Un caluroso día en invierno,
quién diría que en esta zona
tu estarías hirviendo.
Donde la lluvia se hace presente,
donde el clima se vuelve loco.
Son recaídas de mi voz,
que me atrapan mi dudosa razón.
Sintiendo miedo,
sintiendo ira.
Creyendo que mi vida,
tiene la eternidad en un trágico
instante de mi agonía.
Y soñaba en el amor,
Soñaba en la vida,
Pero tú me arrebataste,
Lo último que quedaba en armonía.
Y por qué arrebatarme la existencia,
solo soy un mortal,
que quiere ser por sí mismo
el amor para toda tu vida.