Aviso.

Este es un aviso que avisa que el avisador se olvidó de avisar por lo que este aviso avisa que el aviso ya no avisa.

Sí, como que ese chiste sonaba mejor en mi cabeza.

Hola por aquí querido lector o lectora, bienvenido a la locura que me impulsa a escribir historias que yo amaría leer libremente en cualquier otro medio, pero que por muchas razones solo se permite en plataformas como estas.

Para no hacer muy largo esto y puedas comenzar la lectura en paz, vayamos al punto.

Amo escribir, escribir es una pasión que comparto con mucha gente de esta comunidad, sin embargo, que algo te guste o apasione no siempre significa que a otros les llegue a gustar o apasionar de la misma forma. 
Es por esa razón, que me veo en la necesidad de hacer unas cuantas aclaraciones.

La razón por la que escribo, y es totalmente independiente a mi pasión por ello, es porque considero que Dios me dio este don, las palabras para usar y las historias para escribir. 
Por lo tanto, todo lo que escribo está teñido —a veces de forma parcial, a veces de forma completa—, del amor que mi Padre me demuestra.

Si no te gusta esta clase de lecturas, si considerás que no va con vos o qué sé yo, te invito a que leas algo que sí lo sea. Hay escritores talentosísimos, te podría hacer una lista enorme de todos a los que sigo y leo que no tienen nada que ver con el contenido que yo subo, pero no estamos acá para eso.

Es por eso que con mucho amor te pido que ni te molestes en dejar comentarios ofensivos. Claro que todos podemos opinar, pero siempre con respeto. Cualquier otra cosa será eliminada.

Lo segundo que deberías saber es que soy argentina, y eso significa que aparte de estar un poco (bastante) loca, escribo con voseo. 
No, no es un error que encuentres muchas palabras como decís en vez de dices. Hablamos así y no es un delito por amor de todo lo bueno. 
Vas a encontrar también muchos argentinismos, palabras extrañas y sin sentido porque el argentino piensa que ningún idioma está a la altura de sus emociones y vidas, y por eso se cree que puede ir inventando palabras y expresiones. 
No te preocupes, voy a poner los significados, siempre que me acuerde, y si no están, no dudes en preguntar porque soy una despistada que se olvida de todo.

Lo tercero y ya casi termino, es que soy una persona honesta y decidida. Por lo tanto, todo lo que leas tiene una gran parte de verdad. Lo que significa que escribo sobre lo que sé, mucho más de lo que no sé. 
No des nada por hecho, por experiencia te digo que muchas veces la realidad supera la ficción. 
Y es esa misma honestidad, la que me lleva a escribir sobre temas considerados "tabú", políticamente incorrectos, incómodos y poco comprendidos. Estoy enamorada de la vida, por lo que al escribir sobre ello, siento que no puedo relatar nada más que lo bueno. Siento que también en la bajeza y lo humillante, hay cierto momento de belleza. 
No me juzgues todavía lector y mantené la mente abierta. 
Esa es mi petición.

Por último, y ligado a todo lo anterior, todas mis historias están ambientadas en Argentina. ¿Por qué? Porque puedo, jaja, pero además, porque yo amaría que el mundo tenga más lugares que visitar en sus mentes. 
Creo que el mundo ya tiene suficiente de torres Eifeles, de puentes de Londres, de Nueva York y yankees. 
América Latina es una vasto espacio de belleza y cultura inigualable, por eso mismo, mi propósito es que cuando la gente lea mis historias, conozcan un poco de mi país, mi cultura y mis costumbres; de la misma forma que yo amo leer a autores que se animan a escribir sobre sus propios países.

Así que amado lector, si aún después de todo esto tenés la valentía de continuar, te admiro y ya tenés un espacio en mi corazón. Y ya sin nada más que decir, te dejo en paz para que disfrutes.

Eso sí, no me hago responsable de corazones rotos, ilusiones falsas, expresiones de desazón y ataques de histeria, ira, llanto y todas sus variaciones.

Con todo mi amor, espero que te guste. 💜💜💜