CAPÍTULO 14
Miraba hacia un punto fijo, sin pensar y conteniendo la respiración, quizás hasta pálida, por lo cual los chicos se preocuparon y desearon saber si estaba bien después de aquel "balde de agua fría" que echaron sobre mí. Tenía sentimientos encontrados, dándome cuenta de que la razón por la que siempre me sentí bien en compañía de ellos era porque ya los había conocido en mis otras vidas y, aunque no recordaba nada, pude sentir esas cosas extrañas dentro de mi corazón, algo que sin duda confirmaba lo que habían dicho.
—Te prometemos que esta vez te protegeremos con todo nuestro ser para que no pierdas tu luz —añadió Zuben, como si tratara de darme ánimos.
—Lo siento chicos, pero me gustaría tener tiempo a solas para procesar todo esto, por favor —mis ojos estaban humedecidos.
—No podemos dejarte sola, no en este momento —respondió Dabih—. En esta ocasión no te dejaremos morir sin tu luz. No me perdonaría si te pasa algo otra vez y no quiero que sufras como antes, por eso estamos todos aquí desde el comienzo, porque cumpliremos con nuestra promesa de hacer que logres crear tu propia constelación, aunque solo sea con uno de nosotros.
Lo observé, no comprendía lo que estaban diciendo ahora y pensaba en que sería más fácil si mis recuerdos volvieran, sabría lo que pasó en mis vidas pasadas.
—Recordarás tus vidas pasadas una vez que hayas pasado a la fase tres —Alpherg se hallaba muy cerca y habló en voz baja—. Mientras tanto, solo puedes conocer detalles importantes a través de nosotros.
Después de eso, el silencio reinó dentro de la Tienda Mágica: yo no seguí preguntando y los demás entendieron que quería "descansar" (algo que no me fue posible).
Me quedé dormida pasada la media noche, acostada en el suelo de la Tienda que, por suerte, contaba con almohadas. No sé por cuanto tiempo estuve dormida, lo cierto es que un grito me despertó; asustada miré a mi derredor, sin embargo, los chicos estaban dormidos. Me levanté con mucho cuidado, evitando despertarlos y caminé hasta la entrada del lugar. No había nada fuera de lo normal alrededor y me dispuse a acostarme nuevamente, cuando de pronto escuché claramente el grito de Spica y sentí una punzada en mi pecho que me hizo caer de rodillas, quejándome del dolor.
—¡Maia! ¿Qué tienes? —Gritó Skat, arrodillándose enfrente y me sostuvo por los hombros.
Los otros se acercaron al escuchar, atentos a cualquier posible ataque del enemigo.
—No lo sé, creo haber escuchado a Spica gritando y siento un dolor en el pecho.
—¿Qué rayos está pasando? —Indagó Heze —. ¿Es esto posible? ¿Había pasado antes?
—Sabemos que las almas gemelas están conectadas y si algo le pasa a una la otra puede sentirlo, pero, con Maia es extraño —contestó Alpherg—, ella parece desarrollar esa conexión con solo uno a la vez, para ser específico: con quien ame en esa vida.
—Quieres decir que, ¿ella en esta vida está enamorada de Spica? —Inquirió Heze.
—No comprendo —declaró Zuben—. En sus vidas anteriores siempre se enamoró de la nueva estrella que aparecía, nunca se conectó de nuevo con las estrellas anteriores a pesar de que también son sus almas gemelas de vidas pasadas.
Otra punzada me hizo soltar un quejido mientras apretaba mi pecho con ambas manos.
—Debemos hacer algo —comunicó Dabih con mucha preocupación en su tono de voz.
—No tengas miedo, estamos aquí y no te dejaremos sola —Skat trataba de darme fuerzas, él podía saber lo que sentía en ese momento a causa de su poder—. Chicos, lo que ella siente es debido a su conexión con Spica, él debe estar sufriendo mucho como para que sea tan fuerte el dolor ocasionado en Maia, pero les puedo asegurar que no es él de quien ella se enamoró en esta vida.
—¿De qué hablas? Siempre se conecta con uno solo, no puede amar a uno y estar conectado con el otro en la misma vida —declaró Heze.
—Eso era lo que creíamos hasta ahora; si lo que Skat dice es cierto, entonces yo confirmo sus palabras, desde hace mucho Maia no ha podido sacar de sus pensamientos a otra estrella que no es Spica, por eso es que dije que no comprendo —Alpherg tenía los brazos cruzados mientras hablaba.
Quería evitar que Skat y Alpherg siguieran hablando de lo que pensaba o sentía, no quería que dijeran nada de lo que ya sabían, así que me puse de pie, los miré con determinación y dije:
—Spica y Kaus necesitan de nuestra ayuda, debemos ir a rescatarlos.
—Maia, no es así de fácil...
—No me importa si es difícil —interrumpí a Dabih—, ellos son nuestros amigos y necesitan ayuda.
—Spica nos ordenó que te protegiéramos, es nuestra misión hacer que logres pasar a la fase tres con tu luz, así nos toque dar nuestra vida —Skat se mostraba reacio a salir en busca de los otros.
Me armé de valor y lo miré a los ojos.
—Entonces, si ustedes no vienen conmigo, iré sola —caminé con la idea de salir de la Tienda.
La mano de Dabih en mi hombro izquierdo me detuvo justo antes de salir.
—Yo voy contigo; aunque sé que es extremadamente peligroso, no te dejaré sola, te voy a proteger.
—Y yo también estaré a tu lado —proclamó Heze.
Me di la vuelta y miré a los otros.
—Si es cierto que quieren protegerme, deben venir conmigo, porque nada de lo que hagan me hará cambiar de decisión.
No les quedó de otra que acompañarme, aunque para ser sincera, yo ni siquiera sabía en dónde podían tener a Spica y Kaus, no obstante, los chicos iban a acompañarme a pesar de que estaban conscientes de mi ignorancia; pensé que lo hacían solo para protegerme, pues, de seguro los Black Holes me iban a encontrar antes.
Me informaron que debíamos desplazarnos muy rápido debido a que, al salir de la Tienda, la energía que emitían sería detectada. Zuben sugirió usar los portales en espiral para desplazarnos hacia el Edén, en donde podríamos encontrar el Árbol del Conocimiento y este nos revelaría el paradero de Spica y Kaus. La sugerencia fue analizada con mucho cuidado porque los portales en espiral, aun cuando eran un método muy efectivo para desplazarse de un lugar a otro, se corría el riesgo de salirse del curso y quedar en otro sitio.