Capítulo 1

-Loren, traeme dos tazas de té - dice la señora Carmen, yo asientos y me retiro a la cocina

Al entrar me encuentro a Sofía, preparando la cena, pasa por su lado, sin cruzar miradas, y preparó las dichosas tazas de té. Al tenerlas lista, la coloco sobre una bandeja y salgo con esta en mano, para dársela a la señora Carmen y su invitada.

-Oh, querida, ningún problema, cualquier hombre caería a tus pies - escucho decir a la señora Carmen

-¿Y si no se quiere casar conmigo, Carmen? - pregunta su invitada

-Pfft, tonterías, el te va adorar

Entro a la sala, y la señora Carmen me mira con una sonrisa, la cual dudo en corresponder.

-Loren, llama a Peter, y dile que le necesito - ordena la señora Carmen

-En seguida - respondo

Dejo las tazas y me retiro, dirigiéndome al teléfono, para realizar la llamada; cuando tomaba el teléfono, este me fue arrebatado por Louis.

-¿Estás enojada, amor? - dijo él

-Alejate - respondí cortante

-Amor… - dice en un intento de acariciar mi mejilla, pero aparte su mano con furia

-No me toques - respondo

-¿Es por lo que paso ayer, no? 

-Alejate de mí - le digo 

Sus pasos acortaban la distancia y lo único que podia hacer era retroceder.

-Alejate o lo lamentarás - advierto

Hizo caso omiso a mis palabras y continuó acercándose ada vez más, en mí florecío unas ganas de darle una somanta de palos, y tenía aue reprimir mis deseos; lo empuje y salí de ahí, dispuesta a decírselo a la señora Carmen.

-Señora…

-¿Si, Loren? - dice intrigada

Mi respiración se vuelve agitada cuando lo veo llegar a la habitación y mirarme retadoramente.

-Su hijo… m-me esta fastidiando el trabajo

-Louis, deja hacer su trabajo a Loren 

-Eso hago, solo le digo que debe hacer

Mentiroso. Abro la boca dispuesta a decir toda la verdad, pero a mi mente viene la odea de ser despedida, si eso sucede… ¿Cómo cuidaré a mi bebé? 

Vuelvo a mi compostura y miro a la señora Carmen, antes de pronunciar siquiera una palabra, miro a Louis y luego a la joven que esta de visita.

-Señora, me retiro

-Claro, sigue con tus quehaceres, Loren - dice la señora Carmen

Asiento y salgo de la sala, entro a la cocina y empiezo a cortar la verdura para los complementos de la cena. Sofía entra a la cocina con una bolsa en sus manos y solo la miro con intriga.

-¿Que traes ahí? - le pregunto

-Unas cositas… para tí - dice feliz - y tu bebé 

Me entrega la bolsa y la acepto dudando en abrirla o no, la abertura es mínima y la curiosidad me mata, y entonces es cuando veo lo que contiene; quedó estupefacta con cada detalle por parte de Sofía, alzo mi mirada con una sonrisa en mi rostro, voy hacía ella, dándole un abrazo y ella alegre me corresponde.

-Ve a tu habitación, y los ves con mas cuidado - dice sonriendo ampliamente

Asiento y voy a mi habitación con la bolsa entre mis manos; cuando cruzo la puerta de mi habitación, pego con firmeza la bolsa a mi pecho, y las lágrimas recorren mis mejillas, las aparto con la palma de mi mano, y dejo la bolsa en la cama, me siento y veo cada objeto que compró Sofía.

Dos trajes para recién nacido, un par de zapatos, dos biberones y un par de juguetes para bebé; mi vista se nubla, pero de alegría, gracias Sofía; el sonar de la puerta abrirse me sobresalta, me levanto y miro con repugnancia a Louis.

-Vete de aquí - le digo

-¿Lo vas a tener? - dice mirando las cosas que yacen en lo amplio de la cama

-Fuera de aquí

-¿Olvidas que es mi casa? - dice tomando las prendas de bebé - Aborta

-¿Qué? - digo sorprendida, ¿Quién se cree para decirme que hacer? - No lo haré, no etes nadie para decirme que hacer con mi cuerpo

-¿Que dirá Carmen cuando se enteré que su sirvienta esta embarazada?

-Fuera de aquí - digo con rabia