Capitulo 12

(El punto de vista de Alpha Brax)

Golpeando el escritorio con fuerza, decidí parar y tomarme un descanso. Llevo horas sentado en mi oficina pensando en qué estrategia debo seguir para deshacerme de estos delincuentes.

Tras patrullar el territorio y regresar a mi oficina, recibí un enlace mental de la patrulla que me informaba de que olían a rebeldes cerca. Envié un grupo de búsqueda para ver si podían capturar a uno y traerlo para interrogarlo, pero mis hombres no tuvieron suerte.

Escuché que alguien subía las escaleras y eso solo podía significar que alguna de las tres personas que permito en este piso venía a hablar conmigo.

Era mi padre, mi beta Jeremías o mi tercer al mando, Joshua. Cuando estuvieron lo suficientemente cerca, supe quién era por su olor.

Toc... Toc... Toc.

"Puedes entrar." Y así fue como vi a mi padre entrar en mi oficina con cara de preocupación. Me puse de pie al instante.

¿Qué pasa? ¿Pasó algo en la reunión? Te pedí específicamente que me contactaras.

Me hizo callar con la mano, pero aun así se tomó su tiempo para responderme. Se sentó al otro lado de mi escritorio y se sirvió café.

Me senté a esperar pacientemente su explicación. Me miró desde su café y tomó un sorbo. Suspiró y empezó a explicarme lo sucedido.

"Para responder a tus preguntas anteriores, no pasa nada, pero sí pasó algo".

Asiento con la cabeza y le digo en silencio que continúe.

"¿Te acuerdas del alfa David?"

Reflexiono sobre mi memoria, pero sí recuerdo que cuando tenía 10 años él vino con su hijo mayor, el futuro alfa.

—Sí, lo invitaste un día con su pareja y su hijo. ¿Por qué?

"Estuvo en la reunión de hoy." Decir que me quedé impactado sería quedarse corto.

El Alfa David no había asistido a ninguna reunión, ceremonia ni celebración desde la muerte de su pareja. Esto lo debilitó, igual que a mi padre. Se mudó con sus hijos, dejando su territorio a su beta, quien dijo que era el alfa por ahora, pero que no lo tomaría para siempre.

Por lo que he oído, el alfa David visita el territorio a veces, pero no se queda. Perder a su pareja le afectó. Juré que nunca amaría a una pareja, ni a nadie, en realidad. Fue una pérdida de tiempo encariñarme. ¿Y para qué? ¿Para que un día te lo arrebataran, dejándote roto y frágil? Jamás.

¿Por qué estaba allí? ¿Está recuperando su título para siempre?

Mi padre y Alpha David eran buenos amigos. Su pareja era la mejor amiga de mi madre. Así que cuando se fue sin decirles nada a mis padres, le dolió.

"No, no lo creo. Parece que se enteró de la situación deshonesta que todos están viviendo. Su hija fue atacada el otro día. Está bien porque es una Everlast", sonrió mi padre.

Dándole una mirada interrogativa dijo:

Esas fueron sus palabras. No las mías. Al menos un poquito del David que una vez conocí sigue ahí, tan arrogante como siempre, te lo aseguro. Sonrió de nuevo, recordando a su mejor amigo y cuánto lo extrañaba.

"No sabía que tenía una hija. ¿Tiene más hijos?"

"Su hijo mayor, y pronto alfa, es Nathaniel. Luego están los del medio, que también son gemelos. Daniel y Alexander, no sé qué rango tendrán. Y por último, su hija menor y única, Evangeline", dijo mi padre mientras tomaba un sorbo de café.

"¿Qué quieres decir con que pronto será alfa? ¿Tiene mi edad, no es cierto?", le pregunto a mi padre, porque es realmente inaudito que un Alfa espere a heredar su título. Normalmente, a los 18 años, el hijo mayor recibe el título mientras su padre lo deja.

"Parece que Alpha David le ha ocultado esa parte."

Sin palabras. Eso es todo lo que estoy ahora mismo.

"Yo... no... no entiendo... ¿Es posible? ¿Que le quite el título y el paquete a su propio hijo?" Estoy un poco molesto porque si fuera yo, sentiría que mi padre me consideraba demasiado incompetente para asumir tal responsabilidad.

Parece posible. Pero tuvo una pequeña pelea con Jeremías.

Al oír esto me pongo de pie de un salto.

"¡¿QUÉ?! ¡Te dije que me contactaras si pasaba algo!"

"Lo tenía todo bajo control. No tenías de qué preocuparte. No fue una pelea física, sino más bien verbal."

Controlo a mi lobo porque siento que intenta apoderarse de mí. En momentos como estos, detesto mi temperamento. Pequeñas cosas pueden hacerme enfadar, por eso tengo fama de ser cruel. Nunca he tenido el control de mi lobo, pero no me preocupa.

Tomo respiraciones tranquilizadoras y puedo sentir que me relajo así que me siento en mi silla y miro a mi padre.

"¿Qué se dijo?" pregunto.

Mi padre se aclara la garganta y deja el café.

En resumen, el Alfa David entró en la sala de reuniones y preguntó si podía hablar con los miembros del consejo a solas en el pasillo. No fue hasta unos minutos después que oímos gritos. Todos en la sala decidieron levantarse a ver qué pasaba, pensando que era una emergencia. Al llegar al pasillo, Nathaniel le decía a un miembro del consejo que lo respetara y que no se dejaría menospreciar. Fue entonces cuando Jeremías intervino y le dijo a Nathaniel que mejor cuidara su tono y que hablara con respeto a los miembros del consejo, y luego lo llamó chucho. A lo que Nathaniel respondió llamando a Jeremías cachorro, considerando que es mucho más alto que él. Jeremías le pidió que lo repitiera si quería. A Nathaniel no pareció molestarle mucho Jeremías, así que respondió « ¡Abajo, muchacho !». Hicieron falta unos tres guardias para contener a Jeremías.

En ese momento ya estaba temblando en el asiento. ¿Quién se atreve a hablarle así a alguien de mi manada? ¡Un beta, nada menos!

Pero eso no fue lo que nos conmocionó. Amenazó a todos antes de irse, incluyéndome a mí. Sin embargo, no fueron las palabras lo que me asustó, sino cómo las dijo.

No pude soportarlo más, así que me transformé, destrozando mi ropa en el proceso. Mi padre retrocedió, pero mantuvo la calma.
"Braxton, necesitas calmarte. Continuaré si se transforma de nuevo. Iré a buscarte un par de pantalones deportivos a tu habitación".