su pecho.
Luego de unos segundo, me acerco a su oído.
- Ya lo hago Dean. Cada segundo, cada minuto y cada hora del día... Pienso en ti. Ya tienes todo de mí- le susurro y me escondo en su pecho
Todo su cuerpo se tensa por mis palabras. Sus brazos me aprietan más a él.
- Chicos... Ya fue suficiente ¿No? Hay que calmarnos todos- habla Bruno
Me separo de Dean, algo avergonzada porque los chicos tuvieron que presenciar todo esto.
Dean suelta un bufido y lo mira mal.
- Si no fueras mi amigo... No te la perdonaría- dice Dean
- Pero me amas y no me harás nada. Ahora tranquilos todos y vamos que tocaron la campana- dice Bruno haciendo cara de inocente
Tomamos nuestras cosas que... ¿Los chicos trajeron? Supongo. Y vamos caminando a las salas.
Lina no se mueve, espera a que Dean, que viene unos pasos detrás de mi, llegue a su lado y comienza a caminar.
Ella habla bajo pero puedo escucharla.
- Como le vuelvas a gritar... No la cuentas.
- Tranquila solo estaba... Lo siento, no era mi intención gritarle.
- Eso espero Black.
Y así, después de una extraña discusión, seguimos con nuestro día.