Crecí en un pequeño pueblo, en donde todo se sabe, pero nadie escucha, nadie está absorto de pecado, pero van a la iglesia y resan, pidiendo perdón por lo que ya an echo y volverán hacer. Mis padres son jente de bien, o eso dicen, en realidad mi papá es un alcohólico, y mi madre finge ser una buena madre cuando, lo único que hace es golpearme cuando no cuido a mi hermana de un año, los gritos son constantes, los golpes, bueno los golpes son un hábito, cada que mamá me be haciendo algo malo, soy golpeado cual perro, sin piedad, pero no se crean que es idiota, jamás dejara marca visible, y de hacerlo solo dira en la escuela que me caí y me lastime, mi padre ea higual con ella la golpea siempre, pero mamá dice que es perfecto, los extraño es el sótano jamás e entrado, solo una vez quise entrar y papá me pegó con el cinturón, tan fuerte que las sábanas de mi cama esa noche se tinieron totalmente de carmesí.
Hoy cumplo 11 años, y se imaguimaran que me para una fiesta de cumpleaños llena de globos, y dulces, pero no tal y como todo los días debo, hacer mis tareas, ir a la escuela, y sonreír, decir ante todos que mamá es dulce, y que papá me aludo con la tarea, cuando en realidad papá llego ebrio por la noche y me empujó por las escaleras, quiero creer que por lo ebrio que estaba solo fue un error, pero lo dudo mucho.
Cuando llegue a la casa encuentro la casa totalmente en silencio, sin musica ruidosa, ni gritos por doquier, es extraño mamá debería estar en casa, y papá ya debería de haber llegado de la casa hace horas, corro buscándolos, pero no me encuentro a nadie, me empiezo a preocupar a no encontrar a Deisi mi hermanita, de la nada un grito me sorprende, al darme cuenta de donde llegaba el grito me asustó, la voz era femenina, y el llanto de la bebé comienza a resonar en mis oídos, porque mamá estaría, gritando en el sótano con la bebé, cuando dice que es un estorbo, de golpe el llanto sea, pero el grito de mamá vuelve a resonar en el cuarto, sin pensarlo habrá la puerta con mucho cuidado, pera que no me escuchen, pero la sorpresa es inmensa al darme ccuenta, que las cuatro paredes están decoradas con mucha sangre, sangre chorrea por doquier, del miedo me paralizó, cuando miro hacia abajo de la escalera papá sostenía un bate, y en las manos de mamá se encontraba... se encontraba mi dulce hermanita tiesa manchada de sangre que claramente era a causa de la contusión, de su cabeza, los gritos eran causados por la mujer que se encontraba en el suelo, lloraba desconsoladamente, su rostro estaba quemado, todo el perfume izquierdo era un desastre, por como se arrastraba en el piso queriendo llegar hasta donde mi padres estaban, se notaba claramente, com sus piernas estaban quebras, pero eso no era todo el sin número de heridas que tenía esa mujer me dieron arcadas, tenía la cara desfigurada de tantos, golpes heridas y cortas, que se extendían por todo su anoréxico cuerpo
-p-por qué la m-ataron, mi hij-a... era solo un-a niña-la mujer tendida en el suelo comienza a hablar en un hilo de voz, se notaba como los gritos anteriores le habían dejado.
-Jajaja, esa porquería, que llamas hija, gritaba mucho, ya me tenía arta- mamá pronuncia aquellas palabras que creía que solo en películas podía escuchar
-Por eso decidimos acabar con su inmunda vida- termina, mi padre
-Aunque sabes... me arrepiento, me hubiera gustado haberla criado un poco más, eso hubiera sido más divertido, siendo tan pequeña, solo se murió- agrega nuevamente mi madre, rebosando una cara de disgusto, y habaldo en tono infantil.
-Al menos miremos el lado bueno podremos comer carne hoy-
-Que- dice la mujer que había quedado en silencio, mientras lloraba por Deisi, que por lo antes mencionado era su hija
-Si jamás e probado la carne de una niña, pero debe ser deliciosa-
Por el miedo retrocedo, tropezando con el escalofrío y haciendo ruido, o no, si se dan cuenta me matarán.
-Amor -llama papá la atención de mamá
-si-
-hay que apurarse antes que la rata entre- esas últimas palabras las dice con malicia y con una maquiavélica sonrisa.
Salgo corriendo de ese lugar, tomo mis cosas y salgo de la casa, ni puedo huir, pero si fingir haber llegado tarde, lo que acabo de ver me perturbó, por que mis padres tenían a esa mujer enserrada, porque mataron a mi hermana, y porque no me sorprende, corro y corro, llegando a si a la iglesia, ya adentro comienzo a rezar,mientras mis lágrimas caen, el miedo me a invadido por completo, ya no se que hacer, si vuelvo me matan, pero si no vuelvo me moriré de habre, en ese punto recuerdo las palabras de papá, se...se pensaban comer a Deici, no claro que no yo no escuché eso lo habré imaginado, mis padres no so tan... tan malos como para matar a su hija... pero y si ... no no lo son, comienzo a repetirme una y otra vez lo mismo, hasta que me quedo dormido, de tanto llorar.
Ya todo está oscuro, ricien deperte, sigo en la iglesia, no hay ni un Alma, a excepción del padre Arturo, que me dijo que si quería me podía quedar, cuando me levanto para caminar hasta el padre, para pedirle que me lleve a casa, ya estoy convencido de que eso fue solo una pesadilla, siento la voz de mamá
-amorcito, me tenías preocupada, que haces a estas horas en la calle, solo y sin haver avisado, tu papi y yo estábamos preocupadisimos- comienza a abrazarme y repartir besos por doquier, pero el aroma a sangre que se penetró en su cuerpo, me hace entender que no había sido mi imaginación, comenzó a temblar, al sentir como me toma de la mano y se dirije a la puerta de la iglesia, al salir de esta, su tono que antes había sido dulce cambia, a uno siniestro -creiste que te escaparía rata-
Haci transcurrieron las pocas calles de distancia entre mi casa y la iglesia, al llegar mi padre me esperaba con una sonrisa extraña, sentado en la mesa, la cual estaba llena de platillos, al recordar sus anteriores palabras corro hasta el baño por las arcadas, al entrar al baño, tranco la puerta y comienzo a vomitar, el terror de lo que puede pasar acelera mi pulso a un nivel crítico, pero al sentir algo sobre mi hombre y boltiarme en dirección a la cprtinadel baño, la vista hace que mi corazón que antes latía cual tren balla, detenerse drásticamente al ver a la mujer del sótano, en la ducha, pero esta esta completamente desmembrada, la sangre corre por toda la ducha, llenando haci las cortinas pálidas, corro saliendo del baño, si tam solo pensar en lo que se venia, al salir tranco la puerta del baño y comienzo a repintar con dificultad