Linaje del Mal

22. City Hall

 

Sebastian 

 

Acabamos de aterrizar, Mitch, Lydia y papá recogen sus cosas rápido y bajan del jet, yo me estiro y me decido por despertar a Romy de su profundo sueño cuando la siento agitarse en su asiento, murmura algo pero no lo entiendo. Se detiene por unos segundos y luego veo como empieza a toser y agarrase la garganta. Decido intervenir y la sacudo para que se despierte. Abre ese hermoso para de ojos azul verdosos y se levanta de golpe.


—    ¿Pesadilla? —le preguntó aunque ya sé la respuesta.

 

—    Si, no fue nada.


Definitivamente fue algo.


Decido ignorar cuando se limpia las lágrimas y la ayudo a bajar del avión. Hay dos camionetas esperándonos pero noto algo extraño, más bien algo familiar.
Mierda, estamos en Nueva York.


—    ¡Papá te dije que teníamos que ir a Vermont!


Mi padre deja de hablar con los hombres que les daba instrucciones y se gira hacia mi como si estuviera harto de mi mierda.


—    Sebastian tengo que hacer unas cosas aquí primero. —debe estar bromeando.

 

—    ¿Es chiste cierto? ¡Mi hijo, tu nieto, está a dos días de ser sacrificado por una perra loca y tú crees qué hay cosas más importantes.

 

—    Hijo llegaremos a tiempo no te preocupes, ahora lleva a la chica Ajax a un lugar bonito, estaremos aquí todo el día. Necesitas despejar la cabeza.


No entendí absolutamente nada de lo que acaba de pasar pero el tiene razón necesito despejar mi cabeza. Mi padre se va con los hombres con los que hablaba y Lydia y Mitch se van juntos a un restaurante, bueno supongo que ahora hay asuntos más importantes que esconder su relación "secreta". Volteo a ver a Romy y la encuentro con la mirada perdida.


Tendré que indagar más tarde sobre esa pesadilla.


Cuelgo mi brazo para que lo tome y le digo:
—    Vamos señorita Ajax, te llevaré a mi lugar favorito.

 

•••

 

—    ¿Sebastian qué hacemos en una estación de metro? —me pregunta viendo que nos dirijo por un tramo de escaleras subterráneas.

 

—     No es cualquier estación Romy, es City Hall. 


Ambos bajamos y nos encontramos con la abandonada estación de la avenida Lexington, es vieja pero hermosa.


—    Este lugar es hermoso, toda una obra de arte. —dice  anonada por la arquitectura de la estación.


Sobre nosotros hay una larga hilera de arcos que soportan el techo. El techo está hecho, en su mayoria, por cristales coloridos y ladrillos. Los cristales proveen una luz natural, pero cuando cae la noche se encienden unos candelabros que se esparcen cada seis metros. 


—    He visto obras de artes más hermosas —le digo mirándola fijamente mientras ella observa los azulejos guastavinos.


Joder, esta mujer me está volviendo loco. 


—    Sabes, he vivido muchos años en Nueva York y jamás había visto este lugar, aunque bueno, ni siquiera he viajado en metro asi que no puedo decir mucho.

 

—    Aw, la niña rica no viaja en metro porque se tiene que juntar con la plebe. —le digo con un tono infantil y burlón.

 

—    Si claro, ambos sabemos que tú eres un niño rico. Cambiando de tema, ¿Cómo encontraste este lugar? 

 

—    Estaba rastreando a un brujo que mató a su esposa y el maldito se escondía aquí. —me estremezco al recordar a Ricky y a la joven que asesino a sangre fría.

 

—    Vaya, esperaba algo más poético.

 

—    Suelen hacer tours los jueves. —le digo recordando aquella vez que me topé con el cartel de no pasar y los horarios de tour.

 

—    ¿Y que hacemos aquí si no estamos en un tour? —camina suavemente hacia mi, se acerca tanto que si me muevo un poco nuestras narices se tocarían— ¿Acaso eso no nos metería en problemas, Seb?


Me encantaría meterme en problemas contigo Andromeda. Mierda necesito controlarme o le haré cosas no muy lindas aquí mismo. Aclaró mi garganta y rompo el contacto visual, pienso en algo que decir para cambiar de tema pero el sonido de un teléfono interrumpe mis pensamientos. Romy  busca el aparato en su chaqueta, lo saca y pone el teléfono en altavoz e inmediatamente reconozco la voz de Dahlia.


—    El River Café, hoy a las ocho, pónganse algo lindo y no falten.

 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.