Llego aquel día…
Durante mi semestre tuve muchos problemas con algunas materias ya me parecían más complicadas que el resto de los semestres que tenía dentro de la facultad, lo cual ocasionó que reprobara algunas materias y tuviera que presentar más exámenes para poder acreditarlas, en este momento me encontraba con muchas ideas en mi cabeza con todo lo que había sucedido anteriormente, pude darme cuenta de muchas cosas pero también comencé a conocerme, me sentía muy presionada por todos lados así que buscaba alguna manera de poder despejarme, pero no lo conseguía, hasta que unas por obra del destino o la casualidad alumnas de semestres superiores acudieron a los salones repartiendo información acerca de un evento cultural que se realizaría dentro de la facultad, fue algo que de primer momento no capturo mi atención, no le veía un caso el inscribirme, pero lograron surgirme algunas dudas sobre que trataría tal evento, y sobre qué pasaría si no llegaba a participar en él, mínimo podría asistir un rato fue lo primero que me paso por la mente, comencé a leer al folleto que habían pegado en la pared de mi salón, y de manera espontánea comenzó a llamar mi atención ya que las categorías mencionadas las ejercía como un “hobbie”, parte de mí se encontraba entusiasmada por esto, pero otra parte de mí no quería involucrarse ya que esto significaría un gasto de dinero, y el dedicarle tiempo a dicho evento, lo cual ocasionaría perder tiempo en mis actividades escolares, y en ese momento ya no quería más problemas, así que solamente asistiría, el evitar formar parte de él me comenzó afectar en cierta manera, ya que no era muy común que mi facultad ofreciera este tipo de eventos, así que estuve pensando por varios días, en cómo encontrar una manera de poder arreglar mis tiempos y así poder asistir, también durante las próximas semanas se realizarían las entregas de trabajos finales, el cual me hacía más complicado el poder asistir, llego el fin de semana y al regresar a mi ciudad mire mis fotografías, mis dibujos y pinturas, y me ponía a pensar en que no perdía nada el poder asistir y que esto mismo me alegraría una parte de mí, el convivir con más personas que tengan gustos parecidos al mío y con diferentes talentos…me emocionaba, era muy complicado el negarme asistir, así que pasaron los minutos y con ello el fin de semana y al regresar a clase las chicas que habían que organizaban el evento recurrieron al salón promocionándolo y realizando las inscripciones, en ese preciso momento lo dudaba, y me encontraba a nada de negarme a participar, pero sin duda era una oportunidad única de mostrar algo de mí al resto, de mostrar una parte mía que muy pocas personas realmente llegan a conocer y apreciar, pasaron los días y solamente me concentre en qué tipo de cosas llevaría al evento, revele algunas fotografías que me parecían buenas, escogí algunos dibujos que me gustaron, y pues de las pinturas no podía llevar alguna de ellas ya que me sería complicado el transportarlas hasta mi universidad sin que estas resultaran dañadas, prefería no correr riesgo alguno, las semanas transcurrieron rápidamente, y llego el día del evento, ya me encontraba más relajada y despejada de los trabajos del instituto, pero aun así el día que sería el evento que portaba el nombre de “La otra cara” acudí más temprano de lo señalado, así que solamente me quede en un lugar no tan alejado de donde sería el evento, solamente me senté en una banca alado de un jardín que se encontraba desolado, recuerdo que en el instituto se encontraba mayormente vacío, era raro ver a personas que se encontraran en clase o merodeando entre los pasillos, al acercarme a dicha banca se encontraba una persona sentada en una mesa y había otra vacía atrás de ella, así que durante el tiempo que tendría que esperar traía conmigo apuntes de clases que tenía pendientes de terminar y lo necesario para poder participar en el evento, solo tome asiento y comencé a escribir mientras leía, pasaron los minutos, y me encontraba a punto de terminar los apuntes pendientes cuando la única chica que se encontraba sentada dentro del mismo jardín se acercó y amablemente me pregunto si podría hacerme compañía, lo cual en parte me tomo por sorpresa ya que no esperaba que me fuera hablar por el hecho de que se podría observar en su mirada una especie de seriedad, le conteste que no había problema con que me acompañara en la misma mesa, ella sonrió y se recostó, pasaron los minutos y la chica no me dirigía la palabra, en esos momentos comencé a sentirme algo incomoda por su presencia, pero aún con esa incomodidad decidí hacerle platica, para quitarme los nervios del evento y de mis clases, a lo cual la chica comenzó hablarme enseguida y con una buena actitud, me agrado mucho conocer a esa chica, pasaron las horas y llego el momento de asistir al evento, así que solo me despedí de ella y comenzaba a retirarme pero antes de que yo me fuera ella me pregunto que a donde me dirigía, le conteste que formaría parte del evento que se realizaría en la facultad ese día, ella me pregunto en que categoría participaría, le conteste y me pidió amablemente ver mis fotografías y dibujos que expondría, le gustaron al momento de verlos, ella se encontraba sola esperando a sus compañeros para realizar un trabajo de equipo, pero como estos no llegaron a la hora citada se ofreció acompañar al evento, y fue así, mi día parecía normal y de igual manera comenzaba a mejorar en ciertos aspectos, pero estoy segura de que no creí que me pudiera suceder algo emocionante o nuevo, ya que había perdido toda esperanza de que una persona como yo, le pudiera ocurrir algo así…