4 Miedo a conocerla.

Jeremy regresó a la mansión en su auto convertible. Por la reciente muerte del patriarca, había problemas en la oficina por el asunto de la presidencia, varios miembros de la familia se estaban disputando el cargo, a pesar de que el anciano desde hacía mucho tiempo había dejado expresa su voluntad, de que Jeremith fuera su sucesor.

La directiva estaba dividida, algunos estaban a favor de Jeremith, otros a favor del padre de Ethan, pues era el hijo primogénito y siempre había querido el cargo, pero Jeremith no pensaba quedarse de brazos cruzados, ese puesto le correspondía por voluntad del abuelo.

Detrás de Jeremith también llegaron Alan y Ethan, ellos eran en los que él más confiaba. Los tres pasaron al estudio a revisar algunos documentos mientras llegaba la hora de la cena.

Cuando entraron al estudio, encontraron a Fillit preparando algunas cosas de su labor. Jeremith lo vio y le dijo:

—¿La trajiste?

—Sí señor, ella lo está esperando con ansias. —Ethan y Alan se miraron, Jeremith arrugó el ceño.

—¿Por qué dice que me espera con ansias?

—Su esposa se puso muy contenta cuando le dije que estaba usted vive. ¿Le digo a la señora Lauren que venga a verlo?

—No —Dijo mientras se quitó la chaqueta—. Tengo que hacer algunas cosas, la mandaré a llamar más tarde. —Fillit agregó:

—Entonces me retiro, con su permiso señores.

Alan miró a Jeremy y puso una sonrisa maliciosa.

—¡Así que la tienes entusiasmada eh! —Jeremith endureció su expresión y respondió:

—Que no se entusiasme demasiado, porque en cuanto aclare esta situación, anularé ese matrimonio.

Alan se sentó en una silla de la mesa de trabajo mientras comentó:

—Pero te veías muy enamorado de ella —miró a Ethan—. ¿Verdad Hethan? —Él levantó la ceja.

—La verdad es que nunca estuve muy seguro de eso, a Jeremith no le agradan las chicas corrientes como ella.

—¡Vaya! no creí que tuvieras a Lauren en ese concepto de chica corriente. —agregó Alan.

—¿Qué quieres decir? —preguntó Ethan y puso serio el rostro, Alan lo juzgó con la mirada.

—Es que te hiciste muy cercano a Lauren en los días posteriores de la supuesta muerte de Jeremith.

—Bueno, solo intenté ser cordial con la viuda de mi primo.

—Me dio la impresión de que ella te gustaba. —Ethan se ruborizó.

—¡No seas idiota Alan! jamás me fijaría en una mujer como ella.

Jeremy lo miró con cierto reproche, Ethan cayó en cuenta de lo que acababa de decir:

—Lo que quiero decir es que jamás me fijaría en la esposa de Jeremith… aunque él esté muerto.

En sus adentros pensó:

"La verdad es que Lauren me gusta, ya que Jeremith piensa divorciarse de ella, no desaprovecharé esa oportunidad, aunque todos van a criticarme.”

Comenzaron a trabajar, por un rato sólo hubo silencio, los tres estaban concentrados revisandodocumentos de los últimos movimientos de las acciones, no tenían algún tema de qué hablar salvo de la empresa.

Jeremith intentó olvidarse de Lauren mientras estaba trabajando, pero no pudo alejarla de sus pensamientos. De pronto rompió el silencio y les dijo:

—¿Ustedes qué piensan… de Lauren?

—¿Qué qué opinamos de tu esposa? —agregó Alan.

—Ustedes la conocen más que yo, recuerdo ni cómo es su cara.

—¿Necesitas nuestra opinión? —Jeremuth alzó el tono de voz y puso el puño derecho sobre la mesa mientras los miró fijamente.

—Arriba en mi habitación hay una mujer que dice ser mi esposa, pero no me atrevo a subir esas escaleras para ir a verla.

—Debes hacerlo. —Respondió Alan.

—No tengo idea de qué pasará cuando la conozca.

—Se supone que hablarás con ella acerca de lo que quieares hacer, anular ese matrimonio. —Dijo Alan.

—No sé cómo es físicamente. Quisiera poder recordar por qué me casé con ella. —Alan agregó:

—Quizás es picante, fue linda contigo, te volvió loco; se aseguró de tenerte rendido a sus pies.

—Mo soy del tipo de hombre que se deja llevar por una falda bonita.

—Nosotros tampoco entendemos cómo tomaste esa decisión de casarte, dejaste a Bridgette sin darle explicaciones acerca de por qué la habías cambiado por otra. —Ethan agregó:

—A mi me parece que Lauren no es mujer para ti, ella no es de tu tipo.

—Lo sé, esa mujer no pertenece a mi clase social.

—No me refería a eso, sino que a ti siempre te han gustado las chicas más —Ethan señaló un par de grandes senos con sus manos—. Ya sabes, te gustan con buenos atributos, Lauren es hermosa, pero es muy distinta a lo que siempre has buscado en una mujer.

Alan lo miró y puso una sonrisa maliciosa.

—¡Vaya Ethan! así que estabas observando detalladamente a la viuda de Jeremith. —Erhan frunció el ceño.