Mi noche fue agotadora, mi mamá se había enfermado y papá la llevo a urgencias, estaba preocupada y no pude dormir bien, ni siquiera llegaron a la mañana siguiente. Tenía que ser grave, fui a la escuela y ahí estaba Esteban esperándome y al otro extremo Pablo.
Hable con Esteban un rato y fui rápidamente con Pablo, lo entendió, aunque se le está pegando lo curioso o lo chismoso diría yo.
Me preguntó que fue lo que me dijo Esteban, no le respondí y le empecé a hacer trencitas en su cabello, no alcanzaba a amarrarlas bien así que le hice colitas y se veía tan chistoso que le tome una foto.
Las primeras clases no se lo que nos explicaron estábamos jugando con Pablo en el celular, ya era la hora del descanso y me subí a su espalda.
- Corre.
- Oye enana, eso no se hace - Me baje.
- Le quitas el sentido a la adrenalina.
- ¿Estás loca verdad?
- Obvio - Sonreí mientras agarre el lazo que colgaba de su buso.
- Déjame.
- Chillón - Hice pucheros y camine más "rápido", en menos de nada me alcanzó y nos dirigíamos hacia la cafetería.
Esteban me llamo y fui con él a otra mesa, deje a Pablo comiendo y pude ver cómo estaba tocando mi comida. Me acerque a Esteban y chocamos puños, me dijo que nos veíamos en fin de semana en su casa y yo acepte.
Volví con Pablo mientras él se embutía rápidamente lo último de mi comida, lo mire mal y solté una risa, el poste con patas come mucho pensé, aunque me gustaba pasar el tiempo con él, no sabía que se iba a convertir en las pocas personas que estarían conmigo o eso creo. Llego el fin de semana y Esteban me recibió, claro Clara estaba ahí, sentada mirándome fijamente. Después de un largo tiempo, ellos empezaron a tener sus momentos románticos, empecé a jugar con su perro Scott, me dejo llena de pelos antes de irse. En eso Clara se levanto y se posiciono en frente mío.
- ¿QUÉ LE VES A MI NOVIO? ¿TE GUSTA O POR QUÉ ESTAS AQUÍ? - Uy odie el sonido que emitía, era tan desesperante que quería que la callaran - ¡DEJA DE IGNORARME Y RESPONDE! -Esteban la jalo del brazo y la beso.
- Esteban me tengo que ir - Sonreí y salí de la casa, Esteban me alcanzó y me abrazo.
- Perdónala es que no se que le pasa.
- Si te trata mal, mándala a la quinta porra. ¿okey? - Asintió y entró en su casa.
Le había escrito a Alejandro como me sentía en ese momento, esté chico paso de ser nada a alguien incondicional en mi vida, mi gusto por Pablo seguía, pero no tan fuerte como antes. Llegue a casa y me tire en el suelo, Clara está loca... Porque de todas las chicas ¿Yo?... ¿estaba bien?... ¿Esteban y yo?... Solté una pequeña risa y me quede dormida hasta el siguiente día.
Como siempre Esteban estaba a un extremo y Pablo al otro, me acerque primero a mi mejor amigo, pidió hablar conmigo en la cafetería y le dije que nos veríamos allá, fui con Pablo y llegamos al área deportiva... dios como la odiaba, no era por problemas, solo que en el deporte soy buena como defensa en el futbol y en los demás muy mala en serio. Empezamos a cuadrar fechas de los próximos campeonatos con el profesor, que alivio que terminamos rápido y nos dio las horas libres.
Pablo agarro mi mano y fuimos a un parque pequeño del colegio, me senté en el suelo y que alivio. El poste de luz es muy bueno es los deportes, pero no muy bueno con la mente, creo que esa es mi fuerza. Mi mente es lo que más sé utilizar, se recostó en mis piernas y empecé a peinar su cabello. Se quedo dormido y tome su mano mientras subía el buso, dio un brinco y me miro fijamente.
- No.
- ¿Lo hiciste?
- Lo siento - Soltó un quejido y se levanto - ¿Está todo bien?
- No - tomó mis manos y las besó.
- No tienes que contarme nada, tranquila.
- Gracias poste con patas.
- De nada, Princesa.
Rei un poco, Alejandro ya me había dicho eso, así que me recordó a él. Terminaron las primeras clases, iba caminando con Pablo mientras hablaba por teléfono con Alejandro. Pablo estaba haciendo ruidos raros y diciendo cosas raras, que ni yo le entendí. Esteban me hizo una señal que fuera a la mesa de él, camine hacia allá y me posicione en frente de él.
- Hola Dayan - Dijo Clara mostrando una sonrisa en su rostro. La ignore la verdad, cuando pone esa cara es porque quiere pelea.
- Dayan, quiero acabar mi amistad contigo. - Esas palabras me congelaron, eso sí no lo veía venir.
- ¿La razón?
- Es que ya no te soporto, en serio, no aguanto más estar cerca de ti. - Me empujo.
- Cariño ya déjala con eso es suficiente. -Agrego Clara.
- Okey, pero quiero saber la razón.
- ¡PORQUE NUNCA TE CONSIDERE UNA AMIGA! - Trate de no parpadear mucho, dolió, pero no le iba a permitir que me viera así. - LÁRGATE AHORA ¿SI? ERES UN PROBLEMA EN ESTE MUNDO DAYAN, NO TE QUIERO VER MÁS.
- ¿Es por ella? - Me volvió a empujar y vi como Pablo llego rápidamente, pero puse mi mano en su pecho deteniendo lo.
- A ella no la metas en esto, solo lárgate no quiero saber nada de tu vida, haz lo que quieras con tú vida Dayan... Mátate si eso es lo que quieres... ya... ya no me importa como estés. - Pablo se acercó a mí, había quedado paralizada. Aun estaba procesando todo.
- Si los vuelvo a ver cerca de ella, juro por sus vidas que los acabo - Dijo Pablo, muchos de los que escucharon la conversación se empezaron a reír y gritar en un coro.
- ILUSA - Esteban y Clara se unieron aquellas voces, no podía entender lo, Pablo me saco de allí y me abrazó cuando llegamos a nuestro lugar.
- Perdón - Lo aleje de mí y salí corriendo. Solo esperaba que no me siguiera y eso hizo. Les juro que lo siguiente que me paso me dejo confundida y más devastada también.