Y entonces tú, rompes la calma.
Me haces volar, abres mis alas.
Me has provocado una revolución de amor, vuelvo a sentir que tengo ganas.
Sin avisar, como si nada. Llegas a mí y me desarmas.
No me imagino ya sin ti la vida y soy una versión que no esperaba.
Revolución
Amaia Montero