UNA NUEVA VIDA

Ya era la hora de "la gran cena familiar", mis padres ya habían llegado y mi madre trajo la-saña para ambas mientras los hombres de la familia consumían su deliciosa bebida; la estábamos pasando bien hablando de temas sin importancia. Hasta que se me ocurrió la gran idea de pararme y recoger la mesa.

-Rouse espera, primero debo hablar con ustedes.-interrumpió mi padre haciendo que volviera a donde estaba.-

-verdad padre, ¿porqué me hiciste perder la tarde con mis amigos? espero y sea importante. 

-chicos es  que va haber un gran cambio en nuestras vidas.

-madre me asustas solo digan lo que pasa de una vez.

-Rouse  la razón que tu madre y yo te pedimos que no ingresaras a la universidad es porque no hubieras podido avanzar mucho en el semestre.

-y que tiene que ver esto conmigo, eso solo afecta a la enana.

-bueno es que el tema es que este fin de semana nos vamos a mi lugar de origen.

-¡QUÉ!-dijimos en coro.

-chicos escuchen a su padre antes de empezar a reclamar.

-hijos nos vamos porque creo que es tiempo que los Vladimir vuelvan, y tu James ya han pasado casi dos años que debiste haber ingresado a la academia además Rouse en dos semanas es tu décimo octavo cumpleaños  y también debes de ingresar.

-en serio padre, ¡voy a ingresar por fin a la academia!- dice James con gran euforia.-así podre aprender a controlar mi poder al 100%.

-si hijo.- dice con un gran sonrisa.-veo que todos estamos bien con la noticia menos tu mi pequeña ¿qué tienes?

-padre es que la idea de estar en la academia no me cuadra, tu sabes como soy, todo esto sera muy pesado para mi, seré el centro de atención por ser tu hija y ademas de ser un bicho raro.

-hija no te verán como un bicho raro, te verán como una persona especial.

-en serio crees padre que eso me tranquiliza, simplemente no quiero que se enfoquen en mi, no solo puedo estudiar en otro lugar.

-hermanita allí solo viven vampiros y es la única escuela que hay.

-entonces me quedo en casa, solo no quiero estar allí.

-Rouse, lo siento pero es lo mejor para ti y para todos, ya esta decidido el sábado sale nuestro vuelo.

-en verdad me vas a mandar a un lugar lleno de vampiros que están intentando controlar su sed, a mi que por todo mi cuerpo corre lo que saciaría su sed.

-Rouse crees que te pondría en peligro, pequeña eres mi vida.

-como tu digas, mejor me voy a mi habitación.

SÁBADO.

Estamos todos en el carro esperando por fin llegar a nuestro hogar  a descansar de este viaje sin fin.

Estaba escuchando música con mis audífonos cuando mi hermano hala uno de ellos.

-OYE, estas loco, por poco y me quedo sin oreja.

-huy perdón, es que no me escuchas.

-esta bien, que quieres decirme.

-que ya llegamos.

-al fin.

cuando fuimos a salir del auto mi padre nos detuvo.

-alto, a donde creen que van.

-yo a descansar a mi cuarto.

-no chicos, ustedes siguen unos cuantos kilómetros mas.

-¡QUE!- dijimos al mismo tiempo.

-si, ustedes van directo a la academia.

-no deberían al menos dejarnos organizar nuestros cuartos.

-Rouse lo que tu padre quiere decir es que de hoy en adelante vivirán en la academia hasta que estén preparados.

-¿QUÉ?.... ya no viviré con ustedes si no con una manada de desconocidos.

-hija tranquilízate, todo va a estar bien y nos podrán visitar cuando lo autoricen.

NARRADOR POV. horas después

Rouse aún estaba en shock en la puerta de la academia.

-enana tranquila siempre estaré para ti; ademas con mi don estaremos donde queramos y nadie lo notara.

-gracias, en serio presiento que esto va a cambiar muchas cosas.- mientras se pone a pensar en lo que ha pasado en solo una semana.-

y no podría estar mas acertada con su presentimiento, pues si en unos días su vida cambio mucho, pues paso de estar aburrida en su casa a estar en un país diferente, rodeada de muchos vampiros, separada de sus padres y viviendo en una escuela con un  gran jardín, rodeada  de un bosque y su estructura se ve que lleva muchos años. Creía que era mucho, no sabía lo que ha de venir.

-Rouse, Rouse, enana me estas asustando espabila.

-ah, que, como, que paso.

-enana te perdí por un momento.

-perdón que decías.

-que es hora de entrar, el director nos espera.

-ok.